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Dedicado a hiildasantoos


Mi teléfono se ha mantenido apagado este último tiempo, no quiero saber nada con nadie y solo ha sido Nick el que me ha liberado de mi departamento. Anna y Wally quisieron asistir al entierro de mi padre pero yo no pude, no quise y tal vez sea una cobarde pero no estoy lista para decirle adiós a una persona que me dio sus brazos cuando nadie estuvo.

A una persona que me demostró que lo que importa no es la tecnología o el avance que da la sociedad porque todo tiene su fin y por más doloroso que sea debo admitir que este era el fin de mis visitas diarias a la clínica y mis largas charlas sin interrupción con una de las personas más interesantes.

Hubo un día donde quise escapar a la biblioteca de los barrios bajos para hablar con la dueña de la misma pero esta se encontraba cerrada cosa que solo empeoro mis ganas de avanzar. Sí, debería hablar con Nicholas ya que es mi mejor amigo y una persona de confianza sin embargo no me siento cómoda con él, culpo a mi dolor por ello.

No he hecho nada productivo, solo volver a investigar sobre los estudios y anotarme en una universidad del estado ya que no estoy para gastar todo lo que se me dé la gana. 

- ¿Has hablado con el banco? 

 Anna no me ha dejado en paz este último tiempo, después de que Nick me acompaño a hacer los papeles de difusión solo he escuchado del dinero que mi padre me dejó.

 No tengo claro la cantidad que sea y no me interesa mucho en realidad, solo quiero enfocarme en seguir tirada durmiendo ya que es lo único que me gusta hacer estos días. Las semanas parecieran no tener fin, creo que han pasado dos recién y lo único que obtuve fue comida chatarra con una cantidad excesiva de quejas de parte del matrimonio. 

- No, aun no. Lo haré mañana - digo mientras camino a la cocina. 

- ¡Ni se te atreva Rosaline! ¡Agarras tus cosas, te vestirás e iras al banco! - Los gritos de Anna hacen que ruede los ojos. 

-  ¿O sino qué? - Preguntó desafiante mientras abro la nevera. Anna la cierra antes de que pueda sacar algo de la misma.

Su mirada de molesta hace que solo sienta una leve vergüenza hacia mi por lo bajo que estoy cayendo, es como si me hubieran soltado la mano para que mi autoestima cada día descienda un veinte por ciento más y sólo he sido una molestia pero intento que esos comentarios no aparezcan en mi mente.

- Si no has hablado con el banco, te quiero fuera de mi apartamento para cuando vuelva Rosaline. Estoy harta de esta actitud tuya, han pasado dos semanas y te has convertido en un peso para mi familia y para mi. Seré paciente, te daré hasta la noche para que desalojes o me digas que ya has vuelto a buscar trabajo. 

Las palabras de Anna me caen como agua fría y no puedo contradecirla en nada ya que ella ya se ha marchado a quien sabe donde. No puedo negar que tiene razón, este tiempo he sido una floja que solo se ha encargado de sufrir y tal vez parezca exagerado pero aun no puedo asimilar la idea de tener a mi padre tan lejos mío. No, quizás no sea la excusa perfecta no obstante es la única válida que tengo.

No tardó en agarrar por primera vez mi telefono desde hace tiempo, al encenderlo me doy cuenta lo bien que se siente dejar un aparatito que solo sabe controlar tu vida a través de apps innecesarias y apenas los mensajes me llegan los primero que encuentro se tratan de Styles.

Solo al leer su nombre me siento enferma queriendo odiarlo no obstante algo en mi no me permite aquello así que prefiero ignorar sus mensajes  y paso a los de Louis. Si, me ha despedido pero no es que tengamos una mala relación, no que yo lo sepa. 

Apenas logró abrir mi chat cuando el timbre suena haciendo que deje la tecnología un rato más de lado como si hoy estuvieran en contra de que sea consumida por los avances de la sociedad.

- ¿Qué quieres? - Pregunto de mala gana al verlo parado. 

Lleva una vestimenta nada extravagante cosa que me parece bastante extraño viniendo de él no obstante es un detalle que prefiero pasar desapercibido, bajo sus ojos aparecen unas notables ojeras sin embargo la leve sonrisa de su rostro hace que me confunda. 

- Mamá me hubiera dicho que siguiera mi sueño y buscara mi camino. Ahora que se ha ido, supongo que quiere verme avanzar y el primer paso es venir para disculparme por... Todo.

Styles me mira esperando que reaccione pero mi única respuesta es hacerme a un lado invitando a pasar con un par de señas y tal vez debería haberle cerrado la puerta en la cara pero algo me detuvo. Quizás ha sido mi corazón que se aceleró apenas abrí la puerta o la curiosidad que me invadió al escuchar sus palabras, me tendría que sentir avergonzada por estar con unos simples shorts, una sudadera más grande de lo normal y mis pantuflas de conejito no obstante lo que menos voy a hacer ahora es cambiarme como una persona normal.

Las preguntas solo hacen que me de más molestia tenerlo tan cerca sin embargo decidió ser amable por primera vez con él para ofrecerle algo de tomar, camino hasta la cocina para preparar dos cafés simples.

- Es un muy lindo lugar, los colores combinan de maravilla. 

Su voz hace que me sobresalte y choque con algo, el café en mi ropa no se ve nada bien pero... ¡Mierda, otra vez su ropa no! 

Una pequeña risa se escapa de su parte haciendo que me sienta algo intimidada no obstante su sonrisa hace que mis señales de alerta desciendan lentamente.

- Supongo que esta es la forma en la que debí haber reaccionado la primera vez - dice mientras agarra su buzo para quitarselo -.  Lo bueno es que no traspasó hacia mi remera, es mi favorita. 







Siguente cap en pocos días, haré el intento.

Espero que les guste.

Bsos Vic :)

I'm not your stereotypeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora