Un alma rota [AU's de Undertale X Reader]

Capítulo 51

Hola
***

Abrí mis ojos para darme cuenta que mi visión estaba borrosa, me fui levantando sintiendo mi cuerpo muy débil y tembloroso.

Pero ahora lo único que me importaba era ver a Frisk, sentí en mi espalda un gran peso al momento de quererme levantar, notando que se trataba de un librero lleno de polvo. Me arrastre para salir, pero un ruido me exaltó, así que trate de levantarme.

—Frisk...— tenía que ver qué estuviera bien. Sin embargo lo que ví fue a Nightmare ahorcando la. De inmediato levanté mi mano, y del suelo un grupo de huesos emergió cortando sus tentáculos y al mismo tiempo encerraron el cuerpo de Frisk para protegerla.

—No seas tonta, no puedes hacerme frente en esas condiciones— pero invoque un Gaster Blasters y lo rodeo con un grupo de huesos.

—No tengo que hacer mucho esfuerzo— le sonreí al invocar un hueso más que da directo a su alma. Si se movía, este lo apuñalaria solo por centímetros.

—Puede que haya matado una parte de mi, pero no dejo de ser yo misma— Nightmare se vio acorralado podía matarlo, sin embargo apareció un portal en sus pies y este desapareció.

Por ahora no me importaba, después me preocuparía por él. Por el momento me acerque a Frisk y coloqué mi oído en su pecho, pero no escuchaba sus latidos

—Frisk— la movi un poco al tenerla entre mis brazos, pero no me respondía

—Por favor, no me hagas esto— no sabía que hacer.

—Frisk despierta— al parecer había llegado tarde.

Mis ojos se humedecieron, y lo único que hice fue abrazarla. Ahora, ¿Qué le diría a Papyrus?, ¿Cómo le explicaría que no logré salvarla?.

La recosté con cuidado en el suelo y me levanté, para mirarla por última vez.

—Ya no tengo nada que hacer en este Universo— Pensaba en solo desaparecer, irme a un universo o un vacío donde nadie exista, ni pueda encontrarme o simplemente buscar dónde acabar con mi vida.

Saque el teléfono, mientras le daba la espalda y caminaba a la salida, pensé en llamar al esqueleto, ya que no podía dejarla aquí, al menos debían darle una sepultura digna de una heroína, donde todos sus seres queridos puedan darle un último adiós.

Aún así era muy difícil hacerlo. Cerré mis ojos tratando de calmarme. Pero sentí algo extraño, algo había cambiado en el ambiente

—¿_____?— de inmediato me gire para verla sentada, mirándome con sorpresa, yo solo no pude creerlo, y me quedé de pie petrificada.

—¿Pero como?— guarde el celular y me hacer que a ella y sentí un brillo en su interior

—Un hombre me ayudo— ¿Un hombre?. Sonreí, para empezar a reírme por lo increíble que era que alguien al parecer, nos está ayudando.

— ¡_______!, ¡Tú ojo!— ella me señaló asustada y confundida toque esa parte de mi rostro y exactamente mi ojo de vidrio no estaba

—¿Que te paso?, ¡Hay que llevarte con un doctor!— y me di cuenta que me encuentro muy mal herida, ella se levantó, pero empezó a tambalearse y al momento de caer la sostuve

—Estoy bien, al contrario de ti— ella estiró su mano y tocó las heridas de mi rostro con mucha delicadeza.

—¿Te duele?— tome su mano y la quite al cerrar mis ojos un momento y negué.

—No— esos ojos tristes, me hipnotizaron, y la marca en su cuello me hizo sentir dolor en mi ser.

—¿Porque lo hiciste?— por fin lo dije, pero ella miró a otro lado,encogió sus brazos pegando los a su pecho, con una mano tocó su brazo y la presionó con fuerza.