Capitulo 33. El deber

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Chris

La vida es injusta a veces, la vida es tal vez como alguien solo quiere que sea, solo como la eliges vivir... Te equivocas y estas jodido, te equivocas y el fallo se lleva todo lo que has querido.

No puedo ver a mi madre sin sentirme la peor mierda del universo, no puedo ni mirarla sin saber que la he cagado... He herido a toda la familia, he desmembrado toda la estructura familiar, he tirado por la borda todo por lo que hemos luchado.

Amo a esta familia como si fuese mi sangre, mi propia sangre, porque es mi familia, la única familia que recuerdo, la única familia que puedo calificar como propia.

Pero todo se va al garete, cuando cometes un fallo garrafal, cuando se te da por sacar tu mierda a fuera.. mis fantasmas de “Soy inferior a ti”, y lo soy, porque Valen tiene una familia de verdad, que se que me a querido como si fuese su propia sangre, pero se, que a pesar de que me han dado todo, no llevo su sangre.. No soy un malagradecido, solo se que jamás podre agradecérselo del todo.... y voy... y me tiro a mi ex... jodo el amor de Valen.. fastidio todo lo que he conseguido en mi vida: una familia, el amor de mi único amor y todos mis principios.

Hace tres días me he enterado de que seré padre, si, padre.... jamás me había planteado ser padre, o como mucho en mis sueños soñaba que mi hijo sería fruto del amor imposible de Valen.... y ahora, ahora solo se que Chloe espera un niño con mi sangre..

Mi madre solo me ha dado un “ultimatun”.... Debo casarme con ella...

Me he negado una y otra vez, pero no me queda otra salida... Mi familia es lo único que me queda, Valen espera que haga eso... y aunque me duela en el alma... Solo debo hacer lo que tengo que hacer...

Me coloco la chaqueta y paso de mirarme al espejo, mi cara no denota felicidad, porque ya nunca voy a sentirla... Se que estoy más pasable que hace una hora y me basta...

Me imagino como un cordero llevado al matadero.... así es como lo siento... eso es lo que soy...

Cojo las llaves del coche y salgo del apartamento, debo ir a buscar a mi madre y mi hermana a “casa” para que asistan a mi compromiso....

Recorro el trayecto por monotonía, a pesar de que hace meses que no piso esa casa, es la casa de mi infancia, de mis recuerdos felices, de mi primer beso con Valen, de mi principio de relación con ella, de todos y cada uno de mis momentos más felices...

Sin darme cuenta estoy enfrente de ella...

Duele, miro la casa como si fuese la última vez que la vea, pero es la decisión que he tomado la que aleja esta casa de mi, la que aleja mis sueños, mi felicidad, la que aleja cada momento vivido allí... la que lo aleja como si un abismo se cerniera entre lo que fui y lo que seré.

Me bajo del coche y la admiro, su habitación tiene la luz encendida y espero ver su sombra mirándome por última vez... Toco la puerta y mi “padre” (su padre) me abre la puerta y se funde conmigo en un abrazo fraternal, dándome ánimos sin mediar palabras, sabe que no es fácil lo que voy hacer, se que está “orgulloso” por lo que decidí, aunque sea la ruina para su hija.... aunque me arruine a mi de por vida...

Siempre te he soñadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora