BACK TO BEN

BACK TO BEN (9/?)

Abre la puerta y lanza las llaves sobre la cómoda del recibidor desganada. No solo el trabajo le resulta monótono. Las cosas no van como tenía en mente, aunque ni siquiera sabe lo que tenía pensado en realidad. Solo ha visto una vez al niño desde que estuvo en el parque y fue en compañía de Rachel. Es simpática y agradece lo que hacer por ellos pero no puede evitar sentir celos de ella. Está claro que Tony la evita a toda costa y a pesar de comprender el motivo no puede evitar que le parta el corazón.

Saca el móvil de su bolso cuando este empieza a sonar sin descanso. En el identificador de llamada ve que es Tony. Lo último que le faltaba hoy era discutir por algo con él.

- ¿Estás en casa?- pregunta éste cuando coge la llamada.

- Acabo de llegar hace un momento, ¿por qué?- quiere saber intrigada.

- Verás, tenemos una pizza demasiado grande para nosotros y Ben ha pensado que quizás querrías algo de compañía masculina.

- Por supuesto. Venid cuando queráis.

No ha terminado de decir la frase cuando escucha el timbre de la puerta sonar. En cuanto abre no puede evitar que se le escape una sonrisa al verles a los dos plantados en la puerta con un par de pizzas en la mano.

Ben se lanza a darle un abrazo y después entrar en el apartamento. Por fortuna le dio tiempo a desembalar y recoger todo durante el fin de semana anterior. Dejan sentado al niño en el salón viendo una película en la televisión mientras ellos van a la cocina a por cubiertos y vasos.

- Gracias por traerle- dice ella cuando están a solas en la cocina- ¿Dónde está Rachel?

- Se ha tenido que marchar a Philadelphia a echar una mano a su hermana, acaba de tener un bebé.

- ¿Tienes un sobrino?- le pregunta con una sonrisa.

- Supongo que sí.

No sigue preguntando pero siente curiosidad por saber que ocurre en su cabeza. Desde que ha vuelto ha notado que solamente considera a Rachel algo suyo, como si no quisiera que nadie más se acercara. En ningún momento ha escuchado decir a Ben que sea su madre ni nada por el estilo. Y está claro que la idea de que el sobrino de la chica pueda ser suyo también no se le ha pasado por la cabeza.

Salen al salón y se encuentran al niño devorando un trozo de pizza. Este en cuando les ve la deja en la caja y pone cara de vergüenza.

- Tenía hambre- explica.

Tony se sienta en el sillón mientras ella se va junto al niño en el sofá, coge un trozo de pizza y mira al niño que le observa sonriente.

- ¿Tú eres poli como mi papá?- inquiere el niño muy atento.

- Algo parecido.

Contento con la respuesta continua dándole bocados a su porción de pizza hasta que vuelve a girarse hacia ella.

- ¿Conoces a mi mamá?

Mira a Tony en busca de permiso sin saber que contestar. Al final este le asiente levemente con la cabeza y se encoge de hombros.

- Sí- responde finalmente.

La alegría que desprende el crío tras la respuesta afirmativa es contagiosa. Por un momento parece que se ha quedado mudo de la impresión.

- ¿De verdad? ¿Y cómo es? Mi papá dice que es muy guapa y que me quiere mucho.

- Ella te quiere mucho, más que a nada en este mundo.

Le cuesta hablar de ella misma en tercera persona, sobre todo viendo el deseo de su hijo por saber más. Pero cumplirá lo que prometió.

- Y tengo una cosa de ella para ti.