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Narra Ethan.

Veo a mi abuela abrir los ojos como platos al ver a Victoria. Se le llenan de lágrimas los ojos y aprieta con fuerza la mano de mi abuelo.

-¿Qué ocurre, querida? -le dice abrazándola.

-Es... Es ella -la señala.

Vemos confundida a mi abuela. ¿Qué demonios le ocurre? Abro los ojos sorprendido al ver como la abraza y comienza a llorar.

-¿Qué...? -susurra Victoria.

-Voy a llamar a mamá -susurro.

Retrocedo con cuidado y subo las escaleras. Abro la puerta de mis padres y la cierro rápidamente.

-¡Ethan! -chilla mamá.

Mi papá sale algo cabreado en boxers.

-¿Se puede saber por qué entraste a la habitación así? -chilla rogándole a la pared.

Mi madre sale del cuarto avergonzada:-Siento por lo que acabaste de ver, hijo.

-N-no hay problema si me pagan un psicólogo -susurro viéndolos rojo como un tomate.

Parecen conejos.

-¿Qué quieres?

-Mama, abajo la abuela está llorando abrazando a Victoria.

Mi padre revolea los ojos.

-Voy a cambiarme -Dicen mis padres al mismo tiempo y lanzan una risita viéndose embobados.

Entran a la habitación no sin antes de que mi papá le de una nalgada a mamá.

Ascoooooo.

Bajo las escaleras y veo a mi abuelo zarandear a su mujer para apartarla de Victoria.

-Cariño, la estás asustado -grita.

-¡Es mi hija! -chilla mi abuela, provocando que todos salgan de el salón para venir a ver.

-¿Señora, qué le ocurre? -pregunta Sebastián tratando de alejar a mi abuela.

-Espera -abrió los ojos como platos esta-. ¿Cómo te llamas?

-Sebastián -le dice confundido.
Mis padres bajan dándose besitos en la nariz. Revoleo los ojos, ¿no se cansan de quererse?

-¡Tú! -la abuela apunta a mí madre furiosa-. ¡Te estás quedando con el hombre de tu hermana, y no sólo eso, la están engañando en su propia cara!

Mi madre se sorprende y aprieta la mano de papá. Mi tío, Víctor, baja rascándose los ojos algo dormido en shorts y medias sin camiseta.

-Se pueden callar, estoy tratando de dormir -gruñe.

-¡Muchacho inservible! -grita la abuela sorprendiéndonos-. ¡Deberías defender a tu melliza y no a la zorra esa! ¿Acaso no ves que se están acostando?

-¿Qué? -pregunta mi tío, y por su mirada puedo deducir que está dolido.

-Lo que escuchaste, imbécil -repite su madre-. No puedo creer que le haya dado la vida a unos inútiles, don nadie, estúpidos y no sólo eso, unos inservibles de mierda que lo único que hicieron bien fue haberse encontrado a alguien. Me arrepiento de haberlos tenido menos a mi Vicky -dice con rabia y termina abrazando a esta última.

Vale, que tus amigos te digan esas palabras no afecta tanto a lo que te lo diga una madre, la persona que te dio la vida y te vio crecer.

-Lárgate de mi casa ahora -ordena papá furioso abrazando a mamá, quien está por empezar a lagrimear.

Mi abuelo la mira con absoluta decepción. Miro a la chica que tiene a mi hijo en su vientre. Hago una cara burlona al verla. Está sonriendo mientras lima sus uñas.

-Claro que me largo. Me llevo a mi única hija -resalta única y se lleva a rastras a la chica.

Todos estamos en shock.

-¿Qué acaba de pasar? -pregunta Nazareth a mi lado.

-No lo sé -digo y miro en un punto fijo.

-¡Ah! -grita Sasha tocándose la panza.

¿Y ahora qué?

¿Mate o Beta? © TERMINADA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora