Me desperté cuando sonó la alarma de mi despertador. Me duché y me vestí con algo normalito, unos vaqueros ajustados, una camiseta gris de la marca "obey" y unas vans blancas. Fui a la cocina y me encontré a mi madre haciendo el desayuno.
- Cariño, hoy mis compañeros de trabajo me han invitado a una cena así que hoy no cenaré en casa. Te he dejado la comida preparada, solo tendrás que calentarla.
- Vale mama - le dije con una sonrisa en la cara - voy al instituto, no quiero llegar tarde. Adiós, te quiero. - le dí un beso en la mejilla y salí de casa.
Al llegar al instituto me sentí observada, demasiado diría yo. ¡Estaba todo el mundo mirandome! ¿Qué pasa? ¿Tengo monos en la cara o qué? Me pongo muy nerviosa cuando la gente me mira fijamente y la verdad es que ellos no se cortaban un pelo. Les daba igual que yo estuviera dandome cuenta de como me estaban mirando. Cuando vi a mis amigas fui a hablar con ellas y me las encontré mirandome exactamente de la misma manera que el resto. ¿Qué pasa hoy?
- Hola chicas ¿Se puede saber por qué me mira todo el mundo? - ellas me miraban igual que el resto así que supuse que también lo sabían.
- ¿Cómo que por qué te mira todo el mundo? Me parece increible lo que has echo. ¡Y tu segundo día! - Sam parecía impresionada mientras yo seguía sin entender nada.
- ¿Perdón? No se de que me estáis hablando.
- Venga ya ____ , no te hagas la tonta, todo el mundo sabe que te has besado con Niall. - Ahora fue Ruth la que me contestó. ¿Qué yo que? Ni loca besaría yo a ese tio, vamos pero ni por asomo. Es un borde, además siempre esta peleandose con todos. No me gustan esos chicos.
- ¡Yo no he besado a Niall! ¡Me parece increíble que vayan diciendo eso por ahí! ¡Eso no es mas que una tonta mentira! ¿Quién a dicho eso? - estaba más que alterada. A ver que en mi segundo día de clase ya vayan diciendo esas cosas de mi pues no es algo muy agradable la verdad. Me estaban dejando de guarra o esa era al menos mi impresión.
- A mi me lo a dicho Abbigail.
- ¿Quién? - no tenía ni idea de quien estaba hablando Maddison.
- Esa chica pelirroja de ahí. - me señaló a una chica blanca de piel, pelirroja bastante bonita pero eso si, si a sido ella la que a ido inventandose eso que se vaya olvidando de su pelo. Yo no era ninguna guarra que iba besandose con el primer tio que pillaba, ni mucho menos.
- Vale, voy a hablar con ella.
- Espera, que te acompaño. - Leire como siempre, venía conmigo. Esa chica se estaba convirtiendo como en la hermana que nunca tuve y eso me gustaba. Notaba que podía contar con ella en todo lo que le dijera. Asentí y fui a hablar con esa tal Abbigail.
- Perdona - le toqué el hombro y acto seguido se giró, mirandome con una cara como si se le hubiera aparecido un muerto o algo parecido. - ¿Tú eres la que va diciendo por ahí que me he besado con Niall? Porque eso es mentira.
- No, yo no he dicho nada. A mi me lo dijo Brittany. - otra que me decía nombres de personas que no conocía. ¿Tan difícil era decirme quien a empezado a decirlo todo?
- ¿Y a Brittany quién se lo a dicho? o mejor ¿Me puedes decir mejor quién a empezado con la mentira? Me ayudarías mas. - Y cuando fué a contestarme sonó el timbre y no me quedó mas remedio que ir a clase pero eso sí, yo hoy me iba a enterar de quién iba diciendo semejante tontería.
Las clases pasaron lentas y bastante aburridas. Además yo no podía parar de pensar en el imbécil que habría empezado toda esta tontería. Muchas chicas estarían encantadas de que fueran diciendo eso de ellas y de eso estoy segura, pero a mi no. El prototipo de chico perfecto para muchas de las chicas de este instituto es: chico malo, atractívo y que además que sea agresivo.
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Nada es como parece. (Niall Horan y tú)
Hayran KurguUna mudanza. Nuevas amistades. Una relación que no empieza de muy buen pie. Un pasado que vuelve. Muchas peleas y odio, pero sobre todo, amor.