Sweet Child O' Mine. (Axl Rose) TERMINADA.

7

-Hola...- Le digo con una tímida sonrisa a Steven.
-Hola.- Dice mirándome con una sonrisa muy linda.
-Eh... Bueno... Supongo que no me conoces... Así que, soy Mariana, una amiga de Adriana...- Digo algo incomoda.
-¿Vienes con ella?- Dice emocionado.
-Si, está por ahí...- Digo señalándola. Steven y yo volteamos a verla, y está comiéndose con Axl. En cualquier momento se irán a un baño... La mirada de Steven se vuelve triste de inmediato, y su sonrisa se borra. Deja las baquetas que tenía en las manos a un lado, y se levanta de su asiento.
-Creo que no tendrán baterista esta noche.- Dice con la voz quebrada.
-Oye... Lo siento, no sé en qué está pensando Adriana...-
-Me odia... ¿Cierto?- Dice al mismo tiempo que sus claros ojos se llenan de lágrimas.
-No, no... Ella te ama, o eso creo...-
-¿Por qué todos me rompen el corazón?- Dice en medio de un sollozo.
-Oye no se, nunca te había visto en mi vida, pero teniendo en cuenta que los dos tenemos el corazón roto... Deberíamos hacer algo juntos...- Digo más incomoda que nunca.
-¿Cómo que?- Pregunta secándose la carita.
-Podríamos... No se. Comer helado juntos o ver películas...- Steven asiente y juntos salimos de ahí. Seguramente todos mal interpretaron mi salida con Steven, pero no pasó absolutamente nada. Pasamos toda la noche juntos en el sillón de su casa viendo caricaturas y comiendo pastelitos y helado. No necesitamos más. Adriana le rompió el corazón a él, Nikki a mi, y lo único que necesitábamos en este momento era tener la compañía de alguien que nos entendiera. A pesar de que no nos conocíamos, la noche entera sentí estar acompañada de un muy buen amigo...
Despierto gracias al molesto sonido del teléfono de casa de Steven sonando. Steven está acostado a mi lado, tiene los ojos cerrados y su respiración es pesada, está dormido profundamente. Así que de mala gana, me levanto y contesto el teléfono.
-¿Hola?- Digo adormilada.
-¿Mariana? ¿Eres tú?- Pregunta la chillona voz de Adriana.
-Si, soy yo.- Digo algo molesta.
-Entonces pásate una buena noche...-
-No no es lo que tú...- Me interrumpe.
-Oye, da igual, yo te dije que follaras con Steven. No estoy molesta ni nada.-
-Oye déjame acabar de...- Me interrumpe de nuevo.
-Ven a desayunar a mi casa y me cuentas todo. No tardes, haré Hot Cakes.- Dicho esto termina la llamada. Quiero a mi mejor amiga, pero a veces puede ser una insoportable de mierda, como lo ha sido estos días. Regreso al cuarto de Steven, donde tomo mi bolso, me pongo mis zapatos y mi chamarra, y por último le doy un beso a Steven en la mejilla. Salgo de casa de Steven y me dirijo directamente a casa de Adriana. Aún no puedo entender cómo pudo hacerle algo así a un chico como Steven, y menos como pudo estar celosa de las amigas de Steven, el realmente la ama, pero no voy a meterme en ninguna relación que no sea mía...
En cuanto llego a casa de Adriana toco el timbre, y unos segundos después me abre. Está totalmente despeinada y tiene puesta una camiseta que reconozco de inmediato. Es la camiseta que Axl traía anoche...
-Hola...- Digo sin ánimo.
-Ven acá, tú tienes que contarme muchas cosas.- Me toma del brazo y me jala para que entremos a su casa. Las dos nos sentamos en un sillón y me mira con una sonrisa esperanzada.
-Bueno, ¿vas a contarme o qué?- Dice medio gritando.
-No es lo que estás pensando. Simplemente fui a casa de Steven y vimos una película.-
-No tienes que mentirme, anda, dime, ¿verdad que es malo follando?- Dice con una risita malvada.
-Te estoy diciendo la verdad. Ni si quiera lo toqué.-
-¿Ni si quiera un beso?-
-No. Es tu novio y tú mi mejor amiga. Nunca te haría algo así.- Digo seria. En ese momento su expresión cambia por completo y parece nerviosa.
-Pero te di permiso de hacerlo...-
-Pero no lo hice. ¿O tengo que volver a explicarte por qué?- Digo molesta.
-No, no, está bien... Supongo que gracias.- Dice rascándose la nuca.
-Si, no es nada.-
-Bueno, yo si te voy a contar todo. Axl es muy bueno follando, de verdad, se sabe mover muy bien y la tiene...- La interrumpo.
-BASTA. No me interesa nada sobre ese tipo.- Digo alzando la voz.
-Oye, no tienes que gritar...-
-Estoy harta de tus estupideces Adriana. ¿Te das cuenta de toda la mierda que estás haciendo?- Le grito.
-En serio deja de gritar mujer...- Dice tratando de calmarme.
-Estás mal. Muy mal.- Me levanto del sillón para largarme de ahí, pero en ese momento escucho como la puerta del cuarto de abre, y volteo de inmediato. Nikki sale de allí solo con unos bóxers puestos, y en la parte de atrás veo a Axl en la cama. No puedo creer esto... Oficialmente mi corazón está roto.