— ¿Me dirás que te hizo enojar esta vez? —Claramente mi hermano no estaba en plan colaborativo— ¿Qué fue lo que hice ahora?
—Perdona, no eres tú. Ni siquiera tendría que haber reaccionado así porque no es algo que deba afectarte —Cerré los ojos con fuerza—. Es sólo que no estaría en mi mejor momento con Joaquín y lo que menos quiero es tener que compartir espacio con él una noche en la que me expulsaron de mi habitación.
— ¿Cómo que te expulsaron?
—Vino tu querida hermana con una de sus amigas y se encerró en la habitación con la misma norma de siempre —Suspiré—. Ahora tengo que dormir en la sala con ustedes hasta que decidan irse a dormir.
—Sabes que te puedes quedar con mi habitación. Nosotros nos quedamos en la sala para que estés más cómoda —Julián me abrazó—. Ahora me gustaría entender por qué están distanciados, jamás creí que llegaría el día en que me pedirías no estar en una de nuestras reuniones.
—Sabes perfectamente lo que sucede —Escondí mi rostro en su pecho—. Entre mis sentimientos que no terminan de aclararse y que cada vez que nos encontramos siempre hay un tema para discusión, se está haciendo imposible convivir. Lo único que nos sigue uniendo es el ballet para nuestra fortuna.
— ¿Y no sería mejor sincerarte y dejarte de tonterías con Andrés? Sé que Joaquín tiene novia pero no sé qué tan en serio va eso... —Se apartó para poder mirarme a los ojos— Intentar hacerlo ver...
—No es tan fácil Julián y las cosas con Andrés están tan bien que no quiero arruinarlo. —Las lágrimas que tanto estaba intentando contener comenzaron a salir. Había tocado algo dentro de mí que no podía cambiar.
—Ay hermanita...
—No puedes pedirme que renuncie a algo que me hace bien y que luche por una persona que no encuentra un hueco para tener una charla con la que decía ser su mejor amiga.
—Cariño, por más que decidas usar tu cabeza para decidir, el corazón no cambiará de parecer sobre los sentimientos que tengas —Su mirada era un poco triste, como si entendiera en el dilema que me encontraba—. Pero si prefieres negar lo que tienes delante, yo te apoyaré. Sólo quiero que seas feliz.
—Gracias.
Volví a esconder mi rostro en su pecho para terminar de tranquilizarme. Julián siguió abrazándome con fuerza, siendo mi contención luego de que finalmente había dicho en voz alta el lío en el que estaba metida. Para mi mala fortuna, el timbre sonó interrumpiendo aquel momento. Me aparté para borrar cualquier rastro de lágrimas que pudiera haber en mi rostro antes de que me viera obligada a cruzarme con Joaquín.
— ¿Quieres que te vea? —Negué respondiendo mientras el timbre volvía a sonar— Entonces sube a mi habitación y quédate allí, le diré que estás durmiendo para que no intente ir a saludarte. Y apaga la luz que de abajo se ve cuando está encendida, no querrás que se dé cuenta que le estamos mintiendo.
—Gracias. —Murmuré y me dirigí directo a la escalera para desaparecer.
No me lo planteé demasiado. Me metí a la habitación, apagué la luz y me acosté en la cama de mi hermano. Por alguna razón me vino el recuerdo de cuando era más pequeña y me sentaba al borde de la escalera, donde nadie podía verme desde abajo, para espiarlos en sus noches de videojuegos. Recordé que al principio Julián no quería que me metiera en medio de ellos pero, con el tiempo, se dio cuenta que mi amistad con Joaquín era fuerte y no iba a poder alejarme para siempre.
La ansiedad por saber de qué hablaban no me permitía relajarme. No entendía de donde había surgido la necesidad de Joaquín por hablar con mi hermano ahora o por qué le había preguntado por mí cuando lo había invitado a venir. ¿A caso ahora pensaba en mí? Porque si era así, le agradecería que volviera a su estadía anterior donde no le importaba y yo podía creer que no había manera de que mis sentimientos fuesen correspondidos.
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Enamorada de mi mejor amigo. [EDMMA #1]
Romance"Es difícil enamorarse de alguien, más aún cuando se trata de tu mejor amigo" Paula Jones necesita pocas cosas para ser feliz en esta vida: ballet, su familia y a Joaquín, su mejor amigo. Sin embargo, lo que parecía simple comienza a cambiar cuando...