Oh no. No podía estar pasandome esto a mi. ¿Porqué justamente ahora tendría que aparecer? Me acerqué a él lentamente, ya que no sabia cuál podía ser su reacción ante aquello que acababa de ver.
-Ian no es lo que parece
No dijo nada, estaba inexpresivo, y eso me asustaba más. Me estaba empezando a preocupar su reacción. Me miraba con tristeza y como si le hubiera hecho daño. Le había hecho daño, pero no fue por mi culpa, sino por ese estúpido niñato que, si esto no fuera un instituto, le pegaría hasta dejarle inconsciente. No queria hacerle daño, y el no era el único que se estaba sintiendo así.
-Ian, no...-dije de nuevo, pero no pude continuar hablando, ya que se me había cortado la voz.
-No te molestes en darme explicaciones, he visto todo lo que tenía que ver-dijo bastante calmado de lo normal.
No me gustaba cuando estaba en esta situación y se mostraba tan calmado. Hubiera preferido que se pusiera hecho una furia, porque como estaba es mucho peor.
-No, Ian esque...
-Te he dicho que no me lo expliques-dijo cortandome y dejando la frase sin acabar.
Me miró bastante dolido y se giró para irse por donde había venido. ¿A donde iria? No podía dejarle ir sin al menos explicarle el error que habia pasado. Se alejaba demasiado deprisa y tuve que correr para alcanzarle. Le agarré de la muñeca para que se diese la vuelta y me mirara, pero no lo hizo. Con un movimiento brusco se zafo de mi mano y se fue. Sentí como los ojos empezaban a humedecerse, pero aquí delante de todos no iba a llorar. La gente empezaba a caminar por los pasillos y tendría que irme de aqui si no queria que me vieran llorar. Me volví hacia el sitio en el que se escontraba Ethan, que me estaba mirando. Le miré con rabia y bastante odio que no sabía que tenía contra él. Me acerqué a él y le di una patada en todo el estómago, se retorció y cayó al suelo. Me alejé de allí lo mas rápido posible y sentía como algunas personas fijaban su mirada en mí. Miré hacia atrás y un montón de gente se estaba empezando a reunir alrededor de Ethan para ayudarlo. Muchos se estarían preguntando qué habría pasado y otros inventarian sobre lo ocurrido. Salí del instituto corriendo y me dirigí a mi casa.
Me tiré en la cama y todas las lágrimas que había retenido antes salieron. No se cuanto tiempo estuve llorando pero tenía toda la cara inchada y el colchón estaba mojado. Fui al cuarto de baño y me miré en el espejo. Tenía los ojos rojos de tanto llorar, y la nariz de sonarme los mocos. Daba miedo con este aspecto, y encima con la cara inchada. Se veían algunos manchurrones negros del maquillaje, y menos mal que está mañana había usado poco. Miré la hora y faltaban 2 horas exactas para que mi padre llegara, y no podía verme con este aspecto. Me metí en la ducha e intenté calmarme un poco y relajar la mente. Lo intenté pero se me venía a la cabeza el rostro de Ian en cuanto lo miré. Dios, lo que había hecho estaba mal, pero yo no he tenido la culpa, fue el estúpido niñato ese al que nunca debería haber perdonado por lo que me hizo. Ian tenía razón, me había hecho daño una vez y seguro que me lo haría una segunda. Tenía razón. ¿Porqué no le escuché? Siempre hago lo que me da la gana y me sale todo mal. Intentaba ayudarme y yo pasé de su consejo. Odiaba que tuviera razón, pero soy una cabezota y no le escuché. ¿Como le explicaría todo esto ahora? Seguramente que no querrá ni verme, y menos a ese niñato. Solo me quedaba Sam. ¿Hablaria con ella? Ojalá que Ian se lo cuente y que le diga como se siente y que luego ella me ayude a explicarselo. Tendría que escuchar las dos versiones, aunque no creo que Ian le cuente mucho. Tendría que llamar luego a Sam y contarselo todo... ¿o no? Ella me dijo que le pasó algo con él y no queria arruinarlo todo. Mejor no se lo cuento, y si se entera, que sea porque Ian se lo halla contado.
Salí de la ducha con los dedos arrugados, y eso significa que habia estado un buen rato pensando. Cogi la ropa para estar por casa, que consistía en unas mallas y una sudadera, y mis zapatillas. Miré de nuevo el reloj y faltaba 1 hora. Seguramente cuando llegara se preguntaría porque estaba aquí, así que tenía que pensar algo para decirle. Podría decirle que me dolía la cabeza y me sentía mareada. Perfecto, el problema con mi padre ya estaba solucionado. Bajé al salón y encendí la tele. Hice zapping y no había nada que me gustase, por lo que la volví a apagar. Necesito hacer algo para entretenerme y no pensar más en él. Ya no iba a llorar más, ya lo había hecho durante un largo tiempo y llorando no se solucionan las cosas. Además, seguramente no me quedaría ni una lágrima, las había llorado todas. Miré a la estantería en la que estaban todos los marcos de fotos y álbumes. Me levanté del sofá y queria volver a revivir los momentos de las fotos. Cogi el primer álbum de fotos que encontré y lo abrí por la primera página. En la primera foto se encontraba una bebé recién nacido con pocas horas, y tenía un mechón de pelo pelirrojo. Obviamente era yo. Segui pasando las hojas y apareció una mujer de unos 25 años con un bebé de 5 meses en brazos. La mujer sonreia al bebé muy tiernamente y este se reía. Odio a esa mujer, y creo que la odiaré hasta que me muera. A saber donde está ahora sabiendo que tiene 3 hijos y un marido al que abandonó. ¿Como se sentiría sabiendo que abandonó a su familia hace 6 años? A mi ni se me pasaría por la cabeza abandonar a mi familia, por muy mala que fuese la situación. Papá nunca me ha hablado de ello, al principio porque yo era muy pequeña pero a medida que crecía empezaba a hacer preguntas y nunca me respondió. Una de esas veces, cuando tenía 13 años, se enfadó tanto que me castigó en mi cuarto sin salir. A partir de ahí, no le pregunté más nada porque seguramente no me diria nada. Tuvo que ser bastante duro para él, ya que se había quedado con la responsabilidad de 3 hijos pequeños, y encima teniendo que trabajar casi todo el tiempo. Al principio tuvo que contratar a una niñera, pero esta dimitió debido a mi mal comportamiento y que no soportaba a otra mujer en esta casa que no fuera mi madre. La echaba de menos cuando se fué, pero a medida que pasaba el tiempo me hacia la idea de que no volvería, por lo que empecé a odiarla. Aparecieron más fotos de esa mujer sonriendo y me negué a pensar en ella. Cerré el álbum y lo deposite donde se encontraba. Cogi el más reciente y en el que seguro no aparecería ella. Lo abrí y la primera foto que salio fue una de Chris, Iggy y yo. Estabamos en un parque sentados en un banco y yo llevaba dos coletas y flequillo. Mi hermano se encontraba a mi lado y le pasaba la mano por el hombro, y en mi regazo mi hermana. Tendría 10 años en esa foto, mi hermano 5 e Iggy 1. Parecíamos felices. Saqué la foto y le di la vuelta. << 1 de Abril del 20...>> no se veía bien en que año pero seguro que fue en el año en el que nos abandonó. Dejé la foto como estaba y segui pasando. Al principio era fotos algo tristes pero luego emlezaron a alegrarse: el 2 cumpleaños de mi hermana, la graduación de infantil a primaria de mi hermano... y muchos más recuerdos. Recuerdo que todos los cumpleaños lo celebramos en casa, solo nosotros, ya que no teníamos familia aquí. Mis padres cuando se casaron compraron esta casa porque a su esposa le encantaba este lugar y además aquí había buenas ofertas de trabajo para mi padre, por lo que accedió. Al principio nuestra familia no queria que nos viniesemos aquí, ya que estaba muy lejos, pero al final lea dejaron. Antes venian a visitarnos pero hace años que no vienen. Solamente llaman cuando son nuestros cumpleaños, si se acuerdan.
Vi al menos un álbum entero pero no me dio tiempo a ver otro porque llamaban al timbre. Miré el reloj y no podia ser mi padre, así que seguramente será la vecina o alguien con un paquete para él. Me levanté, me acerqué a la puerta para abrir. No tenía ganas de ver a nadie y queria estar sola. ¿Seria Sam?¿Ian? No lo sabia, lo sabría si abriera la puerta. La abrí y me escandile un poco los ojos, habia demasiado sol. Me costó enfocar a la persona que se encontraba delante mía. No podía estar pasando. No. No. ¿Como era esto posible? ¿Me lo estaba imaginando? No podía estar aquí, pero estaba, y delante de mí.
Mi madre.

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Rebeld
Fiksi RemajaDaniela becker es una chica pelirroja de ojos negros que solo sabe meterse en lios y peleas. Tan solo tiene 16 años y tiene su historial manchado de faltas y gamberradas que hace con sus amigos. O eso cree ella, que son sus amigos. Daniela conoce a...