Savi'n me (Serie Love 11)

16

Alexa

Encontró a Garreth en el comedor, paralizado, sosteniendo el teléfono contra su oído.
-¿Que ha pasado?
-Están siguiendo a Stella. La muy irresponsable me ha colgado.
-Ve a por ella.
La miró como si no la entendiese.
-Stella te necesita. Ve con ella. Yo estaré bien.
Asintió. Recogió todas las armas que pudo meter en una pequeña bolsa de deporte y se dirigió a la puerta. Antes de abrirla, se volvió hacia ella.
-Prometeme que estarás aquí cuando vuelva.
-Lo prometo.
-Hay una pistola bajo la almohada. Que no te de miedo usarla.
-Vete ahora, Garreth.
Cuando le oyó alejarse en su otro coche, bastante destartalado pero útil al fin y al cabo, buscó el arma y se sentó en el sofá.

La puerta estaba frente a ella.
No tenía pensado acercarse a las ventanas y cuando oscureciese tampoco encendería las luces.
Esperaría a que Garreth volviese con Stella, sanos y salvos.

*****

Garreth

Condujo más rápido.
Todo lo que aquel trasto viejo le permitía.
Había llamado a la central para pedir que rastrearán el coche de Stella.
Por lo visto, había entrado en la autovía con destino a las afueras.
Tenía que encontrarla.

Pisó a fondo aunque no sirviese de nada.
Intentó no pensar en que había dejado a su chica sola en casa y se concentró en encontrar a su compañera.

*****

Stella

Ya no sabía si podría seguir mucho más.
Creyó que les despistaría, pero no había manera.
Ya se encontraba en las afueras.
Miró el indicador de gasolina. Hacia al menos diez minutos que había pasado la linea de reserva.
No podía dejar el coche y seguir a pie.
Seguro que la cogerían.

Esperaba que Garreth y Alexa se hubiesen puesto en movimiento.
Miró el retrovisor una vez más.
No les veía, pero estaban ahí.

*****

Garreth

Ahí estaban.
Intentó ver un poco más adelante pero era incapaz de ver el coche de Stella. Debía llevarles ventaja.

Aceleró un poco más.
Conseguiría detenerles antes de que llegasen hasta ella.
Cogió la pistola y disparó contra las ruedas.

Tras varios intentos, logró acertar a las dos de atrás, provocando que se saliesen de la carretera y acabasen golpeando un árbol.

Se apresuró a salir del coche y acercándose lentamente, vigilando que no empezase de un momento al otro una lluvia de disparos.

La puerta del conductor se abrió de golpe.
Garreth se cubrió tras el coche de ellos, agachando. Esperando.
El conductor cayó de golpe, herido.

Sacando las esposas de su bolsillo trasero, le esposó.
Afortunadamente no había nadie más en el coche.
Reconoció al hombre que yacía inconsciente como a uno de los que habían disparado el día en que salvó a su chica en la estación.
¿Donde estaba el otro?

*****

Alexa

Tenía miedo. Mucho. No hacia más que oír reunidos y no sabía nada de Garreth.
No sabía si Stella y él estaban bien, ni lo que había pasado.

Sujetaba el arma con fuerza. Le dolían las manos por la tensión.

Escuchó el motor de un coche. ¿Garreth?
No. No sonaba como la cafetera en la que se había ido.
Quizá venían en el coche de Stella.

Algo dentro de ella le decía que no se moviese, que guardase absoluto silencio.

Unos golpes bruscos en la puerta prácticamente la hicieron saltar del sofá.
-Se que estás ahí dentro. Abre la puerta o la tiraré abajo.
¿Que demonios les pasaba a los hombres que no sabían hacer otra cosa que derribar puertas?
Mal momento para comparaciones, Alexa.

Tenía que hacer algo.
Salir de allí, ¿pero como?

Se levantó despacio del sofá intentando hacer el menor ruido posible y entró en el dormitorio.
No sabía si aquel tipo estaba solo y la idea de salir por la ventana la aterrorizaba.
No es que hubiese mucha distancia hasta el suelo pero no deseaba tener que saltar.
Los golpes aumentaron.
-¡Abre la puta puerta!
Un latido. Dos. Y empezaron los golpes para derribarla.