BACK TO BEN (3/?)

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La noche le ha servido para tomar perspectiva, necesitaba algo de tiempo para asumirlo. No puede decir que haya dormido mucho, casi todo el tiempo lo ha pasado con los ojos abiertos, mirando el techo blanquecino mientras su cabeza le mandaba mensajes incoherentes, uno detrás de otro.Tras vestirse ha ido directamente al NCIS. Quiere llegar pronto para poder hablar con Tony a solas.

No es su intención que la comprenda, que entienda por qué lo hizo, simplemente necesita hacerlo.

Entra en la sala cargando dos cafés calientes en la mano y se encamina hacia la mesa de Gibbs, ahora de Tony. Le sorprende comprobar que pese a lo temprano que es ya esté allí.

- ¿Qué quieres?- pregunta Tony con brusquedad al verla.

- Quiero hablar un momento contigo en privado.

Tras una larga pausa en la que teme que le intente echar a patadas termina por levantarse de su escritorio e ir rumbo del ascensor.

Después de que ambos hayan entrado le da al botoncito de parada.

Hay cosas que nunca cambian.

- Te traigo un café- le dice ofreciéndole uno de los vasos

- Con leche y cargado de azúcar.

Recuerda la primera vez que le ofreció un café, en la entrada de aquel hotel. Si hubiese sabido que le iba a causar tanto dolor se habría alejado de él antes.

- Con canela- comenta Tony oliendo el vapor que desprende el café.

La canela fue su pequeño juego durante mucho tiempo, desde que un día empezó a echarle canela a todo. Pasó una semana entera poniéndoselo al café, al pollo, a la sopa, a la pizza… Hasta que descubrieron que no estaba loca, simplemente respondía al extraño antojo de una embaraza de seis semanas.

- Tú dirás- dice él haciéndola volver a la realidad.

- ¿Cómo está Benjamin?

- No es asunto tuyo- responde Tony a la defensiva.

- Soy su madre.

- No lo eres. Solo eres la mujer que le trajo al mundo y decidió a los pocos meses que eso de querer no iba con ella. ¿Y sabes una cosa? Estamos mucho mejor sin ti.

Se muerde el labio intentando reprimir las lágrimas que luchan por salir. Sabía que iba a ser difícil hablar con él, pero la rabia con que le ha dicho eso le ha demostrado que no solo todavía le duele. Hay algo más. Ya no es su ninja. La odia.

- No nos querías, lo dejaste bien claro en la carta. No hay más que hablar a menos que me vayas a decir que era mentira.

En sus ojos ve que quiere solo una respuesta, quiere que le diga que era mentira. Y es cierto. Les quería con locura, lo sigue haciendo. Pero la verdad será mucho peor.

- Quiero verle.

- Ni se te ocurra acercarte a él. Protejo a mi hijo contra personas crueles, eso te incluye a ti.

- Tony….

- Si no te importa vamos a trabajar para atrapar a ese capullo y que te largues cuando antes de aquí.

Sin dejarla oportunidad de responder activa el ascensor y se marcha hacia el escritorio.

                ***

Necesitaba tomarse un respiro después de pasar toda la mañana encerrado con Ziva buscando pistas sobre ese tipo. Y el estómago le ha empezado a rugir de hambre.En la salita de descanso va hasta la máquina de comida y saca una de las chocolatinas sin muchas ganas de comersela.

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