Narra Matteo.
- Matteo.- me llamó Nina despertándome de mi parálisis al ver a Luna irse hablando romántica con Nicolas.
Recordaba cuando ella me decía que se quedaría conmigo una vida entera, cuando ella era la primavera que despertaba a la flor de mis sentimientos. Cuando las olas de Cancún eran de magia y no de agua salada al estar a su lado. Parte de mí no quiere creerle que me ha superado por otro, pero sin embargo, le creo aunque ella no me de nada de confianza. Miro a la luna en el cielo y recuerdo su sonrisa que todo lo iluminaba. Me sentía cegado en sus recuerdos, no quería ver la realidad, me estaba ahogando con sus palabras dedicadas a otro.
- Matteo.- repitió mi amiga.
- ¿Qué?- dije sintiendome desesperanzado por la realidad.
- Sabes que ella estaba fingiendo hablar con Nico ¿no?
- ¿Qué?- repetí incrédulo.
- De verdad, estuve escuchando atentamente y no hablaba con nadie, se respondía sola.- decía Nina. - Siento que ella fingió precisamente para que reacciones, pero en cambio te quedaste paralizado.
- ¿Por qué haría eso?
- ¿No lo ves?- preguntó Nina. - A pesar de todo, aún te ama.- dijo tomando de mi mano mientras lloraba por dentro. Aunque sea mentira, me hacia sentir vivo. No sabía si creerle a mi amiga, pero sentía que estaba recuperando el oxigeno, que por lo menos respiraba un aire falso.
- Mientes tan bien que me sabe a verdad.- declaré.
- No es mentira, Matteo ¿olvidas que no sé mentir?
- Entonces ella miente tan bien...- dije sorprendido.
- Pero no lo suficiente.- me animó mi amiga. - No debes dejarte engañar como ella se dejó engañar por ella misma.- indicó cuando le llegó un mensaje. - Qué extraño.
- ¿Qué?
- Es Ramiro, me mandó un vídeo.- dijo ella dándole play a mi lado. Eran Gastón y Yam disfrutando de unos licuados de chocolate, casi parecían en una cita. Yam sonreía y Gastón le hacia reír.
- Seguramente, está siendo su amigo.- decía mientras ella se quedaba helada.
- Yam se está enamorando de Gastón.
- ¿Cómo crees eso?
- No lo creo, lo sé, he visto esa misma sonrisa en Yam cuando empezaba a darse cuenta de sus sentimientos por Ramiro.
- Nina, no te dejes engañar por tus temores. Debes confiar en Gastón, él te ama.- le dije cuando Yam salía del Roller abrazando a Gastón.
- Gracias por el chocolate.- le decía la rubia besando la mejilla de Gastón.
- Nos vemos, Yam.- se despidió él y la rubia se marchó. - ¿Ustedes no se habían ido?- preguntó al notarnos.
- Nina, me detuvo.- declaré.
Narra Gastón.
- Te invito un chocolate.- quizás podría ayudar siendo su amigo.
- ¿De verdad?- sonrió sorprendida.
- Claro.- asentí haciendo los pedidos y hablando con ella el resto de la tarde.
Estábamos hablando de lo más entretenidos cuando me llegó un video de Luna.
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Cambio De Roles 2|Gastina
FanficSólo diré que es la segunda parte de Cambio De Roles.