Parte 2

3.1K 257 7
                                    


Al día siguiente por la mañana, después de que Mary Margaret y Henry salieran para el colegio, Emma se preparó y decidió ir a hacerle una visita a Gold. Esperaba de verdad que estuviera en condiciones de ayudarla. Una vez en el sitio, entró en la tienda haciendo sonar la campana que anunciaba su presencia. Rumpelstiltskin salió de la trastienda.

«Miss Swan, ¿a qué debo el honor de su visita?»

«Buenos días, Gold, necesito de su ayuda»

El hombre elevó una ceja, sorprendido

«Y bien, ¿qué puedo hacer por usted?»

Emma dudó, no estaba segura si al final sería una buena idea, pero sus deseos de saber más sobre Regina era más fuerte.

«Me gustaría saber más sobre el pasado de una persona? ¿Existe algún hechizo?»

«¿De quién se trata?»

«No creo que le importe» dijo ella molesta

«Muy bien, entonces la dejo»

«Espere, es Regina» soltó ella

Gold se echó a reír, lo que sacó de quicio a la joven

«¿Y por qué?»

«Porque es la madre adoptiva de Henry y me gustaría saber más sobre la persona que ha criado a mi hijo»

«En efecto, puedo comprender que sienta curiosidad ante el tema, sobre todo desde que la maldición se ha roto. Desgraciadamente, querida, no puedo decirle nada»

«Pero, ¿por qué? Ahora que le he dicho que se trata de Regina, podría contarme. ¿Qué le pasó para que llegara a ser tan diabólica?»

«No lo sé»

Emma miró a la bestia intensamente

«¡Está mintiendo Gold!»

Él sonrió y se dirigió hacia el mostrador, del que sacó una caja que contenía una botellita.

«Quizás tenga algo que pueda ayudarla»

«¿El qué?» preguntó Emma intrigada

«Magia, solo que es un hechizo prohibido»

La rubia tragó saliva, todo eso no presagiaba nada bueno, no tenía ninguna confianza en él, pero su curiosidad la empujó a pedir más detalles.

«Esta botellita contiene un hechizo que permite ver la vida pasada de cualquiera. Es necesario primero meter un cabello de la persona en la botellita, después debe meterse en el agua y echar el contenido»

«¿Quiere decir que debo tomar un baño y echar eso dentro?»

«Sí, eso es»

Emma reflexionó, no parecía al fin muy complicado. Cogió la botella que Gold le tendió. Lo más difícil será conseguir un cabello de Regina. Se iba a marchar cuando un detalle le vino a la mente

«¿Cuál es el precio?»

Rumple sonrió, una sonrisa que hizo que Emma sintiera escalofríos por toda la espalda.

«Eso, querida, lo tiene que descubrir usted»

La joven se quedó mirándolo durante unos segundos, intentando descifrar lo que había querido decir. Al no encontrar ninguna respuesta en su mirada, guardó la botella en el bolsillo y salió de la tienda.

En la comisaria, Emma se dejó caer en la silla y encendió el ordenador. No tenía gran cosa que hacer y aprovechó para pensar en el mejor modo de obtener un cabello de Regina. Era necesario utilizar a Henry, solo él podría llevarla a casa de la morena sin levantar sospechas. Sacó la botella para examinarla mejor. La abrió y la olió, era inodora e incolora. ¿De verdad la utilizaría? ¿Cuál era el precio del que Gold hablaba? Una bola se formó en su estómago, tenía miedo, pero quería realmente saber. Hacia mediodía, se dirigió a Granny's para almorzar.

ObsesiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora