Rebeld

32

Antes de que venga Ian saco todos los cacharros que vamos a utilizar para hacer la tarta. Mi hermana me ha preguntado varias veces que si ella puede comer la tarta cuando la hagamos, pero no se si lo que haga será comestible. Miro el reloj nerviosa por que venga ya, pero todavía no es la hora. No se que hacer para matar el tiempo mientras viene.

-¿Daniela?-pregunta mi padre desde el salón. Me acerco al salón y le veo apagando la televisión.

-¿Qué pasa papá?

-Voy a ir a comprar al supermercado

-¿Te vas a llevar a mis hermanos?

-No lo sé ¿Porqué?

-No quiero que estén aquí, molestan.

-Oye que yo no molesto-dice mi hermano detrás mía.

-¿Vas a irte con papá?-le pregunto a mi hermana.

-Si, porque según tú aquí molesto. Además me tiene que comprar una cosa.

-¿Y qué pasa con Iggy?

-Esta arriba dibujando-contesta él.

-Pues dile que baje y que se valla-le digo.

-Tu hermana se queda aquí, cuida de ella y que no me diga nada. Nos vamos-dice mi padre cogiendo las llaves.

Al menos mi hermano se va. Aunque la que realmente molesta es ella, pero bueno que se le va a hacer. Mi padre abre la puerta para marcharse y veo a Ian en la puerta algo sorprendido de que abran la puerta porque aún no había llamado.

-Hola-dice Ian.

-¿Quién eres tú?-dice mi padre confuso.

-Es Ian, es amigo mio de clase-digo yo rápidamente.

-¿Por eso querias quedarte sola en la casa?-dice mi padre.

Al instante me doy cuenta de que me he puesto colorada. No me esperaba eso de mi padre. Le miro y él suelta una sonrisa, y me doy cuenta de que lo ha hecho queriendo esperando mi reacción. También miro a Ian, que está un poco ruborizado.

-Nos vamos, y recuerda que arriba está tu hermana-dice y sale por la puerta. Ian entra y la cierra.

-¿Qué ha sido eso?-pregunta riendose.

-No lo sé, normalmente no hace eso-digo devolviendole la sonrisa.

Me giro hacia la cocina y le hago una señal con la mano para que me siga. Entramos en la cocina y cojo la receta de la tarta. Me doy la vuelta para que él pueda verla pero me la quita de las manos y la examina.

-¿Está aqui todo lo que necesitamos?-pregunta.

-Supongo que sí.

-Pues empecemos-dice sonriendo.

Comenzamos mezclando en un cuenco leche y levadura. Ian me dice cómo tengo que mover la batidora para que quede bien, y más de una vez me pone la mano en el hombro, por lo que me pongo aún más nerviosa. Él es bastante bueno en la cocina y parece un chef dándome ordenes para que el pastel salga bien. De vez en cuando se lo digo y que solo le falta el gorro, y el se rie. Tiene una sonrisa preciosa, y me encanta su voz. Desde la primera vez que le escuché hablar me encantó. También su sonrisa, sus ojos... cuando lo vi todo de él me encantó. Me acuerdo de cómo nos conocimos, y no se si él se acordará. Estaba yo con Ethan en una pelea de skizt y pelearon juntos, luego vino la policía e Ian me ayudó a salir, y yo como una desagradecida sin darle las gracias ni nada.

-El planeta tierra llamando a Daniela, ¿Me escuchas?-dice pasando una mano por delante de mi cara.

-¿Qué me estabas diciendo?-pregunto sacandome de mis pensamientos.