Charlie y Lola

Charlie x Lola

*ATENCIÓN ESTA PARTE CONTIENE INCESTO Y TEMAS SEXUALES*

Si no quiere quedar traumado, por favor omita los siguientes 3 capítulos que tengan una x en medio de los nombres de los protagonistas, ya que no tienen importancia en la historia principal.

Por su atención, gracias.

Nota de la autora: Haré un capítulo de cada uno de sus ships favoritos para que queden satisfechos con la historia, sean discretos.

─ ¡Charlie! ─Gritó Lola en cuanto lo vio entrando por la puerta del cuarto, ella estaba saliendo del baño y tenía la toalla cubriendo pocas partes de su piel, Charlie la miró de arriba hacia abajo. ─Fuera...

Charlie se había quedado un tiempo viéndola de hito en hito sin poder creer lo que veía, después respiró hondo y entró al cuarto sin que Lola pusiera resistencia. ─Somos hermanos, no importa. ─Charlie dijo mientras se sentaba en la cama. ─No es como si no te hubiera visto antes así de hermosa.

Lola se sonrojó y se acercó a su lado del armario, abrió las puertas con cuidado de que no se le cayera la toalla a medio amarrar en su pecho, Charlie se estaba cambiando también, pero su mirada a veces volteaba a ver a los muslos carnosos de su hermanita brillantes por las gotas, Lola tomó su ropa interior, pero al tratar de ponerse su bra, la toalla se cayó dejando al descubierto su cuerpo húmedo.

Antes de que pudiera agacharse a recoger su toalla, Charlie la movió y tomó la cintura de Lola, bajó suavemente sus manos hasta sus nalgas y las apretó con fuerza, Lola se asustó un momento y quiso huir, pero él la atrajo hasta su regazo y la tomó con fuerza.

─Tranquila, tranquila. ─Besó su cuello con suavidad, Lola empezaba a sentir extrañas sensaciones debajo de su vientre, y sus piernas sentían el contacto duro del miembro de Charlie, ahora sabía por qué las mujeres se volvían locas por él. ─Puedes confiar en mí.

Charlie la tomó del cuello y empezó a besarla con suavidad, poco a poco se fueron moviendo hasta quedar ambos recargados en la cama. La acercó más a él y los besos empezaron a subir de tono, bajó una de sus manos a la cintura, Lola sentía escalofríos por todo el cuerpo, en especial cuando las manos de Charlie se aventuraban por su cuerpo con lentitud.

─Charlie... ─Balbuceó abrumada. ─Creo que...

Charlie bajó su mano hasta la vagina de Lola, tocando su clítoris, y después acariciando sus húmedos labios. La besaba en el cuello y también lo lamía, excitados por las bocanadas de aire que ambos daban. Empezó a mover los labios por todo su cuerpo, besándola en las clavículas, luego en ambos pechos, bajó hasta el ombligo y terminó en su vagina.

Dio besos alrededor de sus piernas recién depiladas y empezó a besar su entrepierna, Lola se agarró de las sábanas para aguantar todos los sentimientos encontrados que tenía, Charlie estiró sus manos hasta alcanzar los senos de Lola y los apretaba con fuerza porque eran más grandes que sus manos.

Charlie pasó su lengua por los labios interiores y empezó a chupar todo el líquido que Lola derramaba, a veces levantaba su mirada sólo para ver la expresión que su hermana tenía. Una vez que ella estaba empapada, Charlie se desvistió por completo y se montó encima de Lola.

Con su mano, tomó su pesado pene y lo dirigió hasta el hoyo, lo acomodó un poco para que la punta de la cabeza estuviera en posición, y se dedicó a meter y sacar la cabeza despacio. Lola se alzaba del dolor y movía demasiado su cabeza, apretó más las sábanas. ─ ¿Duele? ─Le preguntó cuidando que su hermana estuviera a gusto.

─No mucho. ─Mintió ella cerrando con fuerza los ojos.

─ ¿Segura? ─Preguntó Charlie mientras se acostaba en ella y la metía más profundo, Lola se aferró a su espalda con las manos como si fuera un gato, sus uñas enterradas sólo hacían que el miembro de Charlie creciera más. ─No mientas.

─Duele mucho. ─Gimió, subió las piernas también a la espalda de Charlie.

─Es cuestión de que te acostumbres. ─Contestó dejando de moverse, espero unos segundos y después se la enterró de una buena vez, Lola gritó de dolor, sintió como si algo se le destapara y ahora el pene de Charlie podía resbalar con todo placer.

Las paredes de Lola se contraían con fuerza, y el miembro de Charlie estaba siendo apretado con fuerza, ambos estaban disfrutando ese momento con fervor.

─Para... No, esto está mal. ¡Para! ─Pedía Lola a gritos, resbalaban lágrimas de sus ojos por el dolor que sentía, pero muy en el fondo, quería que ese momento durara toda una maldita eternidad.

─Muy tarde. ─Sentenció Charlie sacando la mayoría de su pene y después enterrándoselo con todas sus fuerzas, Lola gemía muy fuerte o gritaba el nombre de su hermano. Charlie empezó a penetrarla con rapidez el sonido que hacían sus testículos contra la vagina de Lola eran como aplausos fuertes y seguidos con pausas casi imperceptibles.

─Tu mano. ─Rogó Lola alzando la de ella, él la estrechó con amor sin dejar de moverse. Charlie la volteó bruscamente, empezó a morder su trasero y ella se levantaba impulsivamente por el placer, Charlie esperó a que se excitara lo suficiente para tratar de meterle el pene por el ano.

Trató, pero era demasiado pequeño para él, se masturbó un poco y acomodó a Lola de tal manera de que siguiera en la misma posición, con trabajo, volvió a penetrarla como antes y empezó a nalguearla.

Sus manos quedaban grabadas en rojo en cada lado, y se las apretaba por el puro placer de hacer sufrir de pasión a su hermana.

Cegado por sus instintos, Charlie empieza a lamer el ano de Lola, moviendo su lengua por el pequeño espacio que puede soportar su hermana. Charlie empieza a lamer todo llenándolo de baba, sin dejar de apretar o morder el trasero de su hermana. Lola se chorreó y cayó rendida, mojando toda la cama.

Charlie entendió que ella ya había tenido suficiente, pero él aún aguantaba más. Restregó su pene en las pompis de Lola y se masturbó con ellas, pasó mucho tiempo para que derramara todo su semen en la espalda de Lola, con sus manos le hizo un masaje sensual usando su semen como aceite.

Lola se había quedado dormida, y Charlie se había quedado con ganas de más.