Enamorada de mi mejor amigo. [EDMMA #1]

30: La razón de mi felicidad.

El día se me había hecho eterno intentando descifrar lo que Joaquín se traía entre manos. Ya estaba en el punto que el intento de sorpresa comenzaba a irritarme porque no sabía que esperar y, para colmo, no tenía señales de vida de la única persona que podía darme las respuestas que necesitaba.

Aun así no podía dejar de sonreír cada vez que pensaba en lo bien que nos hacíamos y lo mucho que lo quería. Estaba perdidamente enamorada y a la gente que tenía alrededor no le era indiferente.

—Mira, Joaquín ha vuelto a aparecer en su cabeza —Se burló Isa mientras se instalaba a mi lado en el sofá.

—Deja de molestarla Isabella, no es como si estuviésemos contando las veces que queda atontada —Julián se instaló al otro lado—. Mira como conseguimos que cambie su expresión, esa es su cara cuando piensa en nosotros. Adorable.

—Tiene el ceño fruncido y una mirada de pocos amigos, nos quiere demasiado...

—Estaría bien que dejaran de hablar de mi como si no estuviese escuchándolos —Me quejé poniéndome de pie para mirarlos a los dos—. Sólo como cortesía.

—Pero te veías tan adorable pensando en tu novio que no queríamos interrumpirte —De verdad comenzaban a exasperarme—. Está bien, está bien, te dejaremos tranquila.

—Ya está el hermano favorito dejándola respirar —Isa puso los ojos en blanco antes de agarrar un almohadón—. No eres divertido.

La chica uso el proyectil contra nuestro hermano comenzando una guerra que sería difícil de parar. Era momento de escabullirme. Sin embargo, cuando estaba a punto de hacer mi retirada, cuatro pares de manos me tomaron de los hombros y la cintura para evitar que me fuera. Los dos se había puesto de acuerdo para terminar torturándome con cosquillas como si sus vidas dependieran de ello.

—Cuando me suelte... —Intenté hablar pero no podía parar de reír.

En un momento, Julián fue quien cometió traición y traslado su ataque hacia Isa, dándome la oportunidad de vengarme de ambos. Terminé trepada en la espalda de mi hermano mientras mi hermana tenía un ataque de risa por las cosquillas que le estaba haciendo. Todo muy sereno hasta que el timbre sonó.

Los tres nos quedamos quietos en la posición en la que estábamos para corroborar que no habían sido imaginaciones hasta que alguien volvió a timbrar. Fui la primera en apartarse para abrir la puerta mientras Julián ayudaba a Isa para acomodarse.

La sorpresa fue grande cuando me encontré con un paquete en vez de una persona, como se hubiese esperado, lo que llamó aún más la atención de mis hermanos.

— ¿Qué es esto?

Julián lo tomó y comenzó a girar la caja como si con eso fuese a descubrir de que se trataba. Estaba en vuelta en papel madera y atada con un pequeño lazo de color marrón oscuro.

—Si vieran la tarjeta tal vez sabrían para quien es —Isa nos enseñó un trozo de papel que había tomado del suelo antes de entregármelo—. Es para ti, por cierto.

Con eso, tomó el paquete de las manos de Julián y me lo entregó.

Una sonrisa se extendió por mis labios al ver de quien venía, consiguiendo que mis hermanos pusieran los ojos en blanco y me dejaran tranquila para ver de qué se trataba. Para evitar las miradas curiosas, subí directo a mi habitación.

Lo primero que llamó mi atención fue la frase que llevaba la tarjeta en su interior: "Eres la razón de mi felicidad". El corazón me latía con fuerza mientras me aventuraba a abrir el obsequio. No tenía ni idea de que esperar pero para nada me veía venir una carta escrita de puño y letra por mi novio.