*JULIE POVS*
Llegamos a mi casa, abrí la puerta principal con la copia de la llave original que mi mamá me había dado en caso de emergencias y entramos. Matías estaba serio y parecía que de alguna manera me estaba evitando. Cuando entramos, él se dirigió a la habitación de mi hermano, que temporalmente sería la suya, y yo me dirigí a la mía. Dejé mi mochila, me cambié de ropa, fuí al baño a lavarme las manos y la cara y volví a bajar. Matías estaba ahí, pero cuando me vió se fue a algún lugar de la casa, y pude darme cuenta que sí, me estaba evitando. Suspiré y me dirigí a la cocina para ver qué podíamos comer. Había unos fideos para hacer, pero sabía si a Matías le gustaban. Fuí a buscarlo y lo encontré en la sala con su celular.
-Matías...
Él me dirigió la mirada. Yo esperaba una respuesta de su parte, pero no dijo nada, así que seguí con lo que le estaba diciendo.
-¿Te gustan los fideos?-dije sonriendo.
-Me da igual, no tengo tanta hambre.-dijo algo seco.
-Como quieras...-volví a la cocina, en serio me dolía que me trate así sin siquiera haberle hecho nada. Mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas, pero decidí secarlos antes de que estas cayeran de ellos. Me puse a cocinar y unos minutos después ya había terminado. Serví la comida y llevé los platos a la mesa. Llamé a Matías y él se acercó para sentarse, al igual que yo. Ví como comía desganadamente, sentí lástima y tristeza al verlo así, pero ya le había preguntado millones de veces y nunca quiso decirme, no quería quedar tan insoportable. Pude observar que no me dirigía la mirada, no me hablaba, nada...*MATÍAS POVS*
Me siento tan mal... ya se que sueno como un nene caprichoso, pero en serio la amo, me duele verla con otro y que ese chico si tenga oportunidad para estar con ella: es su mejor amigo, es de su edad y ella si puede fijarse en él. Yo no tengo posibilidad: soy su profesor, le llevo 13 años y además ella núnca se fijaría en alguien como yo.
Estabamos comiendo, tenía unas ganas inmensas de mirarla, pero trataba de evitar eso, cada vez que la miro me dan ganas de ir con ella y besarla, poder decirle lo mucho que la amo, que ella me diga que también me ama a mí; pero sabía que era imposible, y eso dolía. Sentía como ella me miraba, tal vez ya había notado que me sentía mal, pero no quería decírselo, no ahora.
Cuando terminamos de comer lavé los platos yo, ya que Julie había ido a darse un baño. Su celular comenzó a sonar, parecía alguna notificación. Me acerqué a él, y sabía que no podía hacer esto, pero la curiosidad me invadía, así que leí en la pantalla que tenía un mensaje de WhatsApp de Diego que decía "Julie, mañana tengo que decirte algo, y es importante, es acerca de nosotros..." Acerca de nosotros. Acerca de ellos. Perdí esperanzas de estar con ella al leer eso. Caí en la realidad de que era prácticamente imposible que eso pase. Me gustaría que haya una forma de que no hablen de eso, pero tampoco podía evitar que ella sea feliz tomando sus propias decisiones...
Pense dos veces en si desbloquear el celular o dejarlo ahí e irme, y opté por esta última opción, así que lo dejé ahí y me fuí a sentar al sillón.*JULIE POVS*
Cuando terminé de ducharme, me cambié y fuí a mi habitación. Me acosté en mi cama, tenía sueño, así que me dormí.
Luego de un rato me desperté. Me fijé en el reloj que tenía en mi mesa de luz, eran las 6:30 p.m., si que se había pasado rápido. Busqué mi celular, pero no lo encontré. En ese momento recordé que lo había dejado abajo, así que bajé. Me encontré con Matías sentado en el sillón, estaba mirando la televisión. Ni siquiera me dirigió la mirada, supongo que seguía enojado por lo que sea que le haya hecho. Traté de restarle importancia, aunque en realidad me dolía que esté así, y seguí caminando hacia la cocina, donde había dejado mi celular. Lo encontré apoyado sobre la mesada de la cocina. Tenía 15 mensajes de 2 chats, de los cuales 14 eran del grupo de mi curso y 1 de Diego. Abrí el del grupo mientras caminaba hacia la sala. Me senté en un sillón individual que estaba frente al que estaba sentado Matías. En el grupo estaban hablando de la tarea y blabla, cosas que no importaban. Abrí el chat de Diego.
D: Julie, mañana tengo que decirte algo, y es importante, es acerca de nosotros...
J: ¿De nosotros?
Me respondió al instante.
D: Si, tiene que ver con lo de hoy, es algo que quiero decirte hace mucho tiempo.En ese momento pude sentir como mis mejillas comenzaban a sonrojarse. No es que sienta algo por él ni nada por el estilo, pero soy de esas personas que se sonrojan y se ponen nerviosas con facilidad.
J: Okey....
Le envié eso y miré a Matías, me estaba mirando, pero cuando vió que lo miré volvió a mirar a la tele. Volví a mirar al celular restándole importacia a Matías y vi que Diego estaba escribiendo.
D: Te amo, Julie...
Y se desconectó.
Okey, eso si fue incómodo...
J: Qué?
Y bloqueé el celular. Volví a mirar a Matías, él seguía mirando la tele. Me puse a observarlo, era tan lindo...
El sonido de mi celular me sacó de mis pensamientos. Era una notificación de Diego. Volví a desbloquearlo y abrí su chat.D: Que me gustas, estoy enamorado de vos desde los 6 años...
Mierda, mierda, mierda, no, no puede ser.
J: No es cierto, qué te pasa?
D: Si es cierto.
D: Mañana hablamos de esto, es incómodo por acá.
J: Okey...
J: Chau, nos vemos.
D: Chau.
D: Y perdón por haber arruinado nuestra amistad.
J: No, no lo hiciste...
J: Chau.Y apagué el celular. Di un largo suspiro, lo que hizo que Matías me mire, pero no dijo nada. Miré al reloj, ya eran las 7:23 p.m.
Me levanté de ahí y me dirigí a mi habitación. Me puse mis zapatillas y volví a bajar. Fuí hacia la puerta de entrada.
-Voy a salir.-le dije a Matías antes de abrir la puerta.
-No, ¿a donde? No vas a ir sola, y menos a esta hora, podría pasarte algo.-dijo él.
-No va a pasarme nada, además, ni que te importara tanto...estuviste ignorándome todo el día, y la verdad, no se que te hice.-le dije.
Él se paró de donde estaba y se dirigió hacia mí, para luego cerrar la puerta y acorralarme contra ella. Yo bajé la cabeza, me puse nerviosa.
-¿Querés saber qué me pasa? ¿Querés saber por qué estoy así? Bueno, te lo voy a decir.-decía Matías. Yo lo miré a los ojos- Estoy celoso, celoso de Diego, de que él pueda tenerte y yo no, de que puedas fijarte en él y no en mí.-siguió diciendo mientras se le cristalizaban los ojos, al igual que a mí. Juro que en ese momento me quedé paralizada, sin saber qué hacer ni qué decir- Y si te lo preguntas, sí, estoy enamorado de vos, ¿sabes? Desde el primer día en el que te ví, y me duele, me duele saber que vos nunca te fijarías en mí, porque te llevo 13 años, porque soy tu profesor... y te juro que hoy, cuando te ví besándote con él, se me partió el corazón en mil pedazos, siempre que te veo con otro me duele...-una lágrima rodó por su mejilla- Traté de ignorarte hoy para intentar olvidarme del tema, pero se me hace imposible, y ya no se que hacer, esto es más fuerte que yo...
-Matías...-dije yo, apenas me salían las palabras, y mis mejillas estaban mojadas debido a las lágrimas.
-No, no digas nada.-me interrumpió- Ya se, vas a decir que esto no se puede, que soy 13 años más grande que vos, que no te importo...
En otro momento no lo hubiese hecho, pero ahora sí, así que lo interrumpí con un beso. Sí, esta vez fuí yo la que lo empezó.*MATÍAS POVS*
Si, le dije lo que sentía. Por un lado me siento aliviado, pero no se, por otro me siento mal, siento que quedo como un idiota porque ella no me quiere, ¿pero eso qué importa? Al menos ya se lo dije.
Me sorprendí cuando ella me interrumpió con un beso. Este no fue tan largo como los anteriores, ya que ella se separó de mí. Paso su dedo pulgar por mi mejilla, secando las lágrimas que caían por ella, mientras me miraba a los ojos.
-Te amo.-le dije. Pude ver como ella se sonrojaba y dirigía la vista al suelo. Luego volvió a mirarme y sonrió. ¿Eso es bueno o malo? No lo se...
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Holaa!! Antes que nada quería darles las gracias por los +2K!!! Estoy super emocionada, gracias a todos los que leen, enserio.
Bueno, acá les dejo el capítulo, espero que les guste.
L@s amo, besos💞
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La edad no importa.
Novela JuvenilJulie Vazquez era tan solo una chica de 15 años. Ella tenía una vida normal como la todo adolescente; era algo tímida, pero con una personalidad muy linda y cautivadora. De hecho logró cautivar a su profesor, Matías Fernandez, quien en un principio...