Dos

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Mira las estrellas,

Mira como están brillando para ti,

Y todo lo que haces,

Si, eran todas amarillas.




Los pasillos de la Universidad eran lo mismo todas las mañanas. Muchos adolescentes caminaban por allí, entablando charlas con otros. Profesores, que pasaban con su taza de café y sus libros bajo el brazo.  El conserje, que le sonreía a cada persona que lo saludara. Porque si, eran todos amigables, o casi todos.



Te consideras por ser una persona espontanea. Blanca por fuera, negra por dentro. Con tus veinte años lograbas sacarle la paciencia a tu familia, tener una buena relación con los profesores pero no lograbas socializar con gente de tu misma edad. Con veinte años habías decidido salir del mando de tus padres y probar vivir sola. Pero no te estaba dando demasiado resultado. Hasta hace veinticuatro horas atrás trabajabas de moza en un barsucho de alguna esquina, donde la paga no era excelente y la propina dejaba mucho que desear, pero que te servia para pagar la pensión donde te alojabas. Un mal entendido termino con vos patitas en la calle sin un trabajo para mantenerte. Y tenias que pagar el alquiler, sobrevivir, y por sobre todo seguir manteniendo al día la cuota de la Universidad. Tu carrera de Arte y Diseño.




Saliste de la Universidad con la cabeza a punto de estallar. No entendías como los encargados de llenarte de información cada día podían sobrevivir a un día entero ahí dentro, cuando vos en tan solo cuatro horas diarias sentías que tu cabeza era un volcán a punto de estallar. Metiste tus manos dentro de los bolsillos de tu campera luego de colocarte los auriculares y comenzaste a caminar en dirección a la pensión. 




-Bianca - La voz de la celadora de la pensión te saco de tus pensamientos - Por fin te encuentro - Tragaste saliva rápidamente, sabias lo que se podía venir - ¿Cuando me vas a poder pagar?



-Lo lamento Mercedes, estoy haciendo todo lo posible para poderte pagar.


-Hace una semana me venís diciendo el mismo cuento, Bianca. Yo ya no puedo esperar mas.


-¿Que me queres decir con que no podes esperar mas?


-Tenes dos horas para irte. Sino llamo a la policía - Se dio vuelta y se fue taconeando por la calle, tal como había llegado. Ahora si estabas en serios problemas.




**




Compartían una ronda de mates en el comedor de aquella espaciosa casa. Habían comprado unas facturas para compartir con los demás integrantes de la casa, pero los mismos no se encontraban. El televisor dejaba escuchar las noticias que acontecían en el día. 



-Mañana viajare a Brasil, mis viejos me mandaron el boleto para que los visite - La chica giro la cabeza para centrarse en el. El, quien llevaba su vista fija en el televisor, y que mientras le hablaba no volteaba a verla.



-¿Viajas con tu hermano? - Habia dudado en preguntarlo. Aunque ambos hermanos vivan bajo el mismo techo su relación es escasa. Hasta se nota la diferencia entre los dos.



-No que yo sepa. Preferiría que no sea así - Ignacio, o Nacho como suelen llamarlo, no tiene una pizca de intención de solucionar el conflicto que conllevan con su hermano desde tiempo atrás - ¿Acaso te preocupa?



-Tan solo pregunte - La muchacha trago saliva mientras llevaba la bombilla a sus labios - Yo me quedare acá, tengo un examen la próxima semana así que aprovechare a estudiar.




-Tampoco te pregunte - Y el castaño no se daba cuenta cuanto lastimaban esas palabras. Micaela intentaba mostrarse fuerte antes las duras palabras que su novio tenia para con ella, pero en la noche en la soledad de su habitación es cuando caía en cuenta. Nacho jamas la amo de la manera en que ella lo sigue amando. Pero a la mañana siguiente fingía ser la novia perfecta para el chico casi perfecto - Pablo vuelve la próxima semana. ¿Dijo que día? - Sus palabras la sacaron de su pensamiento. Ladeo la cabeza para alejarlos.




-No que yo sepa - Esbozo una pequeña sonrisa, buscando que Nacho por lo menos intentara alguna. Pero no solo, solo visualizo como se levantaba del sillón para encaminarse en dirección a la cocina- ¿Te vas?




-Acaso que seas ciega y no te des cuenta. Si, me estoy yendo - Pero nunca volteo a mirarla. Una vez mas Micaela caía en cuenta que el Nacho tierno y comprensivo que alguna vez la enamoro ya no existe. Pero que importancia tenia eso, ella misma seguía engañándose que al día siguiente los ánimos de Nacho sean distintos. Que alguna vez volvería a aparecer el viejo Nacho que conoció.




-Ahora voy con vos - Logro que el castaño se girara antes de entrar a la cocina. Micaela estaba a punto de pararse cuando la voz de Nacho la freno por completo.



-No tenemos que estar juntos todo el día como perros falderos, rubia. Hace la tuya - Nacho volvió a girarse para meterse dentro de la cocina, vaya a saber que. Por su parte, Micaela tan solo tomo el impulso para pararse y comenzar a caminar rumbo a la puerta de salida. Necesitaba estar sola.






Yo vine,

Escribi una cancion para ti,

Y todas las cosas que haces,

Y fue llamada amarillo






Bueeeenas... Bueno, aca conocieron mas personajes. ¿Que tal va siendo? Gracias por todo!


Me gustaria que me contarán que les va pareciendo hasta ahora. Toda sugerencia sera tomada en cuenta.



T.

Bajo el mismo techo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora