CAPITULO 21

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Mis propios ronquidos me despertaron, me odié en ese momento, miré hacia afuera y ya era de día, levanté la cabeza para ver la hora en el reloj digital y marcaba las 10:00 a.m.

Me obligué a salir de la cama, para dirigirme a la cocina, el estúpido yeso me estorbaba y la picazón aumentaba, traté de ubicar el palillo chino y recordé que estaba en mi mochila que quedó tumbada sobre uno de los sillones.

-Mamá. –La llamé. –Mamá. –Pero la casa parecía en penumbras.

-Hola Seline. –Una voz de mujer me hizo voltear.

-Eres tú. –Me alegré de verla, cientos de interrogantes me atormentaban al punto de volverme loca.

-Solo tengo unos minutos antes de que nos intercepten.

-¿Quiénes? ¿Qué me está pasando?

-Las Sombras, y lo que has experimentado es normal, tu don surge.

-¿Las Sombras? ¿Mi don?
–Cuestiono frustrada. -¿Hablas en paradojas?

-Seline, no sabes lo especial que eres.

-Me llamo Tabatha, y no me gusta lo que me sucede.

-Hay tanto que aclarar, sé que estas confundida, pero corres gran peligro.

-¿Qué? –Toqué mi pecho ya que el corazón se me aceleró.

-Tú no eres quién crees, tu linaje es real, tu madre se llamaba Rabana, fue gobernante en tierra de Banshees pero traicionada y perseguida hasta su muerte, busca a tu protector.

Oscuridad comenzó a envolver la casa por fuera, aquella sensación de temor se incrustó en mis entrañas.

-Encuentra a tu guardián, sabrás quién es en cuanto lo veas.

Su figura se desvanece y yo desperté sobresaltada. Es aún de noche, ¿otro sueño? No demasiado real. No pude dormir de nuevo, apenas amaneció dirigí mis pasos a la recámara de mis padres, al entrar, papá ya se preparaba para ir a trabajar, mamá pereceaba en la cama, conversando con él.

-Tabi ¿Qué haces despierta tan temprano? –Consulta papá.

-Requiero respuestas, y les ruego, sean sinceros conmigo.

Me miraron extrañados, ¿Qué les iba a decir? Hey soy una banshee, lo cual por cierto, desconozco qué es, ¿Qué saben al respecto? Hasta en mi cabeza sonaba terrible, mínimo terminaría en un psiquiátrico.

-Por supuesto amor. –Mamá se endereza quedando sentada sobre la cama.

-He experimentado una serie de eventos extraños. –Guardé silencio, maquinando cómo continuar.
–Recuerdas el día en el cementerio, cuando dejamos flores en la tumba del padre de Mildred.

-Sí cariño. –Mamá frunce el ceño, obvio no entiende porque hago mención de ese tema.

-Desde antes de ese día, tuve una clase de premociones, no sé ni cómo llamarlas con exactitud. –Me abrazo, a la vez que suspiro. –Supe que el padre de Mildred moriría, vi la muerte de Pulgoso.-Su nombre se me atravesó en la garganta. –Y otros acaecimientos.

Mamá y papá intercambian una mirada, sus rostros se ensombrecen, sospecho que ellos saben algo que yo no.

-Ven hija. –Mi madre me extiende la mano, procedo a sentarme a su lado; papá nos observa en silencio.

-Lo primero que debes saber es que te amamos muchísimo.

-Lo sé mamá, y yo a ustedes.

-Oh Dios, esto es tan difícil. –Ella se levanta de improvisto y camina hacia la ventana, dándonos la espalda.

OSCURIDAD Donde viven las historias. Descúbrelo ahora