Trabajo en equipo

115 0 0
                                    

Narra Max...

-¡Javier! Hermano ¿cómo estás?- contestó lo más natural que puedo pero obviamente estoy agitado.

- bien hermano, oyes me enteré que ganaron el partido eh-

- si, nos está yendo muy bien, soy el goleador, como siempre- espero que esto acabe rápido, cada vez que hablo con Javier me siento como mal amigo, prefiero decirle la verdad que mentirle.

- creo que iré a ver el partido final, luego me dices cuando juegan-

-si, yo te aviso-

- oye y ¿como está Gigi? Sé que no es tu obligación vigilarla, solo hechale un ojo, con que veas que Thomas se mantenga alejado, con eso basta-

- si, está bien de hecho nos hicimos amigos, que mejor manera de cuidarla si estamos juntos ¿no crees?- digo mirando a Gisell y le guiñó un ojo, ella sabe de lo que hablo.

- supuse que se harían amigos, a ella le cae bien todo el mundo, oye ¿porque no te vienes mañana con ella y pasas el fin de semana con nosotros?-

- no creo que sea buena idea, tengo algunas cosas que hacer, ya sabes, proyectos y ese tipo de cosas- no podría mirar a mi amigo a los ojos y saber que lo estoy traicionando.

- bueno, pero promete que luego vendrás-

- si claro, tal ves dentro de un mes- si voy será para presentarme como su cuñado, no me importará que me golpee en serio creo que estoy enamorado de Gisell, quiero hacer las cosas bien con ella.

- bueno tú nomás me avisas, cuidate y cuida a mi hermana amigo, no quiero que Thomas trate de vengarse de mí usándola a ella- tengo miedo de lo que planee Thomas con Gisell, el solo la usara para vengarse de nosotros.

- la cuidate con mi vida amigo, adiós- veo como Gisell sonríe y en serio haría lo que fuera porque siempre tenga esa sonrisa.

Cuelgo y me acerco a Gisell, recuerdo lo que estábamos haciendo hace un momento y siento mi pene demasiado duro.

Me controlo, ella de verdad me gusta, sé que es virgen y apenas está experimentando, no me puedo aprovechar de ello, aparte de que no le podría hacer eso a Javier.

- tenemos que hacer un trato- dice mi hermosa novia.

- ¿que trato?- digo sentándome junto a ella.

- si nos vuelve a pasar lo mismo, tú te tienes que detener, aún no estoy preparada pero cuando estoy contigo no me puedo controlar- dice sonrojándose.

- está bien, pero que hago si me súplicas- cuando la traje a mi departamento me imaginé que estaríamos investigando y tal ves después veríamos una película y nos besaríamos, pero en realidad me sorprende.

- no me hagas caso, por ningún motivo, tienes que parar pase lo que pase- está muy nerviosa, no me gusta verla así.

- cálmate nena, por ti haré lo que sea- y le di un casto beso en los labios.

- bueno, hay que trabajar-

Pasamos un buen rato investigando el caso, para ser de primer año es muy inteligente, solo me concentro en ella y su pelo, después del maravilloso momento en la cama su pelo se alboroto mucho y se ve tan salvaje, hago lo posible para que no se me pare.

- tengo hambre- dice de repente.

- encargaré una pizza-

Después de un rato llega, nos vamos a la sala y prendemos la tele mientras comemos.

- mmmm, amo la pizza- dice como si le diera un orgasmo al probarla.

Eso de verdad me éxito demasiado, en serio ya no aguanto, los huevos me duelen.

Más Fuerte Que El DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora