Una noche en Grillby's
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Esa noche decidí no salir a jugar, había una confusión en mi interior que me agobiaba, lo peor de todo es que no podía comprenderlo, tampoco sabía qué hacer, justamente me serviría los ánimos que mama me daba cuando me sentía mal y aunque lo odie, debo de admitir que me hacen falta los consejos de papa, quizás el sepa que me está pasando y sabría que hacer.
Di un fuerte suspiro para sentarme en la cama, mire la hora, la 1 am. Había pasado como 3 horas de haber ido a dejarla a su casa, el estomago me gruño, apenas había probado bocado alguno con ella presente, podría aprovechar para ir a ese lugar tan cálido que había visto la primera semana de estar aquí. Me levante para tomar las llaves, el casco y mi cubre bocas, baje por las escaleras hasta llegar al departamento del dueño del edificio y empecé a patear la puerta.
-¡Hey vejestorio!, ¡Quiero mi dinero ahora mismo!- seguí pateando la puerta con mayor fuerza que hacía temblar las paredes y con ello algunos vecinos empezaron a asomarse, sin en cambio al ver que se trataba de mi, estos simplemente volvieron a sus departamentos. Estuve algunos momentos así hasta que escuche algunos pasos, la puerta se entre abrió para estirar su mano y darme el dinero, lo tome para empezar a contarlo mientras este me miraba nervioso, cerrando con fuerza sus ojos
-Bien, esto me servirá para este mes, oye iré a comer algo fuera ¿Tienes dinero extra?- este me miro suplicante
-Y no es petición...- lo mire molesta al quedarse ahí parado como imbécil a lo que empezó a tartamudear buscando entre sus bolsillos y estiro unos pocos billetes
-Es todo lo que tengo para mí medicamento, por favor no me lo quite- guarde lo que me había dado y le arrebate ese pequeño monto para contarlo, una vez que termine lo guarde en el pantalón separado de lo demás
-No me interesa- le di la espalda para retirarme de ese pobre diablo. Con la pañoleta y el casco ya puestos estaba lista para arrancar a gran velocidad, ahora debía recordar el lugar donde había visto ese bar, algo que no seria difícil de hacer. Mientras recorría las calles y esquivaba los carros miraba todos los puestos uno a uno y con ello a la gente y monstruos pasar sonriendo y carcajeando, otros más peleando, seguro que alguna estúpida riña sin sentido. Al final pude divisar ese gran e iluminado letrero.
-Bar "El Grillby's"- se me hace familiar ahora que le pongo más atención
"Hey niña, te invito a Grillbys, tenemos que hablar"
Sacudí mi cabeza, gruñendo por lo bajo por todos esos recuerdos, hasta que un delicioso olor llego a mi olfato y el estomago empezó a gruñir de nuevo. Resignada apague el motor bajando de la moto para colocar una cadena y al quitarme el casco, decidí entrar tras tomar aire en el instante que empujo la puerta. Un leve campaneo dio aviso de mi presencia por lo que algunos presentes fijaron su vista hacia mí, podía ver tanto adultos humanos, como monstruos, camine con precaución hacia la barra para tomar asiento en la última banca de la esquina más alejada de la gente, deje a un lado el casco y me dedique a mirar el lugar
-Buenas noches, disculpe mi atrevimiento pero no creo que este sea un lugar para una joven y menos a estas horas de la noche- un hombre alto completamente de fuego radiando una gran luz, con ese calor tan hogareño y cómodo, se dirigió hacia mí de la forma más apacible y amable, tanto que fue extraño.
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Un alma rota [AU's de Undertale X Reader]
FanfictionExtrañas muertes tanto de humanos como monstruos inician la inquietud de todos los ciudadanos y la llegada de una chica que busca esconderse de su padre y quiénes jamás perdonarán lo que ha hecho. Con todo a su favor ella busca divertirse sin una p...