Akira Berglind
Yo, Akira Berglind ¿Preparándose para ir a una fiesta? Sí, lo sé, es raro, pero tengo mi justificación ¿Cuál es? Sencillo, es el cumpleaños número 18 de mi amigo Gastón y yo como su amiga, tengo que asistir. No me gustan las multitudes de gente, eso ya se sabe, pero de eso no me tengo que preocupar hoy ya que a Gastón no le agradan ciertos tipos de personas por lo que sus reuniones habitualmente son de solamente familia y amigos cercanos.
Escucho como la puerta de mi habitación se abre, pasos se acercan corriendo y alguien se me lanza encima. Trato de hacer equilibrio en donde estoy sentada pero justo cuando esa persona se aleja, caigo en el suelo y debido a mi caída, no me cabe duda de que seguramente me hice una línea negra en la mejilla con el delineador y de que mi respiración se acaba de agitar al igual que mi corazón por lo que ahora siento mi cuerpo enfriarse un poco.
— ¡Akira, Akira!... ¡Lo siento! —La mano de Victoria me ayuda a levantarme— Te manchaste la cara—dice esta vez con algo de duda.
— ¿Y por quién es la culpa? —Levanto el taburete y me vuelvo a sentar frente al espejo volviendo en mí.
— No-lo-sé —Ríe seguido de eso— ¡Tengo tanto que contarte!
— Si vas a gritar, espera a que salga de aquí. Tu voz rebota en todo el lugar. —Victoria toma una toalla desmaquillante y la acerca a mi rostro— Ni se te ocurra. No quiero terminar como la última vez. —Evito que la pase por mi rostro y se la quito de la mano para hacerlo por mi cuenta.
— ¡Mala! — Chilla como de costumbre y yo hago una mueca por el sonido agudo. Estoy sensible— Tengo nuevas noticias.
— Me las cuentas camino a la casa de Gastón. —Lucho una vez más con la línea negra hasta que cede— Yo también tengo, no muchas pero tengo. —Giro mi rostro y observo de pies a cabeza a la castaña— ¿Y tú?
— ¿Yo qué? — Ladea su cabeza hacia su izquierda.
— ¿Por qué no te has vestido para la "ocasión"? — Fijo mi vista de nuevo sobre el espejo para terminar con el maquillaje.
— En realidad, cuando tú me llamaste, me iba para mi casa pero termine viniendo para acá —Sonríe bobamente—; así que tú. —Hace énfasis en "Tú" y me señala con su dedo índice—, me vas a prestar tu ropa.
— ¿Por qué eres así? —Me quejo.
— Por qué sé que necesitas mi ayuda.
— ¿En qué? —Me cruzo de brazos.
— En que quieres darle una sorpresa a Gastón con tu llegada y por eso me dijiste que no dijera tu nombre en voz alta. —Alzo la cejas sorprendida. ¿Cómo es que comprende algunas veces mis planes y cuando es algo súper sencillo de entender no lo hace?
— Acertaste. —Tomo un labial color vino y pinto mis labios— Lista, ahora faltas tú. —Me levanto y acomodo la falda. Victoria silba con gracia.
— Estás hermosa. — Suelto un bufido. — ¿Por qué solo te maquillas cuando hay algo importante?
— ¿Para qué hacerlo constantemente?
—Aunque... Para mi gusto es muy sencillo.
—Para mí está bien. Anda y busca que ponerte que es la... — Observo el reloj digital que está cerca del lavabo. — 6:30 y si te dignas a vestirte rápido, terminas a las 7:00 y para llegar serían las 7:30 si es que no hay tráfico, 8:00 si lo hay. —Saco cuentas con mi vista fija sobre el reloj teniendo en cuenta que no tenemos que esperar por alguien que nos venga a buscar— Vamos, muévete. —Aplaudo dos veces.
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Secreto entre lazos
خيال (فانتازيا)"Berglind", un apellido que ha causado miles de sentimientos desde hace varios años. Son la inocencia y la malicia entrelazadas. Preocupados por el resto, pero al mismo tiempo recelosos de su seguridad. Ellos son capaces de pasar por encima del ser...