ocho

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+ atando cabos +


Jiyong habia pasado toda la mañana de un lado al otro acompañado a su... nuevo amigo Seungri al hospital, como este no tenia cobertura medica todavia, y se habia negado a que Jiyong lo llevara a su costoso medico de cabecera, habian pasado casi 2 horas en el hospital publico de la cuidad... una total perdida de tiempo para Jiyong que odiaba meterse en esos sitios donde nadie los atendia a tiempo el lugar era casi insalubre para el...pero Seungri era tan obstinado que no habia querido que el pague por su medico en un lugar privado...pero que cabeza dura!!!

Después de que lo atendieran y le cambiaran las vendas en sus piernas y brazos, fueron a hacer la declaración de lo que habia pasado la noche de la explosión. Seungri como "testigo presencial del hecho" y Jiyong como "dueño del edificio". Segun la policia no fue mas que un accidente... Seungri no dejaba de decir que el habia visto a dos hombres buscando a un jaguar y que fumaban en las sombras del estacionamiento... Jiyong seguia muy atento a sus palabras. Mas de lo que todos los policias alli presentes lo podrian imaginar, como una locura del estres que el joven rubio habia vivido en aquel momento.

Después de dejar a Seungri en su respectivo departamento, partio a su oficina.

Ya en su despacho junto con Bae...

—¿De qué «jaguar» hablas?

Él se había encogido de hombros y se había mantenido en silencio. No se había atrevido a contarle la idea peregrina que había iba tomando cuerpo a lo largo de aquella maldita noche de anoche. En un primer momento, la había desechado por absurda, pero el insomnio obra maravillas...por asi decirlo....había pasado horas despierto, jugando a reconocer los objetos de la sala, distorsionados por la luz amarillenta que se filtraba desde la calle a través de las cortinas. Y mientras, su mente no había dejado de dar vueltas en torno al mismo tema...

Ahora, en el luminoso despacho de Bae, la idea no solo no había desaparecido, sino que había terminado por salir a la luz.

Jiyong golpeó la pared con el puño. Apenas sintió dolor.

Su amigo dio un pequeño salto en su cómodo sillón de cuero negro

— Jiyong por qué no me llamaste? Habría venido enseguida.

— Para qué Bae? Estaba en casa de mis padres, me avisaron y llegué antes de que se marcharan los bomberos. Con uno que estuviera aquí ya era bastante, otras veces tienes que ocuparte tú de las cosas...

—Sabes que eso no importa. Estamos juntos en esto. Ya te han dicho cómo surgió el fuego? A veces los coches se incendian...y

—No fue un accidente, Bae...! —lo interrumpió Jiyong cortante.

—Eso te lo han dicho ellos?

—No. Aún tiene que venir el inspector, investigar y comprobar los daños. Pero no hace falta que ellos me lo digan... Estoy seguro. Van a por nosotros Bae... Estos hijos de puta!!!!!! por poco matan a una persona inocente!!!!

—No dejo de pensar en Seungri y en el terror que debió pasar allí encerrado, rodeado por la llamas. Pero no puedo imaginar quién le haría algo así. El acaba de llegar a la ciudad. No me parece una persona que se cree enemigos de tal calibre....o piensas que acaso lo habrá perseguido algún novio paranoico hasta aquí?

—No es el, mierda Bae...!!! Somos nosotros!!! Van a venir por nosotros!!!!

—Nosotros? Pero... pero... ¿por qué?!!

—¡Y yo qué mierda puedo saber Bae no soy mentalista!!! Alguien a quien tú y yo hayamos tocado las pelotas lo bastante fuerte para que nos la tenga jurada.... mierda mierda MIERDA!

Somos Fuego  ° Nyongtory °Donde viven las historias. Descúbrelo ahora