No te avergüences de mi... sólo quiero darte mi amor (TODAE)♡

Una extraña navidad.

Era un día como cualquiera para mi, puesto que no era tan celebre con la navidad.

- Vamos mi Hyun -me sonrió enorme.

Después de salir del hospital todo regreso a la normalidad, si es que así podía llamarlo, aunque... si, estaba claro que debía de hablar con el pelinegro.

- Espera Kang -lo tome del brazo y él me volteo a ver sin quitar la sonrisa que adornaba su rostro.

- ¿Qué pasa? No sueles decirme de esa manera -poco a poco la sonrisa desapareció y alzó ambas cejas.

- Bueno -ya me había puesto nervioso y mire al suelo- yo... yo quiero hablar contigo.

- ¿De qué?

- La verdad -alcé la vista mirándolo- quiero saber porque te fuiste con Ri por un tiempo... ¿Por qué con él? ¿Me querías poner celoso?

- Hyun -se acercó y me abrazo- ¿Cómo puedes creer eso de mi? No, para nada, yo me fui con él por otras razones.

- Dímelas.

Noté que dudo un poco hasta que tomó aire hablando al fin.

- Bien -se separó de mi y me miró a los ojos- la razón por la cual me fui con él era porque yo sé la experiencia de Ri en la intimidad y quería consejos.

- ¡¿Qué?! ¿Te metiste con él? ¡Kang...!

Me beso repentinamente no dejando continuar el grito de su nombre y nuevamente me soltó.

- No -abrió lo más que pudo ambos ojos- yo no sería capaz de tal cosa, simplemente hablar y demás, al verte así -disminuyó la voz- con GD me dieron demasiados celos, bastantes y yo sé que él es más aventado que yo, es más abierto... literalmente... -rodó los ojos- y le pedí ayuda a Riri para que volvieras a enamorarte de mi y no perder ante el líder.

- ¿Y por eso usas ese vocabulario tan sucio?... -arquee una ceja.

El pelinegro sólo se ruborizó y agacho la cabeza.

- ¿No te gusta?

- Me encanta -seguido de esto tome de su mentón levantado su rostro y conectando nuestros labios en un cálido beso.

Lo tomé de la cintura apegando su cuerpo con el mio, ya era feliz, si, nuevamente era feliz al saber que no fui engañado con el menor y que tenía a un Dae lleno de consejos por experimentar.

Luego de unos minutos nos separamos para tomar aire.

- Mi Hyun creo que tenemos que ir abajo con los demás -rió de manera leve.

- Si, yo también lo creo pero espera... -lo volví acercar a mi al ver como había comenzado a caminar a la puerta, lo abrace- te amo mi Daesung... de verdad te amo -susurré en su oído.

Al separarme vi su rostro con una enorme sonrisa y sus mejillas llenas de color rojo carmín mientras sus ojos se hicieron más pequeños de lo acostumbrado.

- ¡Ahhh! ¡Yo también te amo mi Hyun~ieh!

Me rodeó con ambos brazos el cuello y salto riendo.

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Ya en la sala...

- Apúrense, que tenemos que preparar la cena.

- Cállate, cuando seas el líder das las ordenes pequeño demonio.

- Ah pero si querías enviarme a Winner.

- No, tú jamás dejaras a Big Bang, Ri.

- Deja tus cursilerías para tu novia Bae.