| Capítulo 39 |

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Cuando llegó a la estación estaba muy nervioso, pero porque no sabía cuál era su destino con la ley

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Cuando llegó a la estación estaba muy nervioso, pero porque no sabía cuál era su destino con la ley. Enseguida, dos policías corpulentos lo interrogaron y de vez en cuando lo trataban de inculpar con indirectas sin siquiera escuchar su versión.

—No quieran tratarme como a un criminal.

—Es que todos los hechos apuntan a que eso eres, amigo— le dijo el primer oficial de policía

—¿Cómo pueden juzgarme? ¡Ni siquiera han dejado que les dé mi versión!— los dos oficiales se miraron mutuamente para luego dejar que Michael hablara finalmente y mientras lo hacía, tomaban nota.

Cuando salió de ahí ya eran las 7:30pm, apenas le alcanzaba el tiempo para regresar al hospital. Al llegar a la recepción se encontró con el Dr. Crawford.

—¡Sr. Jackson! Qué bueno que lo veo; acompáñeme, lo llevaré a la habitación de la señorita Johnson— en el camino, le informaba sobre su estado de salud actual hasta que llegaron a la habitación —Y una cosa más: am... cuando le dé la noticia, sea lo más sutil y delicado posible, necesitará todo su apoyo en este proceso tan doloroso para ella, que también repercute en usted ya que era el padre de las criaturas— Michael asintió y entró



Michael

Se me rompió el corazón verla así. Tenía vendajes y hematomas en casi todo el cuero, pero me sentí aún peor al ver que su vientre abultado ya no estaba ahí, recordaba que todo había sido mi culpa, por mi maldita culpa perdió a esos bellos angelitos que sé que están con Dios en el cielo. Estaba paralizado, no sabía por donde comenzar para darle la noticia más triste de su vida.

Él se acercó y tomó su mano y la besó mientras lentamente escurrían lágrimas por sus mejillas, pero en eso sintió que la mano de ella se movía poco a poco... era  ahora o nunca.

—¿Michael?— preguntó adormilada

—¿Cómo te sientes?

—Mal y confundida: no se qué demonios hago aquí pero— exhaló el aire retenido —Aunque tengo ganas de aniquilarte no lo haré porque el estrés les hace daño a los bebés y además--- ¿Michael?— tocó su vientre y se asustó al no sentir más su abultada pancita —¿Y mis bebés? ¿Qué pasó con ellos?— eso lo hizo sentir peor

—Ellos— sus lágrimas volvieron —Ellos... murieron— se derrumbó y su llanto no podía parar

—¿Qué?— no podía creerlo

—Te atropellaron y el cofre del auto impactó en tu vientre.

—¡No!— cubrió su rostro con sus manos y comenzó a llorar —Juro que encontraré al malnacido que me hizo esto, ellos no merecían esto— seguía llorando. Michael se acercó a ella y estaba por decirle algo pero luego se arrepintió

—No puedo— se alejó rápidamente

—¿Qué quieres decir?

—... Sé quien es el responsable

—¿De verdad? Dime por favor quien fue el que---

—Fui yo.

Un gran silencio inundó la habitación, fue uno de los silencios más incómodos de sus vidas; sentía que era peor que confesar un asesinato, aunque para los ojos de la sociedad eso era él: un asesino.

Rápidamente trató de tomar la mano de su amada.

—Mi amor, escúchame— pero ella alejó su mano rápido

—Quiero que te vayas, Michael— dijo en un tono muy frío y sin mirarlo

—Pero nena, yo quer---

—¡Dije que te vayas, maldita sea! ¡No puedo estar con un asesino en la misma habitación! Creí que eras distinto; maldita la hora en la que me casé contigo y maldita la hora en la que dejé que entraras a mi vida— Michael no podía hacer nada más que permanecer con la mirada baja por el remordimiento que sentía —¿¡Qué hice mal para que nos hicieras esto!?— lloraba alterada, por lo que los monitores comenzaban a sonar de manera alarmante y Linda tenía problemas para respirar

—Linda tranquilízate ¿Si? ¡Enfermera!— a su llamado entraron dos enfermeras y tres doctores, entre ellos el Dr. Crawford quien se dirigió a Michael 

—Señor, le voy a pedir que se retire.

—Pero no puedo, tengo que quedarme con Linda, debo ver si está bien.

—Señor, ya nos llegaron todos los documentos de la policía, por ahora no puede estar cerca de ella, en la recepción hay un par de oficiales esperando por usted por lo que le pido de la manera más educada que se retire, notificaremos a sus familiares más cercanos sobre su estado de salud— y Michael salió

Al llegar a recepción vio que, efectivamente, se encontraban dos oficiales esperando a que él llegara.

—¿Sr. Jackson?— se acercó un oficial de policía y Michael volteó

—Aquí está su citatorio a la corte para rendir su declaración el día martes 17, esperará su veredicto y saber su sentencia— Michael no se esperaba eso, solo tomó aquel sobre amarillo con un semblante apagado, sin expresión alguna y salió del hospital

Caminó durante un tiempo hasta llegar a su antigua casa, en la que vivía cuando todavía era un universitario y tocó el timbre.

—Hola mamá.

—Hola cariño, pasa— tenía a la pequeña Trisha en sus brazos —Esta niña es todo un ángel, la puede cargar quien sea y aún así se comporta muy bien— dijo con ternura y orgullo al mismo tiempo que observaba a su nieta

Michael sonrió ante los halagos de su madre hacia su hija.

—¿Puedo cargarla?

—Claro que si hijo— le pasó a a la bebé que se encontraba dormida

—Debo presentarme en la corte el próximo martes, al parecer todos creen que lo hice a propósito— suspiró cansado al mismo tiempo que sus ojos se cristalizaban al borde del llanto —Si tan solo supieran que iba a pedirle una disculpa— y sin más, las lágrimas salían en silencio

Kate se entristeció al ver a su hijo tan derrotado y sus lágrimas también se hicieron presentes

—Hijo, no sabes como me duele verte así... yo te creo ciegamente, pero por desgracia las personas no siempre ven más allá de los hechos. Michael, no te des por vencido; mira no puedes evitar ir a la corte, pero solo di lo que realmente pasó, estaré ahí para apoyarte sin importar que. Tienes a varias personas que te aman: está Linda, de alguna manera; estoy yo y esta princesita que depende totalmente de ti— señaló a Trisha

—Haría lo que fuese por ella, mueve mi mundo y lo cambió para convertirlo en uno mejor— acarició su pequeña frente y la besó con infinita ternura —Trisha ahora es mi fortaleza más grande.

—Por eso debes presentarte a esa corte y demostrarles a todos que eres inocente.



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My Heart is Full of Love © | Michael JacksonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora