Chica de Papel

Solo es un trago de vodka

- ¿Irás a lo de Kate? - preguntó Kim guardando los libros que necesitaba.
- No creo - dije apoyándome contra los casilleros para poder verla - Me parece que me quedaré estudiando en mi casa.
- Vamos, Clary - me retó dando un fuerte portazo para cerrar su locker - Es una fiesta, no puedes faltar. Además, lo necesitas. Ya sabes, para relajar las cosas.

Me miró con expresión de delicadeza.

- Claro, porque me llega un mensaje de Jace de que en 15 días vendrá con su nueva novia y tú activas tu modo materno, pero... Un poco menos estricta. Porque no creo que una madre normal, castigue a su hija por no haber ido a una fiesta, en la que todos sabemos que va a haber mucho descontrol.

Rodó los ojos y me tomó el brazo para salir a nuestra próxima clase tratando de esquivar al montón de gente que pasaba por los pasillos. Como siempre, de forma muy estúpida, choqué con una figura, de pecho muy duro, que me tiró al suelo dejando todos mis libros dispersos.

- Vaya, me declaro y ahora eres tú la que terminas a mis pies.
- Es distinto, Hunter - dije mientras me ayudaba a levantarme.
- ¿Te veo en la fiesta? - preguntó mientras juntaba mis apuntes y papeles.

Me los entregó, y sus dedos rozaron mi mano por unos segundos. El contacto entre nosotros se rompió cuando sacudí rápidamente la cabeza y le respondí:

- Claro.

Tomé la mano de Kim y tiré para arrastrarla junto a mí, lejos de él. Ella se rió y lo saludó con un grito.

Entramos en el salón y Kim me miró con una sonrisa de oreja a oreja. Ya sabía lo que me diría. Empezaría a gritar que estoy loca por Hunter y él también de mí. Que le caía bien pero que si me hiciera daño le partiría la cara de una sola piña. Y que no podía creer que a ella le negara la salida de la fiesta, pero que cuando la propuso él, haya aceptado.

- No lo digas - le pedí en un susurro, señalándola.

Ella levantó las manos en un gesto de rendición, y se sentó en su banco junto a Wesley.

Ayer a la tarde, cuando estaba viendo una película con Hunter, me llegó un mensaje. Decidí no verlo hasta que él se fuera de mi casa porque lo estábamos pasando muy bien y no quería que piense que abriría el mensaje porque él no me interesa. Es difícil pasar tiempo con la persona que te gusta, tratando de no cagarla. Cuando por fin estuve yo sola en mi habitación, abrí el mensaje y en cuanto lo leí, no sentí nada. No me importaba. No me hizo sentir tristeza el hecho de que Jace me haya mandado un mensaje diciendo que en 15 días vendría a visitarme con su novia. Pero sí me chocó. Me dejó en shock. Así que llamé a Kim y le conté todo, que al parecer le sorprendió más a ella que a mí.

Jace era una persona libre, un adulto. Podía enamorarse de la persona que quisiera, y no tenía porqué hacerme una promesa de que cuando volviera seguiría estando conmigo como en el secundario. Ya no era de ese modo. Y sabía que esto iba a terminar así. Personas entran en tu vida. Algunos te aman hasta el final, otros te rompen el corazón en mil pedazos, y otros te marcan pero cuando se van no te dejan rota. Además, nos podemos seguir viendo como amigos.

Salimos de clase a la tarde, y con Kim, fuimos directamente a mi casa para prepararnos. Estuvo dos horas revolviendo mi armario, hasta que encontró un vestido negro apretado.

- ¿No crees que es muy corto?
- Otra vez con lo cortó - dijo burlándose - Eres la novia del mariscal de campo.
- Oh, no,no,no - dije riendo.
- Vamos, se los ve súper lindos. Sólo porque no se hayan besado no quiere decir que no sean novios.

Lo imaginé por un segundo. Quinn, Santana, Brittany y yo charlando como amigas, Hunter, con su chaqueta deportiva del colegio, de mi mano, una porrista con una pollera y una remera ajustada. Sería raro y nuevo. Pero lo nuevo es bueno, ¿no?