3. Descendiente de la Niebla (Completa)

Sueños

Maratón Final 1/8

Narra Ali.

Vi a Francisco cruzando la calle acelerando su patines cuando sucedió el accidente.

- ¡Francisco!- grité mientras él se derrumbaba sobre el suelo. Su guitarra fue aplastada y su cabeza dañada por la caída.

- ¿Lo conoce?- preguntó el conductor que había frenado por mi grito.

- ¡Es mi novio!- declaré sin pensar llorando a su lado.- ¡Él estaba cruzando bien, usted debe ceder el paso a los peatones!

- ¡Él apareció de la nada!

Llamé a la ambulancia, y a mamá para que le hable a su mejor amigo, el padre de Francisco. En pocos minutos, los padres estaban abrazados.

- Ali, será mejor que vayas a tu casa.- me dijo Simón.

- Pero quiero ayudar...

- ¡Ya hiciste suficiente!- me dijo Ámbar furiosa provocando que me fuera corriendo a casa donde lloré y lloré hasta quedarme dormida.

Despierto. Otra vez el mismo sueño con aquel espantoso recuerdo. Fui a la habitación de Benjamín que se encontraba dormido sobre su cama. Me recosté a su lado y lo abracé, sientiendome por medio de él, más cerca de Francisco.

- ¿Qué pasa?- preguntó sin abrir los ojos.

- Otra vez el mismo sueño.- sinteticé y con ello me dió un nuevo abrazo. Ayudándome a descansar pero no acababa de sanar mi dolor.

- ¿Qué vas a hacer cuando Bella quiera acostarse conmigo?

- ¡Benjamín!- exclamé riendo.

- No te me pongas celosa, hermanita.

- Solo creo que es algo pronto para tener sobrinitos.

- ¡Qué pervertida resultaste!- rio él mientras me dormía en sus brazos.

- Aw, qué lindos.- decía Bella con su cámara entre manos.

- Necesito ir a ver a Francisco.- declaré saltando de la cama yendo al hospital donde me decían que aún no recibía visitas. Simón había buscado algo para almorzar con su mujer mientras ella se encontraba esperando por novedades en la sala de espera.

- Disculpe, Ámbar. Quisiera saber cuándo podré ver a Fran.

- ¿Después de todo lo que haz hecho no te basta?

- ¿De qué hablas?

- Esto es tu culpa, chiquita. Él estaba distraído yendo a tocarte una canción para completar tu tonta lista. No me mires con esa cara de mosquita muerta porque sabes que tengo razón. No quiero que vuelvas a lastimar a mi hijo. Así que haznos un favor y no vuelvas que aunque aceptaran visitas, no voy a permitir que sigas jugando con sus emociones.- decía cuando Simón llegó con una bandeja con un par de sándwiches.

- ¡Ámbar!- exclamó él mientras me iba corriendo.

-  Ali ¿qué pasó?- me preguntó Benjamín cuando llegué a casa apartandose de su novia.

- ¿Pasó algo con Fran?- consultó Bella mi hermano la tomaba de la cintura.

- Es mi culpa.- declaré llorando.- Es mi culpa que Francisco esté en el hospital. Por mí corría distraído. Por mí y mi estúpida lista.

- Ali.,.- me decía Bella.

- Ámbar me acaba de hacer ver toda la realidad. - dije resumiéndole lo que la rubia me había dicho.