07.-

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POV Omnisciente

Un mes después

Ya había pasado el cumpleaños de Faith, quien estaba encantada con su conejo al cual había nombrado Joseph.

Ese día era el cumpleaños del moreno y Faith estaba en la casa del enojón, ya que era su día para que este la cuidara.

-Entonces, qué hace tu papá cuando está solo?.-Preguntó Jaime, intentando planear algo.

-Siempre duerme.-Respondió Faith, pensando en aquello por unos segundos, tomándose un momento para luego seguir hablando.-O está viendo películas y series en Netflix.

-Nada más? No sale con alguien, cierto?.-Cuestionó el enojón, algo tenso en realidad, pero también necesitaba saber eso.

-No que yo sepa.-Contestó su hija, con el ceño fruncido.-Con quién saldría?

-No lo sé, con algún amigo, algo así.-Dijo el híbrido, dándole ejemplos.

-No.-Dijo la hija de Nicolás y Jaime, muy segura de eso.

-Bien.-Dijo el señor Navarro, pensando en algo por un par de segundos para luego observar a su hija.-Necesito que hagas algo, princesa.

-Qué cosa?.-Preguntó Faith, completamente curiosa y queriendo ayudar.

-Necesito que tú y tus tíos decoren toda la casa por el cumpleaños de tu papá.-Dijo el alfa, con una pausa.-Yo voy a hacer tiempo. Y cuando todo esté listo, me mandas un mensaje, si? O me llamas.

-Está bien.-Dijo su hija, bastante animada, para luego darle un leve beso en la mejilla.-Anda!

Jaime rió y desapareció de su casa, causando que su hija se pusiera en marcha de inmediato.

El señor Navarro apareció afuera de la casa de Nicolás y sacó sus llaves para luego abrir esta. Apenas hizo esto último, entró y cerró la puerta.

No se escuchaba nada en toda la casa, causando que supiera que su omega estaba durmiendo, haciendo que sonriera ligeramente.

Caminó hacia la habitación de Nicolás y cuando entró a esta, el pequeño moreno no estaba, causando que frunciera el ceño.

Agudizó su oído y escuchó algo en el baño, haciendo que estuviera confundido. No sabía que casi toda la casa de Nicolás estuviera con un material insonoro.

Abrió la puerta del baño y lo que vio, lo dejó en estado de shock.

Su pequeño omega estaba apunto de enterrarse una daga, causando que el señor Navarro se la quitara de inmediato, no sabiendo qué pensar.

El pequeño moreno se giró y lo miró. La expresión de este pasó de confusión a miedo y vergüenza.

-Qué mierda crees que ibas a hacer?!.-Preguntó Jaime, completamente enojado y desesperado.

-J-Jaime yo...

-Hay gente que te ama, Nicolás, tienes a Faith que te necesita.-Dijo el recién nombrado, no sabiendo qué pensar.-No puedes hacer esto. C-Cómo pudiste ser tan egoísta, Nico? Cómo...

-Jaime, sólo...

-Todos nuestros amigos te aman y te necesitan!.-Dijo Jaime, no dejando que su omega hablara.-Yo te amo, Nicolás, y no puedo vivir sin ti!

El pequeño moreno lo miró por unos segundos, mientras tenía los ojos aguados en realidad.

-Te amo.-Volvió a decir el enojón, después de varios segundos. Antes de eso, había dejado la daga en otra parte mientras intentaba procesar todo eso.

Desde cuándo Nicolás había pensado en suicidarse?

Siempre lo había observado antes. Notaba que el pequeño moreno ya no era el de antes.

Recordaba cómo era su omega antes. No es que este hubiera envejecido, porque aquello era imposible en verdad, pero no se veía feliz. La única vez que podía asegurar que lo era, es cuando estaba con Faith.

De hecho, su omega se veía hasta cansado y el enojón no quería eso. Deseaba que el moreno fuera feliz por siempre.

Se miraron por un par de segundos para que luego el pequeño moreno se acercara a él para después besarlo, causando que el enojón se quedara quieto por un par de segundos para luego corresponderle completamente desesperado, necesitando aquello en ese momento, y bueno, siempre.

El híbrido colocó su mano en la columna del moreno, acercando aún más a este a él.

El pequeño moreno se separó después de varios minutos, no demorándose nada en colocar su cara en el cuello del híbrido, no queriendo ver a este.

-Lo siento.-Murmuró Nicolás, completamente debilitado, derramando un par de lágrimas.-Y-Yo no quería... sólo...

-Tranquilo.-Dijo Jaime, sabiendo que el pequeño moreno no podía ni hablar en ese momento.-Inhala, exhala.

El pequeño moreno se quedó callado sólo un par de segundos.

-Me he sentido tan mal estos días, Jaime.-Dijo el moreno, por fin pudiendo decir una frase coherente.-Bueno, hace mucho, y yo sólo creí que... nada cambiaría si yo no estuviera. No quería llegar a esto, pero... no lo soportaba.

-Qué no soportabas?.-Cuestionó el enojón, sintiendo un profundo hueco en su pecho.

-Estar solo.-Dijo el pequeño moreno, después de unos segundos.-Cuando Faith se queda contigo y yo estoy acá, siento que no tengo nada.

-Me tienes a mí, Nico.-Dijo el híbrido, tomándose un momento para luego seguir hablando.-Me tienes a mí, a Faith y todos nuestros amigos.

El pequeño moreno no le dijo nada, porque aunque supiera eso, no significaba que dejaba de sentir aquellos sentimientos pesimistas y dolorosos.

El pequeño omega sintió como su alfa lo sacaba del baño y luego lo recostaba encima de la cama, causando que pudiera ver el rostro de su omega.

-No es el cumpleaños que esperaba.-Dijo Nicolás, casi sin humor, causando que el enojón lo observara para luego acostarse al lado de él.

El señor Navarro hizo que el moreno se acercara más a él para luego colocar su brazo por los hombros del omega.

-Por qué estamos mirando el techo?.-Cuestionó Nicolás, quien estaba mirando al híbrido.

-Sólo mira.-Dijo Jaime, para luego estirar un poco su mano para después moverla unos pocos segundos. Después de eso, volvió a colocar su mano en su lugar, mientras que el techo empezaba a tomar formas.

A los pocos segundos, estaban viendo la galaxia, causando que el pequeño moreno estuviera maravillado.

-C-Cómo...

El enojón no dejó que su omega siguiera hablando para después sentarse en la cama, causando que Jaime volviera a mover ligeramente sus dedos.

Ahora la habitación empezó a desaparecer y comenzó a tomar otras formas, que después el pequeño moreno supo que "estaban" en una selva tropical.

Vieron pasar varios animales como monos, jabalís, un par de loros, mariposas, camaleones y muchos más en realidad.

El pequeño moreno observaba todo esto casi como si fuera un niño en un zoológico, causando que el híbrido sólo lo mirara a él en vez de aquella "maravilla".

En realidad su maravilla siempre sería Nicolás.

Parents (Jainico). Donde viven las historias. Descúbrelo ahora