Capitulo 56

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Después de la tormenta
***

—¡______!, ¿Donde estas?— abrí mi ojo, me había quedado dormida, al ver, la mitad de mi cuerpo estaba fuera del mueble y mis piernas estaban dobladas dentro.

Moví con cuidado y lentamente una de mis piernas para estirarla y después la otra.

—¡______!— volví a escuchar.

—¿Frisk?— escuche como movían las cosas.

—¿Estás bien?— en ese instante mire por sobre mi cabeza una tierna expresión de preocupación.

—Si, no te preocupes— me moví para irme levantando pero, aún no tenía fuerzas así que caí al suelo. Ella corrió hacia mi, pero al verla, también estaba con vendas. Me sentí frustrada y mi sangre empezó a hervir, cerré los ojos.

—¿Está bien la humana ______?— aquella voz la reconocí de inmediato evitando que hablara.

—Al parecer si— intente sentarme mirando el piso, estaba preocupada por Frisk, aún se seguía lastimando.

—Estoy bien huesitos— le sonreí en cuanto le miré. Me sentía aliviada de ver a ambos, no había palabras que pudieran describir mi alegría.

—Esperen— reaccione un poco, al recargarme en el estante volteado.

—¿Pueden decirme cómo llegué aquí?— todo era muy borroso, quizás sea por el golpe la sacudida dentro de ese estante.

—Papyrus paso el día bajo la lluvia buscándote— ella volteo a ver al esqueleto, quién aún parecía preocupado.

—Apenas te encontró en el callejón, te escondió para pedirle ayuda a Alphys a escondidas de todos— aquellas palabras sentía que hacía palpitar mi alma.

—También la humana Frisk ayudó distrajo a los demas— Papyrus se hacerco para hincarse a mi lado me envolvió entre sus brazos y me levanto del suelo. Ví a Frisk acomodar una de las camas y el esqueleto me puso en ella. Desde ahí podía ver cómo había quedado el laboratorio.

Frisk empezó a ver entre las cajas desechas y tiradas, buscando entre las cosas que están en el suelo.

—Veo que ya están a...aqui— los tres volteamos y vimos a la maestra Alphys entrar, pero se quedó quieta al ver todo el desorden.

—Oh, que mal, esto se ve muy mal— pero en vez de ver su laboratorio fue directo a mi.

—¿Estás bien ______?— empezó a revisarme, tocando con cuidado distintas zonas de mi cuerpo, en busca de una reacción mía, al mirarme tan detenidamente llegando a mi brazo roto.

—¿No te duele nada?— solo negué con la cabeza.

—Pero tus fracturas están peores que antes— Alphys parecía curiosa, sin embargo corrió a buscar entre los cajones que están en el suelo algunas cosas, parecen gasas.

—Frisk, ¿po...podrías traerme algo de, de agua?— ella asintió y salió de la habitación.

—Papyrus, busca la máquina de ayer por favor— este asintió y empezó a recoger todo para encontrar aquel aparato.

—Ellos ya saben que la escondemos aquí— ella lo dijo al aire, pero siento que también fue para mi.

—Lo se— mire la tinta regada en el laboratorio, Alphys levantó su vista y suspiro preocupada.

—Aqui está el agua— Frisk apenas llegó parecía iluminar el lugar con su sonrisa.

Alphys ya tenía pedazos de gasas en sus manos y ya había cortado el yeso que tenía en mi mano

Acomodo mi brazo de nuevo y lo estiro al poner una mueca esperando que gritara o me doliera, pero solo la miraba hacer todo.

—¿No te dolió?— Frisk me miro, la misma cara de preocupación, los tres me miraban así y era extraño. En realidad me sentía extraña. Era desagradable que me vean con tanta lástima.

Negué con la cabeza y decidí mirar a la pared. No sentía nada.

—Ayudaré a Papyrus con la limpieza— Alphys asintió y fue a buscar más cosas, para cambiar los vendajes de mi cuerpo.

Mire a esa reptil todo el tiempo, ella sabía quién era, sabe lo que he echo. Sin embargo, está aquí, está curando mis heridas. No sé si es tonta o simplemente es por Frisk y Papyrus, pero tal vez solo quiere analizar mi cuerpo, o experimentar conmigo.

Quizás no deba de quitarle la vista de encima, tal vez espera el momento de entregarme.

"Tal vez solo quiere ayudarte hermanita mía"

No lo sé, no me trago su acción del buen samaritano y menos después de atormentarla en el salon.

—¡Lo encontré!— Papyrus hacerco un aparato el mismo del cual me tenían conectada, esa cosa tiene una pantalla y algunos botones.

—Gracias chicos— Alphys estaba aliviada, pero su sonrisa se torció, al parecer había un problema.

—Hay no. Tenía que pasar— Alphys lo encendió para ver qué apenas daba señal de que aún servía. Aún así no parecía rendirse. Miró alrededor suyo y después a mi con una mueca. Se alejó de nosotros hasta perderse en la otra habitación.

—Aqui esta— regreso con una caja de herramientas y una bolsa con un líquido transparente.

—Frisk, Papyrus, ¿Podrían limpiar la tinta?— ambos asintieron, al parecer sabían la razón del porque lo hacían.

Mientras la reptil hacerco un perchero de metal y colocó la bolsa de cabeza, ví como conecto algunos canales y al final una aguja.

Ella se hacerco a mi con esa cosa en su mano y me levanté para intentar alejarme.

—No te haré daño— extendió su mano a mi

—Esto te ayudara con tus heridas— podría ser otro engaño, por diferentes que sean siguen siendo la misma Alphys.

"Ella no creo"

Me preocupa que intente algo, no puedo estar segura

"Escucha y confía, no debes de preocuparte"

"Solo confía"

Mire a Frisk, ella había desviado sus ojos a los míos y ella sonrió, eso me tranquilizo y sentí un calor en mi pecho. No pude mantener su mirada y tuve que desviarla. Agaché la mirada con nervios y estire mi brazo.

Cuando me di cuenta esa sustancia ya estaba entrando en mi sistema. Me resigne para recostarme. De nuevo estaba conectada a esos aparatos, como si recién hubiera despertado.

La diferencia era que ahora no estaba sola, y el ver a Frisk y a Papyrus era confortable y tranquilizador. Cerré mis ojos, solo por un momento bajo una profunda respiración y me quedé atrapada entre los brazos de Morfeo

Un alma rota [AU's de Undertale X Reader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora