Departamento de Nathan.

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Logan recibió una llamada, no sé quién sería pero se disculpó y fue a hablar a unos metros de mí

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Logan recibió una llamada, no sé quién sería pero se disculpó y fue a hablar a unos metros de mí. En realidad se escuchaba lo que decía.

- ¿Hola? Sí. Estoy en eso. No, okay. Sí, tranquilo. Claro que no, soy muy bueno -dijo con un tono bastante arrogante y extraño...

¿De qué estaría hablando?

Ay Maia, eres muy chismosa. Dice mi mente.

- Lo siento por eso -dijo Logan volviendo conmigo.

- Claro, está bien.

- Maia... Necesito irme urgente. Mi primo me necesita. Lo siento mucho, espero que no te enfades -dijo.

- Oh no, claro que no. Si es urgente ve. No hay problema -dije con una sonrisa forzada. La verdad si había problema, era nuestra cita.

- Gracias, adiós -dijo sonriendo- Te veo mañana en el salón.

- Por supuesto, adiós -dije y se fue corriendo a su auto. A decir verdad su auto era muy lindo, también era de carreras, y creo que en algún lado lo había visto, pero no estaba del todo segura. Quizás estaba equivocada.

Me senté en el parque sola, necesitaba aire fresco. La verdad extrañaba a mi padre, con él iba de pequeña a ese mismo parque, esto me estaba resultando muy melancólico.

Cerré mis ojos inconscientemente.

Flashback

- ¡Atrápame papá! -grito desde arriba del tobogán y desciendo por el juego- Woooooo.

Mi padre me sonríe y luego me atrapa, caigo en sus brazos y besa mi frente.

- Pero que hija tan valiente y hermosa tengo -dice sonriendo mucho más- Y eso que tienes a penas seis años, mi pequeña.

Me río- ¡Te quiero mucho papá!

- Yo mucho más -dice- Siempre estaré para ti, eres mi tesoro más grande.

- Yo también estaré para ti papá, siempre -dije.

- Te adoro, mi niña -dijo abrazándome.

Fin de Flashback

Unas semanas despues de eso... Mi padre perdió la vida.

Abro mis ojos y sus palabras:
«Te adoro mi niña»
Suenan en mi mente.

Sin darme cuenta varias lágrimas comenzaron a  salir de mis ojos rápidamente.

Nunca había llorado por un recuerdo, me hacía mucha falta mi padre. Extrañaba sus: "Buenos días mi niña" "Vamos mi niña"

Yo era su niña, él me amaba, siempre me lo decía.

La Música es mi Vida, Idiota.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora