Seis

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-¿Y que se te dio por venir para acá? - Micaela compartía un café en el bar junto a Bruno. El morocho le había insistido que se lo aceptara. Se sentía culpable por el haberla chocado, y ademas le haría bien la idea de compartir un rato junto a alguien.



-Necesitaba escapar un poco, encontrarme - El morocho dudaba en contarle su historia a Micaela. Aunque su mirada le brindara confianza no la conocía.



-¿Y invitas un café a cada una que chocas? -Micaela se llevo el pocillo de café a los labios luego de sonreír apenas. Habia dudado en aceptarle el café, pero creía que no estaría tan mal. No le generaba desconfianza.



-No, sos la primera - Bruno sonrió un poco cuando la rubia rió apenas - Me siento todo un campesino estando aca, no conozco nada.



-A vos solo se te ocurre venirte sin antes haber averiguado algo - Lo regaño sin conocerlo. Bruno sonrio para llevarse la taza a la boca - ¿Dejaste a alguna novia alla?



-Si, a mis cien novias deje - Bromeo. Ambos soltaron la carcajada - Tanta cara de gato no tengo.



-No, solo un poco. ¿Y donde te vas a quedar?



-Buscare un hotel para quedarme. Y despues un trabajo.



-Creo que yo puedo ayudarte - Micaela sonrio satisfecha cuando Bruno asintio con la cabeza. 





**





La hora de la cena habia llegado. Bianca durante lo que restaba del dia se habia encargado de acomodar sus cosas dentro de la acojedora habitacion que le habian concedido. En la cocina Florencia se encargaba de terminar de cocinar los fideos, mientras Sergio le hacia compañia. Ramiro aportaba poniendo la mesa, mientras que su mellizo permanecia tirado en el sillon mirando la television. Gonzalo preparaba el jugo.

-¿Puedo ayudar en algo? - Bianca aparecio por la puerta con la mano en sus bolsillos. Sergio se presento mientras le dejaba un beso en la mejilla. Junto a Micaela era el unico que todavia no la habia visto.

-Podes ayudarme con el jugo - Gonzalo le hablo desde la punta de la isla del desayunador. 

-Claro - Bianca sentia que no debia ponerse en exquisita a la hora de tener que aportar en algo. Se acerco a Gonzalo con la idea de ayudarlo, pero la voz de Florencia la freno.

-No hace falta, Bianca - La voz serena de Florencia hizo que Sergio se girara para mirarla - Hoy no hace falta que ayudes.

-Aunque sea lavo los platos despues

-Si la rubia dice que no, es no Bianquita - Sergio sonrio antes de dejar un beso en la mejilla de su novia- ¿Te puedo decir Bianquita no?

-Claro, no me molesta - Bianca sonrio para girar y salir de la cocina. Se ubico en la otra punta del sillon, en el mismo donde Nacho permanecia sentado.

-¿Me extrañabas que venis a sentarte conmigo? - Bromeo el mellizo mientras apoyaba los pies sobre la pequeña mesa ratona.

-Eso querrias vos - Bianca rodo los ojos mientras respondia un mensaje en su celular.





Minutos despues cada uno estaba sentado en algun lugar de la mesa por empezar a comer. Quien habia arrancado fue Nacho, quien en ningun momento se dio cuenta que su novia no estaba presente.

-¿Alguien sabe donde esta Mica? - Quien lo pregunto fue Sergio, quien se extraño que la rubia no estuviera ya que siempre esta para ayudar o simplemente haciendo compañia.

-Ni idea - Gonzalo no la habia visto desde la mañana cuando la cruzo cuando se encaminaba a la cocina para desayunar. Le extraño que no estuviera, Micaela no era de irse sin avisar.

-Debe andar por ahi - Nacho no se preocupaba tanto. Conocia a Micaela (o eso creia el) y sabia que andaria por algun lado haciendo de las suyas.

-Es tu novia, gil - Sergio rodo los ojos. Nacho jamas cambiaria.

-¿Y eso que tiene? - Nacho no tenia remedio. Escucharon la puerta abrirse y la voz de Micaela se hizo escuchar - Ahi la tienen que tanto preguntaban por ella - El mellizo prefirio seguir deleitando la comida que Florencia habia preparado.

-Chicos, les presento a Bruno - Nacho alzo la mirada al escucharla hablar. Bruno se encontraba al lado de Micaela. Ambos tomados de la mano - Va a ocupar una habitacion.

-Bienvenido, Bruno - Florencia le sonrio para acercarse y dejarle un beso en la mejilla - Ella es Bianca - Le hablo a ambos mientras la señalaba. Bianca sonrio - Es nueva tambien - Micaela le sonrio en forma de saludo. Bianca lo mismo. 

-Falta Pablito y estamos todos - Ramiro hablo desde la punta de la mesa.

-¿Quien es Pablo? - Bianca hablo. No lo habia escuchado nombrar.

-Ya lo vas a conocer, vuelve la otra semana - Micaela ocupo un lugar al lado de Nacho, mientras que Bruno se sento del otro lado. La rubia quiso dejarle un beso en los labios a su novio, pero solo recibio el cachete del mellizo. La imagen de Micaela tomada de la mano de alguien a quien el no conocia le habia cambiado el humor. Podia tratarla como quisiera, pero era Micaela. Su Micaela.









Bajo el mismo techo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora