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Intro

    —¿Así que nuestro pequeño Yugyeom  se presentó como un alfa? —comentó curioso Mark con la mirada fija en la pantalla de su celular.

    —Síp.

    Youngjae había ido a visitar a Mark a los dormitorios de su universidad como siempre hacía cuando se aburría o quería ver al mayor.

    —Y vos aún no nos das señales de ser algo en especifico.

    —Nada. Probablemente sea un beta. —Se encogió de hombros restandole importancia mientras se estiraba en la cama de Mark y empezaba a jugar con la almohada.

    —Um, puede que seas un omega.

    Youngjae lo vió con diversión y esperó que el mayor dijera que bromeaba, como no fue así no pudo controlar la ola de carcajadas escandalosas y sarcásticas que le vinieron justo después y Mark lo miró confundido por su reacción.

    —Eso es prácticamente imposible, Mark hyung —habló mientras trataba de regular su respiración y su risa.

    —¿Por qué es imposible? 

    Lo miró con las cejas alzadas como si su pregunta fuera de las cosas más tontas que había escuchado y tuviera una respuesta demasiado obvia. Mark le dijo que le respondiera y Youngjae no pudo evitar la risita medio burlesca que dejó salir, y empezó a hablar y dar sus razones.

    —A) No tengo una sola característica de omega. B) Nadie nunca me ha considerado maternal o tierno, o algo por el estilo. C) Jamás me he sentido sumiso ante nadie, ni he tenido ganas de "mostrar la pansa" —hizo comillas con sus dedos —. D) La voz de los alfas nunca me ha afectado más de lo normal. Y E) -Pero no menos importante- en mi familia no nace un omega desde hace como 4 ó 5 generaciones y no voy a ser la excepción. —sonrió triunfante.

    Mark había dejado su teléfono para darle atención a las palabras del no presentado y poder dar su respuesta.—A)Ser omega no es tener las características típicas. B)No es necesario que seas maternal o algo, apenas tenés 17, sos un niño hormonal. Y muchos te hemos dicho que sos adorable. C)No tenés porqué ser necesariamente un agacha–cabeza. D)Eso demuestra que serías un omega bastante fuerte, muy pocos pueden hacerlo. Y E)Sabes perfectamente como yo que los parientes no influyen en la naturaleza. Soy un ejemplo perfecto.

    Youngjae quizo alegar contra eso, pero no pudo. Porque Mark era un alfa, nacido de una pareja de betas. Con abuelos betas por parte de padre, y beta y omega por parte de madre. Mark había nacido siendo un bebé bastante callado y débil, y así se mantuvo. Mark era algo bajo, delgado, tímido y bastante introvertido, con un fino rostro con facciones hermosas, labios gruesos y un cuello largo y grácil. Mark era más ágil que fuerte. Con una personalidad tranquila y amable; Mark resultaba como el prototipo “perfecto” de omega, y más de uno ya le había puesto el ojo. Para todos era más que obvio que sería un omega. Pero esa idea murió antes de haber nacido; cuando Mark en su primer celo no desprendía un olor dulce y delicado como se esperaba, Mark olía a hojas de tabaco, a canela y a té. Mark era un Alfa y ni él podía creérselo.

    —¡Eso es distinto! Lo tuyo fue pacto satánico. Y ¿por qué tanta cosa con que sea un omega? —farfulló molesto y con un mohín.

    —Envidioso —se mofó Mark —. No es que me tenga alguna cosa con eso, si no que hablas de ello como si fuera la peor cosa del mundo.

    —¿Y no lo es? —frunció los labios en señal de disgusto —. La división social hacía los omegas, el que tengan que verse de tal o cual manera, lo que deben o no hacer porque son "omegas" y "deben actuar como tal". El riesgo de sólo salir a la puta calle. Tener que obedecer y respetar a todos los que tengan un rango superior. También el hecho de que tu opinión casi no cuente, lo difícil que es qué te tomen enserio a vos y tus opiniones. Y muchas más mierdas, ¡y, sobre todo eso, las malas palabras! ¡no deberías decirlas porque sos un omega! Que me la chupen, enserio.

    Mark rió un poco por lo último. Y vio a Youngjae quien se encontraba todo alterado y molesto. La nariz de Mark se movió por inercia, esperando encontrar el olor picante que normalmente percibía cuando alguien se enojaba, pero obviamente nada llegó.

    —Todo es cierto, pero, no tendrías porqué hacerles caso, no tenés porque ser un muñequito de pastel perfecto, si no sos así no vas a forzarte. Y en estos tiempos las cosas han cambiado mucho, Youngjae.

    —Pero eso no quiere decir que no siga pasando. Y no hables como si yo fuera un omega —farfulló, se cruzó de brazos y se encogió molesto en sí mismo, como un niño haciendo berrinche.

    —No debería seguir pasando, pero no se puede evitar, no todos usan la cabeza. Y ser omega no es malo. —Mark rodó los ojos.

    Youngjae gruñó y soltó con molestia un "como sea" y con eso dieron por terminada la pequeña discusión. Se acostó boca abajo en la cama de su amigo, aún algo enojado por el tema que habían sacado, siempre se alteraba con ese tipo de cosas; pero no podía evitarlo, odiaba lo idiotas que eran las personas. Mark sabía que estaba molesto y por eso se acercó a acariciar el cabello castaño con cariño, Youngjae era como un cachorro a veces y las caricias lo relajaban. Y Cuando las caricias lo calmaron se acercó más a Mark y luego jaló la pierna de éste para que se sentara en la cama y él apoyara su cabeza en el delgado muslo del mayor.

    —Niño mimado.

    —El peor de todos.

Oh, shit! I'm an Omega [2Jae] ||ABANDONADO||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora