Papá Viudo |HS|

Capitulo 50.

***HARRY***

Volví a entrar a la habitación y vi a Evans profundamente dormido. Necesitaba ir a la reunión pero no podía llevarlo ni dejarlo aquí. Salí de la oficina y afuera de esta estaba mi asistente en su escritorio haciendo apuntes. Cuando me vio me sonrió tiernamente. De seguro me vi estúpido gritándole eso a mi ex mujer.

—Necesito un favor Teressa, podrías cuidar a mi hijo? Esta adentro durmiendo.—Sentía la necesidad de llamarle hijo. Lo era. Lo había cuidado dentro del estomago de Cara por nueve meses y padre es el que cuida no el que engendra. Por algo Mikaela, fue la madre de Destiny.

—¿Lo has traído Harry? —pregunto anonadada.— es solo un recién nacido. Tiene 2 días Harry.

—Sí pero me he dado cuenta de algo muy grave Teressa y no podía dejar que Cara sospechara.

—Ni me hables de esa bruja. —Hizo una mueca de asco. La mire mal y negué. Ella asintió y entro a mi oficina cerrando la puerta.

Subí al ascensor y pude darme cuenta de que todos aun me miraban curiosos. Es decir, yo también estaría así si no fuera mi lugar. Un hombre gritándole a su ex mujer que aun la ama a pesar de que un tiene un hijo de otra mujer por serle infiel y ella esta comprometida no es normal del todo. Llegue al piso de Quiste. Porque era una gran sala redonda que se había hecho por equivocación y quedo estorbando y molestando a los empleados como un quiste. Como un quiste en el seno del edificio.

Toque la puerta de la sala principal esperando que me dejen pasar. El padre de Mikaela me abrió la puerta con una sonrisa. Para ser el ex marido de su hija no se lo tomaba tan mal.

—Pasa Harry. Justo habíamos preguntado por ti. —Río este con ironía.—

—Buenas tardes. Soy Harry Styles, codueño de la compañía Fly. —Me presente hacia el grupo de koreanos que me miraban expectantes. Todos hicieron una reverencia presentándose sin palabras. Había un par de traductores en los extremos de la habitación. Me senté en mi silla al lado de Mikaela, donde he tenido que estar siempre al lado de Mikaela por estos 9 meses.

¿Si era incómodo? Mucho. La mire y ella me estaba viendo. Volvió su vista al frente rápidamente donde uno de los koreanos exponía su idea para poner varios puestos en Korea del Sur y su traductor hablaba en español. La admire unos segundos. No podía creer que ya no seria mía. Ella me miro nuevamente pero con el ceño fruncido, como si le molestara que la mirara. Reí un poco y me volví al frente de nuevo. Solo jugaba con ella y siempre se molestaba. Extrañaría eso y mucho.

—El señor Chicomoyo, quiere saber si los codueño están de acuerdo.—Hablo el traductor que también era koreano. Mierda. No había prestado atención. Mire a Mikaela y esta asentí. Bueno, ella si presto atención, seguro sabe lo que hace. Asentí dándole la razón.

—¿Que es lo que más te gusta de esta idea Harry?—Pregunto Mikaela. ¡Vaya! Con que quería hacerme ver mal frente a todos, ¿eh?

— Pues no lo sé Mikaela, en general todo es una buena idea así expandimos mas la empresa. Pero me gustaría saber que no te gusto a ti. ¿Algo tiene estos que a nadie nos parece?—Le replique. Ja!

— Si, no me agrada que nuestros libros no vayan a tener nuestro selló más grande que el de la compañía Korea.—Mierda, si había prestado atención. Tenían que cambiar de tema antes de qué me devolviera la misma pregunta porque ahí sin estaba frito.— Bien, creo que es un trato muy bien planeado. —Les sonreí a los koreanos. El traductor les dijo algo inentendible y todos asintieron y sonrieron de igual manera. Mire a Mikaela y ella también me miraba, se sonrojo pero envés de quitar su mirada me sonrió. Vaya y hermosa ex mujer que tengo. Una fortuna era lo que tenia Zayn en sus manos. Le sonreí de vuelta y estreche su mano. Ella la miro confusa pero también lo hizo.

—¿Amigos? —Le pregunte. Quería saber si al menos podíamos ser eso.

—Tal vez no pero si socios. Te parece?— Le sonreí y asintió. Me bastaba y me sobraba viniendo de Mikaela—

—Todos estaban saliendo y cuando ella se disponía a salir la tome bruscamente (sin querer) del brazo y le di vuelta quedan do viéndome. La tome de la nuca y la obligue a besarme. Un beso el cual no esperaba ser correspondido, sin más lo fue. Nos besábamos por última vez. Una última oportunidad. Luego de segundo parece que Mikaela recapacito lo que hacía y se separo de mi

—Te amo, Mikaela.—Le susurre—

—Y yo a ti Harry pero ya no más. No más sufrimiento ni engaños, o dolor Harry. Quiero en un nuevo hombre como el que tu antes eras para mí. Cariño y amor. Zayn es el indicado lo sé.

—Mikaela, yo solo no quiero que te hagan daño sí. Confió en Zayn porque te quiero y sabes lo que haces me entiendes pero yo te sigo amando. —Le dije con un hilo de voz. Una lagrima se resbalo de mis ojos. No lo podía tolerar. La amaba y la estaba perdiendo lentamente.—

—Lo sé Harry, sé que me quieres y yo también y te deseo lo mejor para ti y a Cara. Y aunque el bebe no sea tuyo amalo Harry. Porque un papa no engendra, un padre cría. O si no Destiny jamás habría tenido una madre. —Beso mi mejilla y salió de la sala dejándome solo con una sola mentalidad. Mikaela era una mujer sabia, paciente, con carácter y a la vez con sentimientos. Una madre responsable y esposa activa, una gran amiga y confidente. Debía seguir sus palabras y dejarla ser feliz y estaba seguro de que yo la había hecho feliz más de una vez

Debía recuperar a Mikaela y hacerla feliz de nuevo.