My Heart is Full of Love © | Michael Jackson

| Capítulo 9 |

Al día siguiente Linda se alistaba para ir al hospital como todos los días, salió de su departamento y empezó a caminar por la calle pero se sentía observada a cada paso que daba, volteaba y no veía nada, se le hacía muy extraño, así que aceleró aún más su paso al mismo tiempo que sentía que atrás también alguien lo aceleraba hasta que la hicieron girar sobre sus talones encontrándose cara a cara con Chris.

—Hola hermosura— dijo con aires de galán

—¡Suéltame maldito bastardo, ayuda!— gritó con mucha angustia y desesperación

Después de haber dicho esto, él le colocó cloroformo en la nariz y la desmayó al instante, para su suerte no había nadie y la condujo silenciosamente hasta un callejón oscuro donde la dejó en el suelo para llamar a Diana.

—Si diga.

—Diana, está hecho ¿Qué sigue?

—Ok Chris, la llevarás a nuestro lugar de reunión, ahí te diré que haremos.

—Eres fantástica.

—Así soy yo, pero no hay tiempo, te espero en dos horas.

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Y la metió en el automóvil lo más rápido posible para que nadie se diera cuenta y partió hacia donde se encontraba aquel lugar de reunión. Después de tanto manejar por fin llegó a su destino con Linda aún desmayada, entró con ella en brazos a una habitación prácticamente sin ventanas.

—Muy bien, ahora tu te quedarás aquí y vigilarás que no intente salir por ningún motivo más que para ir al baño.

—Querrás decir que nos quedaremos y vigilaremos ¿no?

—¡No seas imbécil Chris! por supuesto que no ¿no te das cuenta? mientras tu estés aquí con ella yo podré tener a Michael conmigo.

—Eso me agrada.

Michael

Iba de regreso a casa caminando porque por alguna razón hoy cuando iba a Duxston vi que las llantas de mi auto estaban sin aire, se me hizo algo extraño pero a la vez no tanto porque en ésta zona y en ésta época son frecuentes este tipo de cosas, pero bueno, regresando al tema, iba caminando cuando me acordé pasar por Linda a su trabajo pero al estar ahí me encontré con una de las peores noticias de toda mi vida.

—Michael, gracias a Dios— exclamó Genevieve preocupada

—Oh ¿Qué sucede? ¿Dónde está Linda?

—¡Ése es el punto. Linda no se presentó hoy a trabajar, ya marqué a su departamento y no me contesta, de verdad no sé que hacer!— dijo al borde de las lágrimas

—¡Yo si!— dijo y ambos voltearon a ver a Diana

—¿Tu qué rayos haces aquí? Lárgate.

—No creo que quieras que me vaya cuando te enteres de lo que le hicimos a tu noviecita— dijo sarcástica

—¿¡Qué?! ¿Dónde está? ¡Si le haces algo te juro que no volverás a ver la luz del día!

—Yo no me ensuciaré las manos torturando a esa zorra, Chris lo hará.

—¡Más te vale idiota que nos digas dónde esta!

—Tu no tienes nada que decir zorra, así que cállate— dijo al mismo tiempo que se iba acercando más

—¿Qué, te asusta que te amenacen y por eso vas callando a quien se te pegue la gana? pero que irónica me saliste, lárgate ahora mismo o llamo a seguridad.

—Ok me iré, pero no porque tú me lo dices.

—Diana dime dónde la tienes, haré lo que sea para que me lo digas.

—¿Lo que sea?— dijo levantando una de sus delgadas cejas

—...Si.

—Lo tendré en cuenta querido, que tengas un buen día— se alejó de allí

En ese momento Michael se quedó en shock y lo que hizo fue correr a las afueras del hospital, sentarse en una de las banquetas y llorar de desesperación e impotencia el no poder hacer algo que evitara que le hicieran a su novia.

—Mike, escucha-- la interrumpió

—Ella es mi vida entera, si algo le pasa no me lo perdonaría porque podría haberlo evitado.

—Te entiendo perfectamente, pero si quieres luchar por ella tienes que ser fuerte y yo te ayudaré.

—¿De verdad?

—Claro que si, no hay que darle gusto a esa perra de vernos desganados, nosotros somos más listos que ella— y se abrazaron en muestra de apoyo mutuo

Linda

Después de dos horas había despertado sobre un colchón viejo y un cuarto sin ventanas.

—¿Dónde estoy?— dijo con la vista nublada que poco a poco se iba aclarando y levantándose del colchón

—¡Ay no, ayuda!— pero nadie podía oírla ya que ese "lugar de reunión" era en realidad una cabaña de cemento en medio de un gran terreno baldío

—Vaya vaya, veo que ya despertaste.

—Chris, por favor no me hagas nada y déjame ir, no se lo diré a nadie.

—Dile ese cuento a alguien más ¿crees que soy estúpido como para no saber que le contarás a la policía y a tu novio cuando te suelte?

—No sabes con quien te metes, ¡sácame ahora mismo!— le gritó y le dio una bofetada

La vio con una furia impresionante.

—Bueno, si quieres que te trate como a una cualquiera te trataré como a una— se acercó peligrosamente a ella y la aventó al colchón.