Sweater Weather

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HOLAAA

ATENCION!
ESTE CAPITULO ES LARGO PERO CREO QUE VALE LA PENA LEERLO :)

— Ya estamos hablando.

— Malia... Lamento haberte ocultado la verdad por tanto tiempo yo solo...

— Querías protegerme? Si, tu manera de proteger me da nauseas - Digo interrumpiéndola, me acomodo las cosas y comienzo a caminar.

— Malia se como te sientes...

¿Sabe como me siento? ¡Sabe como me siento!.

Al escucharle decir eso mi corazón comienza a palpitar a mil por hora bombeando la sangre por mis venas mas rápido que en un abrir y cerrar de ojos.
Me volteo a ella ya incapaz de contenerme él coraje.

— ¡Tu no tienes ni la menor idea de como me siento!, Me siento engañada, timada, burlada y usada! ¡Se hace tres días lo que tu sabias hace casi un mes atrás Lucy!. - Exclamo enfadada y totalmente alterada.

— ¡No creo que debas de poner esto en mi contra por él resto de la vida!- Me contesta igual de enfadada. - Y menos aun cuando te he llamado, texteado y buscado por todos lados buscando tu perdón Malia... - Hace una pausa y junta ambas manos para llevárselas a la boca.

— Asi que ahora soy satanás?! Vete al...

Malia... Malia...
Susurra una voz conocida en mi cabeza interrumpiendo mi habla, estaba recordando..., recordando lo que en los últimos par de meses me había ayudado a contenerme y a comportarme... Era una voz cálida, tranquilizante, dulce y comprensible, era aquella voz que me mantenía a raya con solo escucharla..., la voz de Stiles.
Siento como los oídos se me tapan y como todo mi ser se concentra en esa voz...

— Lucy... Creo que debería irme - Balbuceo sin pensar..., tenía que salir de ahí.

— Malia... - Contesta con preocupación.

Niego con la cabeza para tratar de dejar esos pensamientos de lado y salgo caminando lo mas apresuradamente posible de Allí... Mierda...
Es como flashes..., todo vuelve menos él.
Salgo de las canchas del lacrosse para llegar al patio del instituto, camino un poco más hasta llegar a la pequeña zona donde se encuentran las mesas, con ese tono de pintura color azul deslavado y las duras bancas de metal. Tomo asiento en una y suelto un gran suspiro.

— Te estás volviendo loca Malia - Susurro para mí misma mientras que trato de relajar mis pensamientos.

El sol me pega de espaldas por lo que mi sombra es lo único que veo además de la superficie de la metal con pequeños agujeros.
Frunzo el ceño confundida. Siempre me había preguntado ¿Porque agujeros? Que acaso era tan costoso fabricar una mesa y bancos enteros?.
Veo como otra sombra se posa al lado de la mía. ¿Quién podría ser?. Me pregunto confundida y con curiosidad.
La sombra se mueve y entonces se sienta al lado mío la persona dueña de esta. Broke.
Pongo mi mirada en ella claramente aturdida y sería.

— Malia no hagas eso, arrugas linda - Responde a mi gesto.

— ¿Que diablos quieres? - Pregunto en un tono de voz que refleja entre enojo, fastidio y sobre todo ganas de poner un puño en su fea y maquillada cara.

Arruga la cara con desagrado y luego saca los labios de una forma un tanto muy perturbadora.

— Oye no tienes que ser tan agresiva.

— Solo viniste para decirme que no sea agresiva o Es que no hay a quien robarle el novio? - Pregunto de forma sinica y grosera.

STAY (Stalia) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora