El réquiem de Pandora

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Lo que contaron los Oneiros fue devastador.

En 12 horas fueron mortales y sus emociones se manifestaron de la peor manera posible.

A medida que Pandora escuchaba trataba de reflexionar que hubiera hecho ella en esa situación, pero no era nada comparado a vivirlo en carne propia.

Thanatos sabia bien lo que hacia y el riesgo era superlativo. Los Oneiros podrían haber fallado y el ejercito no hubiera tenido otra alternativa que asaltar el santuario. Sin embargo delante de Pandora se encontraban otros Oneiros, es decir,  sus cualidades permanecían intactas aunque no eran los mismos.

— Llevan sobre sus espaldas una gran responsabilidad. Su tío arriesgo toda su jerarquía como dios  y su cuerpo fue pisoteado por el contenedor de Hades. Yo...mi madre murió cuando dio a luz a mi hermano y yo...no puedo con esto. Hay veces en que quiero caer y dejar que otros hagan mi trabajo, pero sino fuera por Rhadamantys yo no estaría aquí hablándole a ustedes, a  los dioses de los sueños.  

Si el no me hubiera hablado y enseñado a ser fuerte, estaría llorando, sumida en un estado de total desesperación.

Si el no me hubiera hablado y enseñado a ser fuerte, estaría llorando, sumida en un estado de total desesperación

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Mi madre murió el mismo día que mi hermano fue robado.  La cuidadora Partita no podría creer que su esposo haya cometido tal destrato hacia los Heinstein y yo...creí morir esa noche, jamás fui la misma. Estaba sola en un castillo que no me pertenecía, nada me importaba. Me aislé de todos y cuando Partita quedo embarazada, un sentimiento de dolor invadió mi corazón. Me dolía mucho el pecho y no podía parar de extrañar a mi hermano, aun lo siento y duele como no se dan una idea . Yo ya no puedo mas. 

Escape del castillo porque nada me ataba a el, solo dolor.

Cuando Partita dio a luz yo estaba muy lejos y cuando regrese después de haber sufrido hambre, sed y un terrible odio hacia los dioses solo encontré una cuna vacía, los dormitorios habían sido saqueados y no encontré señales de Partita o de su hijo.

El servicio domestico hace mucho que había partido y nunca estuve tan sola en el mundo.

Escuche que Partita era señalada por haberse casado con un hombre de lo mas ruin y perverso, su hijo correría los mismos pasos. Pero yo estaba sumida en la depresión y me deje estar.

El vino una noche. Yo Estaba llorando. No me dijo nada y me levanto en andas en sus hombros.

No se como lo hizo pero descendimos del castillo hasta el inframundo y me dijo que tenia  una misión para mi.

Yo estaba devastada, pero el limpio mis lagrimas y vi al dragón imponente de Wyvern haciéndome una reverencia, a mi, a una simple niña.

— Comandaras el ejercito de los 108 y esperaras el despertar del rey de los infiernos. Confió ciegamente en ti, mi reina.  

La Caja, La Espada y La ArmaduraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora