Amor del bueno.

7.3K 572 144
                                    

Estoy recostada al lado de Kuroo, él está durmiendo profundamente, su respiración es suave pero a veces se torna muy fuerte, miro la forma de su mandíbula, sus clavículas, la forma en la que sus cejas se fruncen de vez en cuando, miro sus manos grandes, su pecho en que he estado recostada tantas veces, el aroma de su cabello recién lavado y como siempre queda parado cuando se levanta. Miro el anillo que me dio puesto en mi dedo, cada mañana lo miro y mi sonrisa aparece inconscientemente, éste anillo significa todo, la unión que tenemos es única porque a pesar de que en este momento lo amo más que a nada en un principio de verdad pensé que nunca querría a alguien como a Sensei pero llego este chico y sedujo todo mi ser, cada parte de mi cuerpo es solo suya para siempre.

-Mhh..-Kuroo está despertando. -ah.. ¿ya es de mañana?
-Si, pero es bastante temprano aún.
-¿Porqué.. te despiertas tan temprano?
-No lo sé, me pasa desde pequeña.
-Eres una abuela. -dice mientras me abraza.
-Deja.. de decir eso.
-Es broma...
-Me estás apretando mucho.

Kuroo hunde su rostro en mi cuello y sus manos bajan por mi espalda, acaricia el final de mi espalda y da pequeños besos cerca de mi oreja.

-N-no..
-Sólo un poco. -susurra a mi oído.
-Hoy.. es un día importante..
-¿No crees que empezarlo de ésta manera es lo mejor?
-Pero... llegarás tarde..
-Ah.. bien, tienes razón..

Tomo sus hombros y pasó una de mis manos por su nuca.

-Después te recompensaré.
-Ah.. por eso te amo.

Besa mi frente y sale de la cama, yo hago lo mismo y me visto, hoy Kuroo se gradúa, pienso en que éste año a pasado demasiado rápido, ha sido todo tan angustioso pero a la vez muy hermoso y fuerte.

-Bien.. entonces te veo en la escuela. -digo acercandome a Kuroo.
-Si, no llegues tarde.
-Eso debería decirlo yo.

Lo abrazo y le doy un beso, él me deja en la puerta de su casa y yo apurada me voy a la mía.

En el camino me topo con quien menos quiero toparme en cualquier hora del día.

-Hey.. tan temprano y en la calle, niñita. - dice Aikawa poniendo sus manos en sus caderas.
-Podría decir lo mismo de ti.
-Tus caderas están más anchas, debe ser muy bueno estar con Tetsurou ¿no? se nota que es bueno en la cama.
-...
-Vamos.. no pongas ese rostro, no soy estúpida.
-No es lo que yo estoy viendo.
-Y estoy también segura que él hace todo el trabajo.

Me cansé, he llegado más allá del límite, de verdad esta mujer no tiene un filtro por donde pasan sus palabras, quizás yo también debería quitarme el filtro.
Me acerco a ella y paro justo a su lado y me acerco a su oído.

-Di lo que quieras pero tú nunca sabrás lo exquisito que se ve su rostro cuando llega al orgasmo. -susurro.

Sigo mi camino, sin mirar hacía atrás, saco mi respiración porque de verdad no sé como fui capaz de algo así pero no me arrepiento. Cuándo miro hacía atrás ella no está, supongo que por ahora se quedó en paz.

Al llegar a mi casa veo a mi hermano saliendo de ella.

-¿Vas a trabajar? -le digo.
-Si.
-Mucha suerte, ve con cuidado.
-Siempre.

Me da un abrazo y se va, ahora si que parece un hermano mayor.

-¡Llegué!
-...(N) ¿no vienes con Kuroo?
-Ah.. no, él debía prepararse para la ceremonia.
-Cierto.
-¿Porqué?
-Tenia un regalo para él, digo, por su graduación.
-¿De verdad? ¿que es?
-Ven.

Vamos a la cocina y un pequeño pastel con la palabra "felicitaciones" en el centro está recién horneado encima del mesón.

-Mamá.. que lindo.
-¿Si? que alegría.

Caí enamorada. [Kuroo Tetsurou x Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora