Capítulo 16 : Traición

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<Anastasia>

Pasaron 5 días desde que salí lo de Elena, no he parado de llorar y lamentarme haber confiado tan fácil en Christian, me ha llamado para darme explicaciones pero le dije que no quería saber mas nada con el y le pedí que no me llamara ni me buscara mas .. hace bien, si insiste será para peor, Andy no se separa de mi por miedo a que escape o cometa una locura. El sabe que soy capaz de todo cuando se me cruza algo por la cabeza pero no, esta vez no .. he decidido dejar ir a Christian, es lo mejor .. el no es para mi como tampoco yo soy para el.

Fue un error desde el principio, como también fue el haberle confiado mis secretos. Me veo al espejo y estoy tan demacrada, con las ojeras por el piso de no dormir, trasnochaba en los brazos de Andy y despertaba en los suyos.

Andy por suerte es el soporte que no tengo en esta vida, es esta maldita vida que tengo que vivir. El me alimenta, me obliga a bañarme, distraerme de todo pero es imposible. Me duele tanto la traición de Christian, de solo pensar que se reía de mi mientras tenía un contrato con Leila y se la pasaba diciendo que me daría el mundo cuando ya lo ha hecho anteriormente con otras sumisas.

Hoy Elena me dijo que tenía un cliente, es viernes y tengo que ir a una fiesta privada en las afuera de la ciudad, otro cliente fijo.

Jay cooper, casado sin hijos, tiene 46 años recién cumplidos y parece que la fiesta que da es para sus amigos con las putas que tiene de acompañante como yo. Pidió corto y exuberante, lo que a mi me gusta poco, una mujer no necesita mostrar todo para verse linda, una mujer es bella por su encanto y simpatía, no todo es carnal en esta vida.

Ahora entiendo por qué no tiene hijos, se la pasa de fiesta en fiesta con putas al rededor que ni su esposa lo mira, por lo que escuche tiene su amante aparte con lo que no dudo porque con un marido así preferiría morirme a no tener nada.

Elijo un top negro y una minifalda corta a juego, sandalias de tiras al rededor de mi tobillo y perfume empalagoso como el lo pide siempre, make up fuerte y nada de alhajas. Dice que le lastiman la piel y le traen alergia, algo que nunca vi.

Cuando lo conocí me pego una cachetada de solo traer unos pequeños aros de plata, me puse a llorar sin entender el por qué de su reacción, me mando de vuelta a casa y me pago la mitad por no haber preguntado si le molestaba algo.

Es uno de los tantos que me maltrataron por eso no tengo mucha confianza ni tampoco le tengo respeto, solo me hago la falsa como siempre.

Andy me espera como siempre al lado del auto, lo veo por el ventanal de mi piso esperando impaciente y ojeando su reloj, piensa que me largue a llorar de nuevo y no iré.

No se que me pasa pero he madurado en los pocos días que paso, no quiero hacer mas rabietas de nena consentida ni quiero llorar mas, estoy harta.

Tomo mi pequeño bolso y salgo para la entrada, casi choco con Andy en la puerta principal, me ve de arriba abajo y abre la boca de no poder creer como voy vestida, y si .. no me maquillo tanto ni me visto tan corta de ropa para salir con clientes.

-Ana .. es demasiado - ruedo los ojos.

-Nada es demasiado para Cooper, el siempre pide mas así que me verá como quiere - siempre se queja que tengo demasiada ropa encima.

Caminamos a pasos del auto y unos hombres que pasan me chiflan y lo felicitan a Andy pensando que es mi cita, río relajada solo ese momento.

Andy pone en marcha el auto y yo solo me relajo por los nervios de volver a verlo después de tanto tiempo, siempre que lo veo pasa algo diferente.

-Llegamos Ana , estas segura que no quieres que me quede ? - niego, Cooper pidió pasar la noche entera conmigo, pago el triple así que cumpliré con mi deber.

Submission &  DominationDonde viven las historias. Descúbrelo ahora