-Repíteme que estamos haciendo aquí –gruñó Siwon mientras buscaba una espacio libre en el estacionamiento del centro comercial, detestaba aparcar ahí, nunca encontraba un lugar vacío-
-Necesito comprar nueva ropa deportiva –le indicó Emily por quinta vez desde el asiento del copiloto-
-No entiendo por qué no pudiste venir con Sofía ¿No se supone que te estas quedando en su casa por estos días? –La miró de reojo con cierto recelo, esa niña le había mentido muchas veces para encubrir sus trastocadas travesuras-
-Claro que si –admitió inmediatamente- es solo que ella se fue a ver a su papá y yo aprovecho este tiempo para hacer compras ¿No te gustaría venir? –tentándolo, sabía que Siwon jamás aceptaba ir de compras con ella y aquello le ayudo a despistarlo-
-Claro que no –fastidiado- ve a comprar sola, cuando salgas puedes llamarme por si quieres que pase por ti –ella asintió procesando las ordenes muy rápido- y que no se te ocurra volver sola en un taxi, eso es muy peligroso.
-Está bien papá, no voy a volver en un taxi mientras este sola –irónica, Siwon rodó los ojos al mismo tiempo en el que ella abandonaba el auto-
-Y no compres todo el centro comercial –ella rio y cerró la puerta-
-Trataré, cuídate... te llamo al rato –su primo sonrío de lado antes de volver a poner en marcha el auto-
-Buena suerte loca.
-Sofía te ama mucho –gritó desde su lugar logrando avergonzarlo, él detestaba cuando se comportaba así- ¡Besos y abrazos! –Su primo abandonó el lugar con rapidez antes de que todos los presentes empezaran a mirarlos asombrados-
Camino alrededor de las tiendas por un buen rato, pensando y analizando bien lo que haría en las próximas horas; se colocó frente a la tienda Adidas casi a la hora punta pactada, y no logró divisar a Donghae por ningún lado, se dijo a si misma que tal vez debía tomar otras medidas con él, unas más extremas. Bufó rendida, tal vez Donghae no era de los que caían en chantajes tan fácil, era un aburrido; el semblante completo le mejoró en cuanto lo vio llegar buscándola con la mirada, se preguntó si Donghae tal vez era el amor de su vida, puesto que, apenas había pasado poco tiempo y ella ya lo sentía así.
-Adivina quién soy –susurró sobre su oído aproximándose a él de espaldas y cubriéndole los ojos, Donghae, como siempre, reaccionó mal humorado-
-Emily, no me gustan estas payasadas –ella río suave y dejo que sus manos cayeran fuera de sus ojos, su piel rozó en un punto con el cuello de Donghae, causando una leve corriente eléctrica de placer en aquella zona. Se serenó en cuanto pudo, sin darle muestras de los estragos que causaba en su interior-
-Que aguafiestas eres –se quejó divertida- que bueno que viniste, no quería pasar sola la tarde entera –le palmeó suave el hombro con suma confianza y se colocó en frente – iremos a ver todas las tiendas, luego podemos caminar e ir a almorzar.
-¿No se supone que estabas molesta por que ayer te deje en el estacionamiento? –recordándole la noche anterior, Emily calló, luego volvió en sí, olvidándolo todo-
-Te he perdonado ya, es que... tienes una carita tan tierna –pellizcó una de sus mejillas, dándole un gesto de ternura- ¿Quién no podría perdonarte después de eso? Además, viniste hoy...
-Por qué me amenazaste –aparatando la mano que había puesto en su rostro-
-Anda, vamos a comprar cosas, necesito nuevos vestidos...

ESTÁS LEYENDO
La Mocosa
Fiksi PenggemarEmily es un alma L I B R E, Donghae esta A T A D O a su amor por el dinero. Emily tiene 17 y Donghae 27. No hay problema, ella cumplirá 18 el año que viene y ya no será una mocosa. Escrito por: HaeKat* ~ Romance ~ Comedia