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-No puedo creer que se vaya a casar-Dijo any mirando al techo con sus ojos llenándose poco a poco de lagrimas.

-Yo tampoco-dijo con un tono que llamó la atención de any-...o sea por como te miraba pareciera que nunca te hubiera dejado de amar-dijo la chica captando la completa atención de any-any te miraba como...no sé como decirlo, como si estuvieras arriba de todo, como con admiración, o sea sí, se estará casando y me di cuenta el coqueteo pero por encima de eso él te mira como uno se merece que lo miren.-añadió y el corazón de any estaba espichado, soltó un suspiro y se tiro de nuevo a la cama, al parecer ella tampoco lo había dejado de amar. Siguieron hablando y como Julieta era la que había hablado con Sherlyn le contó todo, era un viaje de mochileros de un mes e iban por la mitad, se estaban quedando por el restaurante donde los encontraron, el matrimonio era dentro de cuatro meses, cuatro meses no más para que él oficialmente fuera solo un viejo amigo para ella.

Ya una vez estaban en pijama y viendo televisión esperando a quedarse dormidas unos tímidos golpes en la puerta, ambas se miraron confundidas, any al estar más cerca le tocó ir y al abrir, menos mal estaba sujetada de la puerta porque fácilmente se pudo haber caído. Un guapísimo y recién bañado poncho estaba al otro lado, vestido en una camisa azul oscura y un pantalón negro, divino como siempre, le sonrió al verla en pijama y se metió las manos en los bolsillos y rompió el silencio.

-¿por qué estás aquí poncho?-le dijo ella luego de varias formalidades, ya sin soportar la intriga y lo bien que la estaba tratando él sonrió y miró el piso

-Si bueno...salí para comer algo y como pase quise saludar-dijo él encogiéndose de hombros como si no fuera la gran cosa, ella sonrió agachando levemente su mirada

-Poncho-dijo y aún conservaba la sonrisa-tu hotel no queda cerca de aquí

-¿Ah no?-preguntó él con las cejas levantadas fingiendo una sorpresa mientras ella negaba con la cabeza-con razón se me hizo lejísimos-añadió él logrando sacar una risa a aquella mujer-solo...solo quería verte de nuevo, probablemente mañana no nos alcanzamos a ver, el tren sale temprano-le dijo y una pequeña ilusión nació en ella, pero se obligó a acabarla de inmediato por lo que sabía

-Que tengas un buen viaje, cuídate-le sugirió ella pero pareció más una petición, tenía ya intención de acabar con esta conversación pero él se acercó a ella con una mirada de suplica que la hizo quedarse allí un momento solo mirándolo

-¿Vamos a comer?-le preguntó él-any en serio ¿no te das cuenta? entre todas las ciudades que íbamos a visitar coincidimos en una, estemos un momento juntos-dijo él con un poco de dificultad, ella agarro fuerzas

-¿cómo supiste que estaba aquí?-le preguntó evadiendo lo que él dijo

-Julieta le contó a Sher-dijo él muy tranquilo cosa que la tomó por sorpresa

-O sea ¿ella sabe que estás aquí?-le preguntó y el la miro confundido

-Claro, sabes que a ella no le oculto nunca nada-dijo con una sonrisa y la chica permaneció en silencio aguantando su corazón roto-entonces ¿vamos?-añadió él ya con un poco de miedo

-No poncho, es mejor que vayas de vuelta con...Sher-dijo ella, le costó de una manera que no se imaginaba decir: tu prometida.

-Es mejor pero no es lo que yo quiero-le dijo él y ella solo le sostuvo la mirada-¿tu quieres que me vaya?-apartó la mirada de él y suspiró...¿de qué serviría mentirle?

-No, no quiero que te vayas pero deberías estar con tu prometida, no con tu exnovia-dijo con dificultad pero a la vez orgullosa de sí misma eso Anahí, las cosas llamarlas por su nombre se decía una y otra vez en su mente, él retrocedió un poco-entiende poncho...no está bien...no hay razón para que estés aquí-añadió y él oprimió sus ojos mientras miraba hacia el piso

-Tienes razón menos en una cosa...si hay razón para estar aquí, quiero saber de ti...eres una persona importante para mi...-dijo y ella una vez más le dijo las cosas en la cara

-Te conozco Poncho y si me vieras como una amiga no te hubieras vestido así ni estarías siendo tan formal, en serio...no hagas esto-le pidió ella indirectamente que no le coqueteara y él soltó una risa

-Bueno tienes razón ¿si? Pero es que quiero estar contigo Anahí, escucharte, hacerte reír...-estaba abriendo su corazón pero ella lo cortó

-Es porque nos encontramos...pero has de cuenta que no me hubieras visto y sigue con tu vida como venías haciendo-dijo ella y el negaba levemente con su cabeza, se acercó a ella cuidadosamente y encontro sus ojos con los de ella

-Se mi despedida de soltero-dijo con una gruesa voz una vez tenía el rostro de la chica entre sus manos, ella abrió completamente los ojos y sintió un cosquilleo en medio de las piernas

-Estas completamente loco-dijo ella alejándose de él-olvídate que eso va a pasar-añadió y en su tono había un poco de enojo

-Niegame que juntos éramos buenos en la cama, niegamelo y yo me voy-dijo él

-No te lo niego pero...-él la interrumpió rápidamente con una sonrisa

-Entonces es un sí

-¡No!

-¿Por qué?

-¡Porque a mi no me gustaría que me hicieras eso Poncho!-dijo la chica en la agitada situación mientras él omitía una sonrisa

-¿Hacerte qué? solo quiero que vayamos a comer-dijo él haciéndose el inocente y ella lo miró y con sus ojos le dijo "hace un minuto me dijiste que fuéramos a la cama"... estaban uno frente al otro, el le tomo las manos, y miro esos ojos azules tan profundos que no se resistió-¿no tienes hambre? o vayamos a donde quieras solo quiero saber de tu vida-preguntó de nuevo y any luego de un suspiro tuvo que confesar

-Poncho, no es que no quiera contarte todo y que tu lo hagas conmigo, pero...yo sé como soy y sé como hacer que reacciones a mi y de verdad quiero evitar a toda costa alguna...cualquier cosa, Sherlyn no se lo merece, tampoco quisiera ser la causante de dañar un futuro matrimonio, por favor no me lo hagas más difícil-dijo la chica...


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AA.

Una Historia Para Contar ¿o no?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora