Capítulo 21

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DO KYUNGSOO

«Gruesas son mis lágrimas, gruesa es la línea de la vida y fina la oportunidad de vivir...»

Habían pasado dos días. Dos días sin Kris. Lo conocía bastante y él siempre tenía alguna excusa por la cual venir a mi casa y comer lo que mi madre le preparara, pero en estos dos últimos días no apareció. He salido al muelle a esperarlo como siempre, pero no fue y me preocupé por ello.

A Kris no lo había visto en dos días. Lo conocía demasiado bien y venía a casa por cualquier excusa

Me preocupa que le haya sucedido algo y que se niegue a recibir ayuda, él también podía llegar a ser orgulloso cuando se lo proponía. A pesar de que me molestaba que él no se dignara en contarme sobre sus problemas más grandes y fuertes, sabía que pronto llegaría el día en que pediría ayuda. No puede vivir aguantándose peleas él solo, para eso están los amigos, para ayudar.

Decidí que mejor debería darle un poco de espacio, quizás necesitaba tiempo con su familia o debía terminar de hacer algo. Traté lo mejor que pude en no pensar en él, hice mi mejor esfuerzo en no salir corriendo en busca de su presencia. Aunque sonase tonto, él es el único a quien podría rogar por su amistad. Era Kris, por algo quería seguir siendo su amigo. Me conocía bastante bien y siempre callaba cuando no quería hablar de algo.

Haría cualquier cosa por él, hasta me tiraría otra vez al agua por tenerlo a mi lado.

Me recosté boca abajo al recordar que pronto tendría que ir a la cena de compromiso de Jongin. Los padres de Baekhyun llegarían en una semana para terminar de arreglar algunas cosas del matrimonio y también debía estar presente en la boda porque según Yerim seré el padrino.

Solo quedaban unas cuantas semanas para ver a Jongin de la mano con otro y no he podido dormir a causa de ello.

Dejé que las lágrimas volvieran apoderarse de mí, pues hace unas horas estaba llorando por mi vida arruinada. Estaría mintiéndome al decir que no estoy enamorado de Jongin y la realidad de todo era que mi amor cada vez se hacía más grande, hinchando mi corazón con cada frase bonita que Jongin me susurraba al oído en nuestros encuentros.

En esos dos días, Jongin se ha mantenido robándome besos durante todo el día, importándole poco si Baekhyun estaba en la otra sala con mis padres y los suyos.

Siempre perdía la cabeza cuando sentía sus labios y escuchaba sus «Eres muy bonito, Kyung». Sacaba unos cuantos suspiros al escucharlo y mientras nos besábamos, pensaba que pronto terminaría destruido otra vez.

El daño no sería igual, pero el dolor sí. Aún tengo metido a Junmyeon en mi corazón, y en la otra parte donde tenía guardadas mis heridas, estaba Jongin. Dos mitades muy diferentes; Jongin es todo dulzura, sonrisa y sobre todo cariño a pesar de que estaba convirtiéndose en un egoísta. Junmyeon solo es una gota de veneno, una sombra clavada en mi corazón, un recuerdo inútil que se ha encargado de destruirme. Por más que sean diferentes, ambos gozaran destruirme.

Junmyeon ya lo hizo, ¿por qué Jongin no lo haría?

Lo hará, porque tiene un esposo y una vida llena de comodidad. Pronto volverá a irse para terminar su carrera y eso, más el peso que dejará cuando diga el , serán desbastadores para mí, logrando que me afecte de una manera un tanto cruda y realista.

Pero sus «me gustas mucho» y los «quisiera que estuvieras en mi vida por siempre» me torturaban hasta llegar al punto de destruir algunas pinturas. Pinturas que he estado guardando debajo del colchón, aquellas pinturas donde Junmyeon estuvo para mirarlas crearse.

Debería haber quemado todo que me recuerde a él, pero aquellas pinturas eran muy especiales para mí porque las había hecho con la intención de verlo sonreír.

Heaven «KaiSoo»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora