"Mis tesoros"

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-Te veo lastimada- pregunto confundida una esfera de cristal que sonaba como una mujer de 23 años, aparentaba preocupación hacia la joven.

-Estoy bien... solo... estaba trabajando- decía con una gran sonrisa mientras acercaba esa esfera de cristal a su frente, demostrándole que no tenía nada de qué preocuparse –Tan preocupona como de costumbre

-¿Cómo no eh de estarlo? Jamás estás conmigo

-No te creas la única- otra esfera de cristal, que estaba a poca distancia de la joven, resonaba con celos y molestia; sonaba como una chica de 14 años, sin demoro, la joven acerco la segunda esfera hacia ella, sin soltar a la otra –Idiota... nos tienes olvidadas

-Lo siento, lo siento- con una gran sonrisa, besa ambas esferas con cariño y las acerca a su frente, sintiendo su calor –Perdónenme... tuve que resolver unos cuantos asuntos... empezando- aparto las esferas y las acerco a su pecho, cerca de su corazón... mientras su cabeza miraba detrás suyo, viendo el largo camino carmesí que provoco –Por la custodia total de este sitio

-¿Custodia?

-¿Este sitio?

-No es nada, regresen a donde estaban- alzándolas con cuidado, la esferas levitaron hacia lo que parecía ser el techo, acompañando a más de 30 esferas, todas de un color distinto y nombres distintos. La joven, regresando al problema de atrás, miro los cuerpos sin vida de dos hombres mayores de 30; ambos, bañados en sangre, usando una banda con los colores de su patria, para luego ser quemados a las afueras del lugar.


-¿Qué piensa hacer a partir de ahora?- pregunto un sirviente de 22 años que, a pesar de su complejidad, era de gran apoyo hacia la joven; esta solo se limitaba a ver su nuevo hogar, mientras tomaba un poco de alcohol.

-Necesito aliados... refuerzos... no creo que sea posible que alguien quiera oponérseme, pero...- tirando el vaso hacia el sirviente, quien no dudo en esquivarlo, se levantó con una sonrisa deforme –Mujer precavida vale por dos, ¿no?

- tirando el vaso hacia el sirviente, quien no dudo en esquivarlo, se levantó con una sonrisa deforme –Mujer precavida vale por dos, ¿no?

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