Nuevo empleo para Fleur

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Fleur se apareció en el callejón que queda a la vuelta de su apartamento y caminó hasta su casa, cuando entró noto una lechuza posada sobre la mesa, siempre dejaba la ventana abierta pues los hechizos anti muggles que colocaba impedían que alguien intentara robarle.

Tomó la carta que el ave tenia a sus pies, se extraño de recibir una carta con una lechuza desconocida, su lechuza según entendía estaba en Francia desde que le había enviado unas cartas a Gabrielle y aun no era tiempo que regresara. Abrió la carta y se sorprendió al leer su contenido.

"Estimada señorita Fleur Delacour, como usted bien debe tener presente, el próximo miércoles culmina su periodo de practica y pruebas al interior del banco de Gringotts en la esquina del Callejón Diagon y el Callejón Knockturn en Londres. Durante los últimos seis meses pudimos contar con sus ideas, su apoyo y su sentido de la organización para mejorar nuestros procesos y por eso con el beneplácito de William Weasley, he decidido concederle un puesto permanente con nosotros a partir del próximo lunes. Adjunto a esta notificación le envío la información sobre el puesto ofrecido, le pido por favor que nos envíe su respuesta con la lechuza que le entrego esta nota.

Ryhook

Goblin Mayor y director.

Gringotts Callejón Diagon"

Fleur que últimamente se estaba acostumbrando a ser sorprendida fácilmente, había vuelto a quedarse fría, releyó la carta varias veces, no podía creer que le habían ofrecido un puesto.

- pour voir un moment. Pourquoi dois-je me soucie tellement ce qu'il pense Bill? - Incluso la misma Fleur se sorprendido feliz de que Bill la recomendara y se reprendió a si misma por ello con una sonrisa. Después de leer la carta varias veces volvió a tomar el sobre y sacó el papel que se encontraba en su interior y que no había visto la primera vez. Los goblins de Gringotts acostumbraban a enviar las cartas en sobres y en papel debido a que se creía que de esta forma tienen mas privacidad.

"Estimada señorita Delacour

Esta es la información sobre la propuesta de empleo de la que se le habló en la carta, recuerde contestar afirmativa o positivamente con la lechuza que le fue enviada esta notificación lo antes posible.

Cargo anterior: Asistente área de encantamientos

Cargo propuesto: Encargada administrativa área de encantamientos

Sueldo anterior: 22 Galeones 27 Sickle y 3 Knut mes

Suelo propuesto: 45 Galeones semanales

Horario normal con descanso en las fiestas

oficina compartida con William Weasley

Labores de campo cuando sean necesarias

Recuerde contestar lo mas pronto posible."

Al igual que con la notificación, la rubia tuvo que leer varias veces la información consignada en el papel, prácticamente le doblaban el sueldo y según entendía estaría en un nivel similar al de Bill, eso mejoraría mucho mas su situación ademas de que en las fiestas podría ir a visitar a Gabrielle. Sin pensarlo dos veces tomo el papel en el que debía enviar su respuesta lo llenó positivamente y se lo entregó a la lechuza. El resto de la noche se la pasó escribiendo una carta a Gabrielle que le enviaría apenas llegara su lechuza.

Fleur termino su viernes tomando una deliciosa ducha, quizá lo único que extrañaba de su habitación en la mansión Delacour en París era la enorme tina en que solía meterse después de los días mas estresantes o cuando quería relajarse aun mas, en ese momento empezó a planear la visita que le haría a sus padres en diciembre, tenia un mes para planear todo. Debía dejar muchas cosas listas en Londres y sobre todo debía enviarle lo antes posible una nota a su hermanita para que decidiera regresar a casa para las fiestas antes de tiempo. Gabrielle solía quedarse con sus amigas un poco más en el colegio y solo regresaba a casa el día de navidad. Al salir de la ducha, caminó desnuda por su casa, había olvidado por completo que no había cenado debido a tantas noticias, tomó cereal con leche de la cocina y regresó a su cuarto, era el momento de leer un poco y dormir pues como cada sábado madrugaría a correr.

Fleur se levantó, tomo una ducha rápida y se puso su ropa para correr, tomó su varita y salio a correr. Mientras bajaba de su pequeño apartamento pensaba en que ruta tomaría ese día y justo recordó que Dumbledore le había dicho la noche anterior que saliera hacer deporte, este pensamiento fue el desencadenante para que decidiera tomar la ruta del rio, la misma ruta en que se había topado y competido con Bill y en la que habían terminado en el fondo del rio. Una sonrisa pasó por su rostro sin explicación alguna, Fleur emprendió su camino pensando en su nuevo y definitivo trabajo y en Bill que por alguna razón siempre volvía a su mente.

Bill Weasley había pasado la noche haciendo una guardia afuera del departamento de misterios del ministerio de magia para la Orden del Fénix, no sabia exactamente por que debía pasar allí muchas de sus noches pues según entendía ese lugar era como su nombre lo dice, un misterio, sabía que allí experimentaban con magia y probaban cosas pero nada que fuera útil, también sabia y esa era la única razón para que el, su padre y varios miembros más de la orden de Fénix pasaran días y noches enteras cuidando esa puerta, que Dumbledore estaba seguro que los mortífagos o El que no debe ser nombrado en persona intentarían traspasarla y sacar de ahí algo importante y debían tratar de impedírselo o al menos avisar al resto de la orden con un patronus para que llegaran a hacerlo. El pelirrojo pensaba en todo lo que le había pasado últimamente, se había encontrado a si mismo cometiendo estupideces o pensando en trivialidades cuando debería estar concentrado en otras cosas, pensaba que la culpable de todo eso era aquella rubia que ahora iba a ser su segunda en el trabajo y compañera, lo que mas le molestaba era que aunque en el fondo lo sabia sabia, era incapaz de culparla. Ella no tenia la culpa de lo que había pasado hacía un par de semanas cuando se vio por ultima vez con Brigitte y no fue capaz de hacerle el amor cuando ya estaban en la cama listos para ello, tampoco tenia culpa de que un encantamiento el mes pasado le hubiera salido mal por andar recordando la carrera del rio, él era el que estaba des concentrado y el que no quería admitir que muy en el fondo la chica le gustaba o al menos eso creía pues no era normal que el se pusiera así. Bill un chico cuyo romanticismo había dejado en una tumba en Egipto y que ahora se negaba al amor no podía sentir atracción por Fleur.

Irónicamente el pelirrojo no sentía sueño pero si cansancio, todo el día en el banco más toda la noche en el ministerio agotaban a cualquiera, decidió pasar por un chocolate a Grimmauld Place donde terminó tomando un desayuno doble cortesía de su madre, después de muchas excusas salió camino al rio, quería caminar y sabia que no había ningún lugar mejor para relajarse que la rivera del Támesis.

Fleur corría alegremente por la calle, aquel día tenia muchos motivos para sonreír, no recordaba haber tenido tantos en un solo día antes del que había vivido el día anterior, lo único que le faltaba era ver a su hermanita, abrazarla y salir con ella a caminar por los campos elíseos. A lo lejos Fleur vio algo que inesperadamente le alegró aun más la mañana, una cabellera roja que tanto conocía a unos doscientos metros adelante de ella caminando en su misma dirección, iba vestido con sus típicos vaqueros rotos y su cazadora, definitivamente se trataba de Bill, en cuestión de segundos una idea se cruzó por su mente y nada perdía con intentarla, aceleró su pasó y en un par de segundos alcanzó al chico que caminaba desprevenido.

Bill y Fleur, hechos el uno para la otra.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora