Capitulo 31

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Llamé a las chicas una vez que Niall desapareció por esa puerta. Desapareció por esa puerta llevándose mi corazón. Llevándoselo todo. Yo todavía estaba ahí plantada. En mitad del pasillo. ¿Qué iba a hacer ahora? No quería llorar. Pero solo era pensar en lo inevitable. Sabía que lo haría.  Y aunque parecía extraño, siempre que acababa de llorar me sentía mas tranquila. Tarde o temprano lo haría. Seguro, aunque fuera para tranquilizarme. Pero lo haría. No les dije lo que pasaba, simplemente les llamé y les dije que vinieran  a mi casa. No iba a contarles todo eso por teléfono.

Me sentía rota. Me sentía vacía. Me sentía sin vida.

Llamaron al timbre y supe que eran mis amigas, yo no tenía fuerzas para ir a abrirles, pero debía hacerlo. Ahora  tenía que ser mas fuerte que nunca. Obligué a mis piernas a moverse hacia la puerta, donde allí estaban las chicas, Jackson y Simon mirandome con cara de pena, estaban preocupados. 

- ______. - murmuró Sam, al ver que yo seguía en el mismo lugar, de pie, con mi vista al suelo. - ¿Nos vas a contar que a pasado? - preguntó con voz dulce.

Por primera vez desde que llegaron, levanté la vista del suelo y vi que todos se encontraban sentados en el sofá, esperando a que les contara que era lo que había pasado hacía menos de una hora. Cogí aire, y empecé a caminar hacía los sillones, donde me senté e intenté tranquilizarme. Cerré los ojos y inspiré todo el aire que pude, para despues soltarlo lentamente. Una vez estaba un poco mas calmada. Empecé a contarles que era exactamente lo que había pasado. Se lo conté todos los detalles, con todas las palabras. Mis amigos me miraban con pena, y a medida que iba contándoles la história se iban acercando a mi mas y mas. 

- _____. - habló esta vez Ruth acercándose a mi. - Lo siento muchísimo. - me abrazó y los demás hicieron lo mismo. 

Las lágrimas no tardaron en salir de mi s ojos. Sabía que eran mis amigos, pero no quería que sintieran pena por mi. Me sentía la peor persona del mundo. Fatal. Horrible. Todo esto había ido por mi culpa. Por no confiar en él demasiado. Por creer a la persona que me mandaba mensajes. ¿Quién lo diría? Empezamos la tarde con risas, con alegría, esperando a conocer al novio de nuestro mejor amigo, con felicidad. Sólo felicidad. ¿Y cómo ha acabado? Triste, con lágrimas, con dolor. Las chicas se pasaron la tarde diciendome cosas como "Tú vales mucho mas que esto" "No te tortures" "Encontrarás a alguien mejor" "No vale la pena sufrir" "Todo estará bien". Pero no lo iba a estar. Nada iba a estar bien, y eso lo sabía yo tanto como lo sabían ellas, pero eso no me lo iban a decir. 

Después de estar casi dos horas llorando y hablando con mis amigos. Jackson y Simon se tuvieron que ir. Jackson se despidió con un abrazo y me dijo que no estuviera mal y que iba patearle el culo a Niall. Y Simon, bueno para no tener mucha confianza con él se a vuelto como un hermano mas para mi. Se despidió de mi con un beso en la mejilla y me dijo textualmente "Cariño, no estés mal, tu tranquila que hay una cosa que se llama karma. Y créeme, el karma es muy perra, se va a arrepentir de lo que te ha hecho, tal vez no hoy, pero algún día sí. Confía en mi." Después se fueron a no se donde, no sin antes prometerme que me iban a llamar mañana. 

Las chicas por otra parte, se quedaron a dormir a mi casa, gracias a dios. Cuando mamá llegó, nosotras ya estabamos en mi habitación "durmiendo". Agradecí mucho en esos momentos que mi madre llegara tarde de trabajar, no quería que me viese de esa forma. Las chicas estuvieron hablando conmigo hasta las tres y media de la mañana, mas o menos. Pero yo no podía dormir. Es que no podía. 

Bajé con cuidado hacia la cocina, donde allí, una vez llegué me preparé un vaso de leche caliente, tal vez así, pordría entrar en sueño. Recuerdo que cuando era pequeña, mi madre siempre que no podía dormir, me hacía un vaso de leche caliente con miel. La miel con el paso del tiempo a ido dejando de gustarme, pero la leche no, nunca. Siempre me funcionaba de pequeña así que...¿por qué no iba a hacerlo ahora?

Nada es como parece. (Niall Horan y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora