C a p i t u l o #4

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__ Volveré luego— me dije para mí misma tratando de convencerme.

Había cosas que debía mantener para mí misma y está era una de ellas porque no deseaba hablar de esto con Brigett , no ahora.

No era como si a los árboles les fueran a salir patas y se irían corriendo.

¿Verdad?

Ya ni sabía que creer.

Decidí volver al campamento, en el camino encontré a una Brigett preocupada caminando de un lado a otro.

__ ¿Donde rayos estabas? —-pregunto alarmada tomando por los hombros y zarandeándome.

__Oh pues yo estaba...Esté... haciendo ya sabes ehh — ahora parezco retrasada, me aclare la garganta—Estaba confundida y necesitaba pensar así que vine a caminar un rato por aquí, es un lugar muy tranquilo ¿que pasó anoche?

__Oh pues de pronto el azul de tus ojos se volvió tan intenso al punto que parecía brillar y luego te desmayaste— hizo un ademán restándole importancia.

__Entréname__ dije de repente, ni siquiera lo había pensado bien, las palabras solo habían salido así como así que hasta yo me sorprendí, ella me miro como si me hubiera salido un tercer ojo en la cara, suspiré.

__ ¿De qué hablas? __inquirió.

__Quiero que me enseñes a ser un vampiro __explique ella chillo con emoción y me abrazo.

__ ¡Gracias, gracias, gracias!__ me zarandeo de un lado a otro, me aparte de su agarre.

__No tienes que agradecer, sólo quiero reencontrarme con mi familia.

De vuelta a casa decidí darme una ducha, me puse unos pantalones cortos, una blusa blanca holgada y mis conversé blancas, me había maquillado un poco y recogí mi cabello castaño en una cola alta

Con Brigett quedamos en ir a entrenar al bosque ya que no era un lugar recorrido por las personas y nadie podría vernos, estaba terminando de amarrar mi zapato y alguien entro a mi cuarto.

Levanté mi mirada encontrándome con mi amiga.

__Hola__ salude terminando de amarrar mi zapato y poniéndome de pie.

__Hola__ respondió mirando a su alrededor __ ¿Y los Harries?

__No están__ respondí encogiéndome de hombros, papá seguramente se encontraba en una junta y mamá con el ya que era su secretaria.

__Ok, entonces vamos — ordeno dirigiéndose a la ventana.

¿Que está chica no sabe lo que es una puerta?

__ ¿Que haces?__ dije viendo cómo se subía al marco de esta.

Mi casa consistía de dos pisos, por lo que mi habitación se encontraba en el segundo, mi ventana no era tan alta pero tampoco significa que podías saltar de ella y salir ileso.

__El bosque es lejos — señaló lo obvio— tu primera lección es saltar desde grandes alturas y aterrizar como una pluma, luego manejaremos tu velocidad, combinando estos dos vas a sentir como que estás volando __ explicó ante mi mirada confundida, asentí lentamente.

Ella se impulsó un poco y salto de la ventana, me asome por esta y la encontré abajo en el jardín sonriendo, había aterrizado de pie.

__ ¡Vamos salta!—me ánimo.

__Ok __respondí y luego de estar debatiéndome un buen rato entre hacerlo o no, salte.

Mi cuerpo se había sentido tan liviano y ligero que aterrizar había sido sumamente fácil por lo que lo había hecho de pie.

Ella me sonrió y felicito.

__Impúlsate y confía en ti __dijo desapareciendo de mi vista, había empezado a salte por los tejados de las casas, era verdad parecía que estaba volando.

__Ok Elizabeth confía en ti —me alenté, luego de observar que no había nadie en la calle o alguien mirándome, tome una gran bocanada de aire y me impulse para después correr y saltar a uno de los tejados, sonreí al sentir el viento golpeando en mi cara, podía acostumbrarme a esto.

Brigett estaba equivocada, el bosque no quedaba tan lejos de casa por lo que no fue difícil llegar, ahí ella ya se encontraba esperándome.

__Bien solo has lo qué yo __ ordeno tomando impulso y saltando a la copa de un árbol.

__ok, tu puedes—me dije a mi misma.

Esto de alentarme a mi misma se iba a volver costumbre.

Tomé impulso y salte.

__Perfecto, mira lo que vamos a hacer es a saltar en la copa de los arboles haciendo el menor ruido posible, debes llegar al otro lado del bosque—dijo yo solo asentí con la cabeza y ella salió volando.

Bueno no volando, ella saltaba de un árbol a otro por lo rápido que lo hacía parecía que estaba volando.

Después de diez minutos oí un ¡Ya! así que salí volando— como Brigett lo había llamado aunque la verdad se sentía como tal— estaba disfrutando mucho estos entrenamientos la verdad, rápidamente llegué a su lado.

__Wow__ fue lo único que dijo, parecía sorprendida.

__ ¿Lo hice mal?— Pregunte preocupada.

__No, sólo que, demoraste dos minutos, eres rápida — me sonrió como una madre orgullosa, reí por su reacción.

...

Había pasado un mes desde que habíamos empezado los entrenamientos, iba muy bien en ellos, ya había aprendido todo lo básico, hasta cazar.

Al principio me dio asco pero después ya me acostumbré, Bell me dijo que sólo falta descubrir cual es mi poder.

__ ¿Y cuál es el tuyo?__ pregunte interesada.

_Puedo mover objetos con la mente como lo hice aquella vez con la taza cuando te conté todo — asentí recordándolo__ y puedo leer la mente de una persona si me concentro aunque todavía no puedo manejarlo muy bien, me hubiera gustado tener el poder del escudo pero estoy bien con mi poder.

__ ¿Escudo?

__Si funciona así, un escudo mental que protege las mentes de los que están dentro para que nadie de los que están afuera de ese escudo puedan leerlas, como un protector, pero de tu mente— explicó, sonaba interesante.

__ ¿Y cómo vamos a saber cuál es mi poder?

__Eso todavía no lo sé —miro su teléfono y frunció el ceño, la mire curiosa — tengo que irme __dijo levantándose de la cama y buscando sus cosas, iba a preguntar porque pero no me dio tiempo__ Adiós.

__Adiós__ me despedí confundida y luego reí.

Algo oculta.

La Hija de Drácula Donde viven las historias. Descúbrelo ahora