Amigos por fa lean la nota que les voy a dejar al final. Ojala les guste esto. XOXO
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Poncho y Any solían comentarse viejas anecdotas mientras veían a sus hijos jugar en el gran patio de la casa, aquella que Poncho había comprado sin ni siquiera haber estado seguro que iba a volver a juntarse con su primer amor. Y aunque habían tiempos dificiles y a veces el trabajo no les permitia muchas cosas eran felices en momentos así, que los recuerdos solo venian a ellos:
Luego de la boda los años pasaron...bueno solo un par de meses tuvieron que pasar para que naciera una dulce niña; era una ternura, tenía grandes ojos y una boca roja muy pequeña, según lo que dijo Alfonso "era como ver un durazno" e increiblemente, Anahí fue la única que se rió del comentario de su esposo. No importaba que tan patético fuera este, estaba feliz, había sido sin duda la experiencia más dura que había tenido, no hay libro que te prepare para tener un parto pero estaba feliz porque todo salió bien.
La familia se reunió en el hospital, y todos celebraron la vida de la nueva participante de la familia, habían decidido tener el bebé en México para que todos estuvieran juntos; además porque los principiantes padres necesitaban de abuelas expertas que pudieran guiarlos. Pasaron los años y aunque la chica siempre se metía en problemas, era la luz de los ojos de su papá.
-¿Y por qué estás enojada conmigo?-le dijo poncho encogiéndose de hombros tratando de controlar a su rebelde hija que estaba en sus inicios de adolescencia
-¿Quien dijo que yo estaba enojada?-replicó ella controlando su vibrante voz
-Te conozco perfectamente y...-estaba diciendo él pero ella lo interrumpió
-Bueno sí, estoy harta porque no me explico que siempre todo en esta casa sea lo que esa señora diga-dijo levantando la voz asegurándose que Anahí la escuchara
-Esa señora te guste o no te dió la vida-dijo poncho reprimiendo su risa porque sabía que eso la iba a poner peor de mal genio
-¿Y? Si tu no tienes problema con que yo vaya ¿por qué ella debe ser la de la última palabra?-exclamó inconforme y poncho se acercó con un paso suave
-Porque es una decisión de ambos, aparte no entiendo que tanto problema con tu mamá si eres igualita a ella-le dijo y fijó sus ojos en los de su hija
-¿Qué?-casi gritó-¡yo no me parezco en nada a ella! ¡yo no estoy loca!-exclamó mientras se agitaba su cabello, entonces se escucharon unos pasos al final de la escalera.
-Sin gritar que despierta a su hermano, ¿o es que usted lo va a cuidar?-dijo Anahí inexpresivamente mirando a su hija y está apretó los puños a los costados-poncho no olvides que Jacob sale en media hora de entrenamiento-añadió mirando el reloj, cuando poncho le respondió tiernamente para ver si la ablandaba ella siguió derecho a su habitación.
-¿Si ves que son iguales?-dijo poncho mirando a su hija y esta agrandó sus ojos-eso sin importar que tanto incendio haya le siguen echando leña al fuego...no es que ni siquiera leña, ¡gasolina! quieren volverme loco cada vez que las reconcilio-añadió.
-Yo no soy como ella, yo si argumento mis opiniones-dijo tratando de sonar madura y Anahí suprimió una risa desde el cuarto
-Son idénticas, esa es la razón por la que chocan tanto, tienen ese mismo brillo en sus ojos que es diferente cuando están reflejando el sol a cuando están emocionadas-dijo poncho acercándose poco a poco-su mirada se oscurece cuando están en frente de una injusticia, tratan de verse serenas pero sus ojos siempre las delatan-dijo él en un tono de voz bajo-puede que en tí sea menos evidente porque tienes mis ojos, unos más oscuros, pero te lo juro que es igual-añadió suavizando la expresión de los hombros en su hija-una vez aprendas a leer los ojos de tu mamá, y entiendas que detrás de eso y tan estricta que parece hay alguien que te quiere cuidar, tu vida será más fácil-le aseguró-no es ni la primera ni la última fiesta a la que te van a invitar y si tu mamá dice que es mejor que no vayas, una razón tendrá-finalizó ya con un abrazo que solo se rompió abruptamente con las palabras expresadas por la chica "es que me invitó el que me gusta"-¿qué? ¿a ti desde cuando te gusta alguien o que? no no no señorita, eso lo puede sentir por ahí hasta los 40, no va a esa fiesta ni a ninguna que algún flacucho la invite, ¿como es...-estaba diciendo pero Anahí lo interrumpió
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Una Historia Para Contar ¿o no?
Fiksi PenggemarSegunda parte de la historia Inesperado.