CAPITULO 35

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Jamie sugirió que Julissa debía aprender a usar sus poderes, recientemente heredados, cortesía de su hermano. Yo, por el contrario, la quería fuera de esto, pero mi amiga, testaruda como siempre, estuvo de acuerdo, pero por las razones equivocadas, deseaba vengarse de los que asesinaron a Sam. La venganza te ciega, nada bueno puede resultar ya que te dejas llevar por las emociones.

Cada día después de la escuela, Juli llegaba y practicaba con Jamie; por su lado Ben, mejoró en gran manera, su empeño y decisión lograron, que pudiera controlar su transformación. La prueba real sería en luna llena, ya que influye notoriamente en él.

Los días en aquel encierro, me pasaban la factura, me sentía como león enjaulado. El cautiverio no me agradaba, al menos Ben y Julissa retornaban a sus hogares, iban a la escuela, continuaban con sus vidas, pero ¿Y yo? Esto fue motivo de una discusión con Jamie, que opinaba diferente.

-No te dejaré salir, no insistas. –Se cruza de brazos.

-No soy tu prisionera ¿Oh sí? –La fulmino con la mirada. –He aprendido mucho esas últimas semanas, estoy lista para reunirme con los Sombras que me apoyan y con Soria, es mi deber terminar con esta guerra sin sentido.

-Una cosa es que practiques con Camile, y otra muy diferente en enfrentar al enemigo real. –Me señala.

-No puedes mantenerme encerrada de por vida, mi deber con mi pueblo me llama, compréndelo.

-¡Tú deber! ¿Desde cuándo aceptaste lo que eres?

-Desde el momento en que Sam murió. –Aún dolía su partida, pero se convirtió en un incentivo, solo que a diferencia de Julissa, me movía un sentimiento de justicia. Soy una princesa Banshee, mitad Sombra, es mi destino gobernar, y finiquitar esta pesadilla.

-Le preguntaré al Consejo.
–Responde no dando el brazo a torcer.

-No soy una hechicera, no le debo nada a los tuyos ¿Por qué debo regirme bajo sus condiciones?

-Buen punto. –Expresa Camile, que está con nosotros, pero hasta ese instante, guardaba silencio.

-Tú no opinas. –Le advierte Jamie molesta.

-Estoy del lado de mi sobrina, no sé cuál es tu interés en que permanezca aquí. –Se coloca a mi lado.

-Sólo me preocupo por su bienestar.-Nos mira a ambos.

-Pregúntale al Consejo entonces.
–Recomienda mi tío. Me quedo con la boca abierta, primero me apoya y luego le da a ella vía libre para comunicarse con los hechiceros.

-No me tardo. –Cierra los ojos y se desconecta.

-Pero qué.... –Mi tío, me guiña un ojo y con la mano me pide que lo siga. Lo hago y para mi sorpresa nos dirigimos a la puerta, enseñándome las llaves del coche de Sam en sus manos.

-Te adoro. –Lo abrazo.

-Lo sé, vamos, arreglé una reunión con Támbar, es mi mano derecha, nuestros aliados quieren conocerte.

-Bien. –Sonrío imaginando la cara de Jamie, cuando se entere que no estamos. Al comunicarse con el Consejo, abandona su cuerpo, y su esencia viaja hasta Cantabria, por lo que, era nuestra oportunidad para huir.

Camile se detuvo de camino, lo que llamó mi atención pero suspiré aliviada al ver a Ben y Julissa, abordar el vehículo.

-Necesitamos refuerzos. –Me sonrío mi tío, aunque tenía poco tiempo de conocerlo, ya le estaba tomando aprecio.

Camile condujo durante horas, se alejó de la población hasta desviarse fuera del camino hacia una casa que a simple vista, denotaba abandono.

-Llegamos. –Se quita el cinturón de seguridad y se baja del carro, lo imitamos.

OSCURIDAD Donde viven las historias. Descúbrelo ahora