Hierva mala nunca muere

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ME DUELE, no puedo con esto, me estoy muriendo, estoy siendo violada por Thomas, y lo único que veo es a Max con la cabeza agachada, sé que no puede hacer nada pero lo necesito.

-¡MAX AYÚDAME!- veo como sus lágrimas no dejan de caer, me siento tan mal, me duele el vientre y mi vagina, Thomas no tiene compasión de mí, me está destruyendo, siento asco.

-Lisa cogia muy bien- dice Max de repente y eso para a Thomas -cogimos unas 3 veces, le gustaba dar placer- ¿qué está haciendo?

Al parecer funciona porque Thomas sale de mi y se sube los pantalones, se acerca rápido a Thomas y le da un golpe en la mandíbula que lo deja escupiendo sangre por la boca.

-¡no hables así de ella!- le grita Thomas.

-fue una lástima que la mataras, hacia buenas mamadas- Thomas le vuelve a dar otro golpe, en eso veo algo, la mano de Max está llena de sangre, parece que se está podiendo soltar, me levanto como puedo de la cama, estoy demasiado débil, trato de limpiar un poco mis lágrimas.

-¡te voy a matar!- empieza a golpearlo mucho, me da un vuelco al corazón al verlo así.

-Javier piensa lo mismo, dice que las mamadas de Lisa han sido las mejores- sé que lo está provocando, pero no sé qué debo hacer, apenas y puedo moverme, me duele tanto el estomago, ya daba por perdido a mi bebe con esto, y también mi vida.

Veo como Max saca una mano y se me revuelve el estómago, se le está cayendo la piel a pedazos, lo tenían muy bien amarrado, pero esta es mi oportunidad.

Salto hacia Thomas y sin pensarlo le clavo mis uñas en la cara con toda la fuerza que tengo, el trata de quitarme pero es tanta la furia que tengo que no sé cómo le hago.

Siento la carne viva dentro de mis uñas, pero no lo suelto, Thomas me está gritando y de un movimiento me tumba, yo caigo al suelo, ya no me importa morir, hasta agradecería si Nic viniera de una vez por mi.

Entonces veo que Max ya se ha podido desamarrar, se va contra Thomas y comienza a golpearlo muy fuerte, la silla se quiebra y en eso entra uno de los matones de Thomas.

Sin previo aviso Max saca una pistola y le da justo en el pecho, mi corazón se detiene, Max continúa golpeando a Thomas, yo estoy como una estatua.

-¡Gisell dame el lazo!- me grita Max, yo veo el lazo lleno de sangre con el que Max estaba amarrado, lo agarro y se lo doy, el como puede amarra a Thomas a la base de la cama, también le amarra los pies, una ves que está bien amarrado Max se para.

-¡los mataran en cuanto salgan!- grita Thomas y Max le da una patada en la entrepierna, Thomas grita muy fuerte.

-hazle lo que quieras- me dice Max, yo miro a Thomas en el piso y siento rabia, pero no puedo, no puedo hacerle nada -¡desquítate!- me grita Max pero yo no puedo, yo solo quiero salir de ese asqueroso lugar.

Entonces Max repasa la pequeña habitación y ve una navaja, era con la que Thomas me amenazaba, Max hace una sonrisa que me da miedo, le baja los pantalones a Thomas y yo no puedo ver esto.

Me empieza a dar de nuevo un gran dolor en el estómago que acabo tirada en el piso, escucho los gritos de Thomas, pero solo veo como me está saliendo sangre de la vagina, mi bebe.

Me levanto como puedo y Max le está cortando las bolas, Thomas grita horrible y yo solo me concentro en el chorro de sangre que me sale.

-Max- el me mira y deja a Thomas -el bebe- siento pánico, también lo veo en la cara de Max.

-siéntate, ahorita te sacaré de aquí- y regresa con tomas y termina lo que estaba haciendo ¿esto es verdad?

-¡estoy perdiendo a mi bebe y tú prefieres matar a Thomas!- no sé que me duele más.

Más Fuerte Que El DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora