BACK TO BEN

BACK TO BEN (17/?)

Deja el confortable sofá para abrir la puerta deseando que quien sea se vaya pronto. No sé siente muy bien desde hace unos días y lo último que le apetece es recibir visitas.

Benjamin salta a sus brazos en cuando abre la puerta y a pesar del malestar sonríe encantada con la visita. Ver al pequeño siempre le hace sentir feliz.

- Hola, cariño. ¿Ya estás bueno?

- Sí- responde él asintiendo con la cabeza- Papá y Rachel me han curado.

Se siente culpable al escuchar el nombre de la chica. Es consciente de que gracias a ella Tony se fue ablandando y pudo tener a Benjamin. Y su forma de agradecérselo es acostándose con su prometido. Ojalá pudiera dar marcha atrás.

Les deja entrar en casa y lleva al pequeño a la cocina para prepararle algo de merendar. En el tiempo que ha podido ir conociendolo se ha dado cuenta de lo comilón que es, le encanta todo y siempre tiene una palabra de agradecimiento después de una buena comida. El trabajo que ha hecho Tony con él no deja de sorprenderla ni un solo día.

- ¿Qué os trae por aquí?

- Un pajarito me ha dicho que estabas mala- explica Tony.

- Los pájaros no hablan, Tony- rebate con extrañeza.

- Pasen los años que pasen nunca cambiarás- responde él con una sonrisa.

Termina de servir un vaso de leche para Benjamin y se lo entrega para que vaya a ver un rato la televisión al salón. No entiende muy bien porque le entusiasma tanto un trozo de esponja viviendo dentro de una piña pero parecer hacerle feliz.

Al verse a solas con Tony siente mil cosas a la vez. Quiere hablar con él, tiene que hacerlo después de todo lo que ocurrió pero en su interior sabe que la respuesta que va a recibir quizás no sea la que desea.

- No será nada grave, ¿verdad? No tienes buena cara.

- Estoy algo mareada y cansada, nada más. He cogido unos días libres, se me pasará pronto.

No parece quedarse muy tranquilo con la respuesta y de forma mecánica le pasa una mano por el pelo para calmarle. La reacción de Tony la deja parada cuando se aparta de forma brusca de su lado.

- Tenemos que hablar.

- Ahora no, Ziva.

- No por evitar el tema va a dejar de existir-le recuerda.

- Fue un error. No es importante.

- ¿Acostarte con otra mujer no es importante? Dudo mucho que Rachel opine lo mismo.

Se arrepiente de la dureza con que le ha dicho eso. Tony parece realmente angustiado por la situación, si no le conociera bien juraría que está a punto de echarse a llorar.

- ¿Se lo has contado?

- No puedo- contesta negando con la cabeza- No puedo perderla a ella también.

- Si de verdad la quieres deberías contárselo, Tony. No puedes ocultar la verdad toda la vida.

- Quiere que tengamos un hijo, contándoselo la destrozaría.

- ¿Y qué va a pasar entonces?

- No lo sé. Necesito un poco de tiempo pero una cosa tengo clara. Esto no puede volver a suceder. Hasta que apareciste de nuevo yo tenía una vida normal, quería casarme, iba a tener otro bebé con Rachel y entonces todo se jodió.

Deja de escucharle cuando una bombillita se ilumina en el interior de su cabeza. Ha tenido las señales todo el tiempo delante suyo y ahora todas las piezas empiezan a encajar sin ninguna duda.