012.

2K 201 47
                                    

- No se de lo que hablas. - se dio vuelta y miro a la chica que aun robaba cada pensamiento de su cabeza, pero seria por poco, porque trataría de que toda esa obsesión que tenía con ella, se acabe Si, era una obsesión porque estaba segura que por ella no sentía absolutamente nada. Ni cariño por ser una de sus exnovias -

- Vamos Joy. - se acerco a ella. - es muy bonito el Porsche de Seulgi no, - hizo una mueca. - Es un hermoso auto ¿no es verdad?

- No se de lo que hablas. - repitió ella, nerviosa. -

- ¿En serio? - Joy asintió, insegura - no recuerdas a ¿patito feo?

- Claro.

- Bueno, te lo contaré. Tú y tus amigas hicieron una apuesta, donde el premio era ese hermoso Porsche gris de Seulgi y la victima de aquella apuesta no era ni más ni menos que patito feo. - sonrió falsamente. -

- ¿Quién te lo dijo?

- Un pajarito. - contesto sin más. - tú sabes muy bien que los secretos vuelan rápidamente en este instituto y en cualquier momento puede llegar a ella.

- ¿Quién te lo dijo Taeyeon? - pregunto Joy duramente. -

- Ni creas que te lo diré Joy.

- Entonces, ¿para qué me comentas esto?

- Para hacerte saber que yo también puedo jugar.

- ¿De qué forma? - pregunto ella. -

- Que pasaría si patito lo supiera antes de tiempo... ¿te odiaría no es así? - Joy asintió. - pero de todas formas a ti no te importa, para que ha de importarte si tú no sientes nada por ella ¿o sí? - abrió los ojos sorprendida, al no ver una respuesta de su chica. - no me digas que te estás enamoranda de ella.

- Como crees eso Taeyeon, es absurdo.

- Entonces - Joy suspiro cansada. - ¿no te molestaría que le di... - Joy le interrumpió. -

- No lo harías.

- ¿Tú crees? - pregunto irónicamente. Riendo sin humor.

- Creo muchas cosas de ti Taeyeon. - suspiro. - ¿Qué puedo hacer para que no le digas? - ella sonrió. -

- ¿Hasta cuando durará la apuesta o en cuanto tiempo debes hacerle eso a patito feo?

- Para el baile de graduación. - susurró. -

- Para el baile de graduación. - repitió en un murmullo para ella. - ¿en dos meses? - preguntó, Joy asintió. - Bien, te lo pondré así; sí haces alguna cosa que con ella, que me moleste a mi... Lo sabrá, sabra la apuesta. - tomo una pausa. - Si te enamoras de ella. Me encargaré de que ambas sufran por igual ¿me entiendes?

- Sí - murmuro Joy. -

- Ten cuidado Joy, que por el camino hay muchos obstáculos y un paso en falso, hará que sufran ambas, no solo ella, no sólo tú. Ambas - hizo un énfasis en la última palabra.

Joy tomó valor, Taeyeon podía ser adorable algunas veces, pero cuando podía, era mala, muy mala.

- ¿Qué ganarías con todo esto? - pregunto al fin.

Taeyeon sólo sonrió y sin contestar aquella pregunta se levanto y comenzó a caminar hacía donde estaban sus amigas, pero a medio camino, se dio media vuelta y miro a Joy.

- No olvides Joy, que no solo tú sufrirás, lo hará ella también y tal vez lo hará peor. Ten mucho cuidado. - guiñó su ojo y tomo su camino nuevamente. - Que yo, puedo ser mala.

Taeyeon tenía razón, debía hacer las cosas con calma, por cualquier error, toda la apuesta y lo que había logrado hasta ahora se iría a la mismísima mierda.

...

- ¿Me dirás que te pasa? - Yeri le pregunto a su amigo, eran las once cuarenta y cinco de la mañana y sólo se habían dirigido una sola palabra. -Jungkook. - menciono su nombre al no ver ninguna respuesta. - oye Jungkook, ya háblame quieres, o sólo dime que te sucede, sabes que no me gusta estar así contigo. - él suspiro cansado y se digno a mirarla. - ¿me dirás? - pregunto tiernamente, una sonrisa se escapo de la boca de su amigo, pero al segundo la borro, dejando una seria expresión.

- ¿Desde cuando tú y Park Soo Young se besan tan amorosamente la mejilla? - respondió entrecerrando los ojos, Yeri sonrió. -

- ¿Te has puesto celoso, de una chica? - bromeo Yeri. - y respondiendo a tu pregunta, yo tampoco lo se. - hizo una mueca.

- No estoy celoso de ella y como que no lo sabes.

- No lo se, sólo llegamos al salón y beso mi mejilla. - Yeri sonrió. - y claro que estás celoso. - apretó las mejillas de su amigo e hizo un puchero. - Crees que te cambiaré por Soo Young.

- Ya te dije que no. - siguió con su expresión seria, sacando delicadamente las pequeñas y delgadas manos de Yeri de su cara. -

- Bien... te creeré. - rió. - Y si por alguna razón lo estás. - Jungkook iba a hablar. - Ey, no lo he dicho, pero si por alguna razón lo estás. - repitió. - No lo estés, jamás te cambiaría a ti por ella.
Eres mi mejor amigo, no debes porque estar enfadado por eso. Joy no cambiará las cosas entre nosotros ¿sí?

- Está bien. Espero que eso no pase. - le advirtió. -

- No pasará. - beso la mejilla de su amigo. - ahora vamos a comer, que muero de hambre. - acarició su barriga.

- Como siempre. - rió Jungkook, al fin, volvían a ser los mismos. Pero quizás, no por mucho tiempo.

Joy aun se encontraba pensando en la situación que había pasado con Taeyeon, se encontraba caminando por el campus del instituto. ¿Era buena idea seguir con todo esto ahora que su peor pesadilla lo sabía? ¿Qué era lo que haría ella, al terminar aquella apuesta? La idea de ella poder enamorarse de Yeri jamás se le había pasado por la cabeza, pero aunque se le pasará iba a ser un error, nunca se enamoraría de Yeri, eran completamente diferentes, además, no había un además, pero si Joy jamás se había enamorado ¿Está no era la excepción? ¿O si? No, definitivamente está no era la excepción, Joy no se enamoraría nunca de patito feo, ni siquiera podría llegar a gustarle.

Otro cansado día terminaba, por suerte Yeri no tenía que trabajar hoy, así que se iría a su casa directo. Se despidió de Jungkook, habían quedado en juntarse a las seís y treinta en su heladería favorita.

I Need u ; Joyri.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora